Ya era hora del almuerzo, y Sharlotte estaba buscando a Ethan, fue a su curso, y no estaba, a la cancha, a los baños, busco en todos lados y no lo encontraba.
Solo quedaba él aria abandonada en el piso de arriba, pero estaba segura que ahí no iba a estar, en ese piso no dan clases desde hace unos cuantos años atrás, nadie va allí porque esas aulas no están en funcionamiento, pero Charlotte le había comprado un pastel de chocolate con glaseado de vainilla, el favorito de Ethan también le avía comprado un anillo que le pareció muy bonito, tenía forma de mano la cual sostenía una esmeralda, esa gema que tenía tanta similitud con los ojos de Ethan, al Sharlotte verla le recordó inmediatamente a Ethan, lo saco de la cajita, para comprobar que estaba ahí y le dio un beso a la gema, ya no perdía nada, subió las escaleras hasta la cuarta planta del edificio.
Todo estaba muy sucio, habían mesas rotas entre otras cosas, Al parecer ese era el lugar donde arrojaban todas las cosas inservibles. Sharlotter frunció el ceño, cuando escuchó un llanto a lo lejos, fue caminando y a medida que se acercaba ese llanto se hacía más claro, hubo un punto donde se dio cuenta que no era un llanto, que eran gemidos, dio unos pasos más temiendo lo peor y efectivamente, era Ethan, estaba acostado en dos escritorios, y una chica estaba encima de él, por su color de piel podría decir sin dudarlo que era Raysel, la capitana del equipo de animadoras, dio media vuelta y se fue.
Estaba enojada, muy enojada, y sabía porque. Estaba enojada, por haberse enojado, Ethan no era nada de ella, sólo era su compañero de apartamento, nada más.
Fue a las gradas, subió hasta los asientos de arriba, y se puso a comer pastel, No utilizó el tenedor, lo hizo con sus manos, Ethan debería estar entrenando con el equipo no f********* cualquier palo andante, a Quién engañó, ella es hermosa, pensó Sharlotte.
un chico con la respiración agitada se sentó al lado de ella.
- Hola - el chico estaba esperando una respuesta - te vas a comer todo eso -
Sharlotte, sintió vergüenza, tenía sus manos sucias, y ese chico era muy lindo, no tanto como Ethan, se dio en la frente, no tenía que pensar en el.
El chico estalló en carcajadas, y ella no sabía la razón.
- Eres muy bonita, pero el chocolate en tu frente no se ve bien.
Sharlotte abrió sus ojos como platos, sintió un calor subir a su rostro, y bajo la mirada.
- Tranquila no te preocupes yo te ayudo- el chico sacó una toallita de su mochila y le limpió, iba a decir algo más cuando el timbre sonó, el, sin decir nada, se puso de pie y le tendió su mano para que ella la tomara, ella le miró unos segundos y luego a el.
- Vamos no muerdo - ella sonrió y luego tomó la mano que la le ofrecía, pero su sonrisa se borró, al pensar en esas palabras, "no muerdo" le resultaron demasiado conocidas alejo sus pensamientos y prestó atención a lo que el chico decía.
Ya era la hora de salida, y Sharlotte sintió un poquito de miedo, entró todo en su mochila, miró el reloj y sólo faltaba un minuto, vio como la manecilla se movía se movió, y de inmediato salió disparada a la salida.
sintió pánico Cuando alguien la sostuvo del codo y no era Ethan.
