Daniel sacó una argolla de oro muy sencilla de su bolsillo —¿Te quieres casar conmigo?
Un sentimiento entre emoción y felicidad recorre por todo su cuerpo y espera haber escuchado bien —¿Eh? ¿Lo dices en serio? ¿De verdad? ¿Estás seguro de éste gran paso que quieres dar?
—¡Si! —se lo volvió a plantear— ¿te quieres casar conmigo?
—No. No Daniel. Siento que este paso lo estás dando muy apresurado o te estás forzando a hacer algo que simplemente no te gustaría. ¿Qué cosa podrías haber hecho para querer redimir te con algo así? Simplemente no.
Daniel sintió un dolor muy fuerte, sabía que existía la posibilidad de que eso pasara —¿Qué? —lo mira a sus ojos verdes y podía notar que tenía su pupila dilatada.
—No. No. No. No quiero que hagas algo que no quieres hacer. No. No. No Daniel. Simplemente no.
Lo dejo de mirar y golpeo el área del volante y tomo fuertemente la mano de Ivan —Por favor. No me hagas esto.
Jaló su mano, abrió la puerta del coche, salió y estado afuera la azotó fuertemente —¡He dicho que no!
Daniel arrancó el carro y salió de ahí muy molesto.
Ivan entró nuevamente a casa.
Mientras Daniel iba en en camino recibió un llamada.—¿Quién? —observó su teléfono y se dió cuenta que era Sahara, le contesto a esta.
—Daniel. Hola. Soy Sáhara. Necesito que nos veamos a la de ya. Acaba de pasar una buena noticia y una mala noticia.
Se podía escuchar entre agitada y emocionada.
—Claro que si, ¿en dónde nos vemos? Y ¿a qué hora? —el teléfono de Daniel sonó con su tono de mensaje el cual ignoró y siguió hablando en el altavoz mientras manejaba.
—Ahora ya. Te veo en el café el "Rey de París" de verdad ve, te es muy perjudicial.
Estos colgaron y Daniel siguió conduciendo hasta el café, al llegar ahí bajó del coche y Sáhara lo esperaba dentro del café y ya había pedido un expreso.
Daniel jaló una silla de otra mesa y la acercó hacia Sáhara y se sentó —¿Qué fué lo qué paso?¿Que hay de nuevo?
—Necesitas abrir redes sociales. Sobre todo abre tu conversación por mensajes con Ivan. Seguro también el ya se enteró.
Daniel tomó su teléfono de su bolsillo y lo colocó sobre la mesa. Lo desbloqueó con su huella digital. Y se metió a la app de mensajería, cuando descubrió 20 mensajes de Ivan, abrió la conversación y Ivan le envío capturas de un vídeo que circulaba en la red de Daniel y Omar grabados en el Hotel —No. No. No puede ser cierto. ¡Mierda! ¿Cómo puede ser? No. No. —Daniel comenzó a escribirle a Ivan.
—Ivan. Perdón te juro que... Sólo quiero que me perdones, sólo quiero que me creas aunque ahora lo veo difícil.
—Al parecer no tenemos nada que hablar...
—¿Este vídeo sigue en la red? Sáhara por favor dime que no.
—No. Afortunadamente mi padre es un gran empresario y al tener poder hice que borraran el vídeo. Duró 12 horas en la red. Lo suficiente para que las personas lo hayas descargado, grabado o tomado capturas. Creo que tú y Omar tienen problemas. Omar y su esposa seguramente terminarán. Pero lo siento.
La otra cosa que quería hablar contigo es la siguiente.
Mi padre se enteró de tu historia y la de Ivan, mi padre está super a favor de la comunidad LGBT+ y quiere que tú trabajes para él en su empresa. Con un puesto algo bajo. Serás secretario/contador. Y te pagará un poco pero después te pagará más al subir de puesto.
La oferta es de $16,000 por quincena.Daniel se inclinó hacia la mesa interesado y ignorando los mensajes de Ivan —Por supuesto, si lo haría. Y no estan pagando poco.
—De maravilla, solo presenta tu currículum para el antes del viernes. Y podrás empezar a trabajar a partir del lunes de la próxima semana. Obvio este lunes no porque ya es tarde.
—Gracias Sáhara. Eres como un Ángel. Necesitamos Dinero Ivan y yo y más ahora que tal vez... Bueno mejor no, luego te cuento aún no estoy seguro si quiere casarse conmigo y ahora menos... —dijo cabizbajo.
—Tranquilo. Verás que todo se solucionará, de cualquier forma te tengo otra sorpresa —de su bolso de mano sacó una carta en un sobre y el sobre tenía el sello de la empresa de los padres de Daniel.
—¿Qué es esto? —toma la carta.
—Sólo léela.
Daniel abrió la carta y comenzó a leer.
No sabemos tú padre y yo como iniciar ésto.
Daniel. Perdón. Perdonanos.
Queremos que entiendas que no ha sido nada fácil para nosotros enterarnos de esto que nos dijiste.
Queremos que entiendas que hemos tratado de entenderte.
Hace 3 semanas tú padre y yo comenzamos a ir al psicólogo. Ahora te entendemos tan perfectamente. Queremos que regreses a casa. Tú eras el único que le daba un toque de felicidad a la casa. El único que reía a pesar de que nosotros siempre hemos sido tan reservados.
Ivan es un gran chico.
Agradecemos a Dios que te lo puso en el camino. Esperamos que regresen ambos a casa. Los dos son bienvenidos.
Y en caso de que no quisieras regresar solo te diremos. Ya puedes volver a utilizar tus tarjetas de crédito. Ya no están canceladas. Listo.
Puedes usarlas. Sólo queremos que pronto tú y tu novio nos visiten.
Tal vez sigues algo rencoroso y solo diré. Perdón.
De cualquier forma tú sabías que nos arrepentiríamos de cualquier forma somos tus padres y siempre te estaremos apoyando tomes la decisión que tomes.Daniel derramó una lágrima hizo puño la hoja de la carta y la guardó en su bolsillo —Gracias Sáhara
—De nada, ahora ve y vuelve a conquistar a Ivan. Tienen una boda que planear.
—¿Cómo lo sabes?
—Camino aquí me marcó Ivan y me dijo del vídeo también, me preguntó que, que podría hacer.
—¿Qué le contestaste?
Se escuchó un golpe en el vidrio del café y detrás del vidrio transparente estaba Ivan con un cartel, unas rosas y un globo blanco con helio. El cartel decía: Claro que acepto
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Recuerdos de mi pasado
Teen FictionRecuerdos de mi pasado. La segunda entrega que proviene directamente de la dura realidad, ésta trata que sucedió después de los finales del libro ya antes mencionado. Ivan se da cuenta de que Omar no responde sus llamadas, correos o mensajes parecie...