Después del torneo de ingreso, los espectadores salieron de las graderías y continuaron con sus actividades habituales. Aún había gente haciendo comentarios sobre los participantes, entre ellos dos chicas sostenían una charla.
- Los nuevos de este año parecen ser mejores que los del año pasado, impresionante ¿No lo crees?
- Es verdad, y ese soldado llevaba la mejor racha por mucho, me pregunto de dónde vendrá.
- También a¿había un príncipe que parecía bastante apuesto, pero solo se aprovechaba de los débiles.
- Y aquella chica encapuchada... ¿Quién será? Parece como si todo lo relacionado con ella fuera un misterio.
- Bueno, lo único que importa es que ahora hay nuevos estudiantes y por lo tanto nuevos rivales con los que enfrentarse.
Atenta a la conversación estaba una chica de cabellos celestes cual cielo despejado, era una alumna que había ingresado el año pasado. Cuando hablaban sobre los participantes, se sorprendió - ¿Un soldado?¿Es hijo de un noble, siquiera? - se dijo así misma mientras retomaba su camino hacia el laboratorio de alquimia en el ala oeste del edificio principal de la institución. De camino se tropezó con alguien porque andaba distraída.
- Disculpe - dijo ella al joven - no estaba mirando.
- No se preocupe - la miró y su rostro se llenó de sorpresa - Es acaso... ¿Princesa Yuuki?
- ¿Eh?¿Cómo supiste mi nombre?¿Quién eres?
- Oh, perdone mi insolencia - dijo haciendo una reverencia - Me presentaré, soy Hitsuki Drakkan Kaoru, tercer general de Leaften y alumno recién ingresado a esta institución.
- ¿Recién ingresado? - dijo Yuuki sorprendida - Un momento, ¿Eres el soldado del que habla todo el mundo?
- Parece que sí, olvidé mi insignia de general en casa así que me confunden con un soldado corriente.
- Entonces sí eras un noble. Bueno, un gusto conocerte.
- Lo mismo digo, princesa.
- Llámame Yuuki.
- ¿Señorita Yuuki?
Creo que así esta bien - dijo con una sonrisa, pero su sonrisa se borró cuando recordó que debía ir al laboratorio - ¡Maldición, no llegaré a tiempo al ala oeste!
- Oh, no se preocupe, yo la llevo; es lo menos que puedo hacer por usted.
- ¿Qué?
- Tome mi mano.
- Está bien...
En el momento en el que Yuuki tomó la mano de Kaoru todo a su alrededor parecía ir perdiendo color y forma, parpadeó de miedo y cuando abrió los ojos estaban en la puerta del laboratorio.
- ¿Ah? - dijo Yuuki, estupefacta - ¿Cómo?
- General Kaoru a su servicio, señorita Yuuki, ahora debo irme - hizo una reverencia y se retiró por el pasillo.
- G-gracias - le dijo - ... Espera... - dijo pasa sí - ... yo nunca dije que iba al laboratorio.
Cayó la noche y se dió anuncio a los recién ingresados de que sus habitaciones estaban listas. Kaoru se sentó en la orilla de su cama y apoyó sus manos en sus rodillas, tenía una expresión vacía.
- Estás ahí, muéstrate - dijo hacia una esquina - tenemos que hablar.
- Vaya, vaya - dijo una voz en las sombras - evité que llegaras tarde a este lugar y así me lo agradeces.
- Para empezar tú eres el que causa mis pesadillas.
- Solo te hago el favor de recordarte lo que eres- dijo la voz, mostrándose por fin de entre la oscuridad - ahora dime por qué me has llamado.
tuve un favorable golpe del destino, me topé con la princesa - dijo seriamente - Asako Enboir Yuuki, sostuve su mano y comprobé que poseía el guantelete de hielo, pero parece que está sellado con un tipo de magia que no reconozco.
- Bueno, eso facilita nuestro trabajo, pronto pondremos el plan en ejecución.
Tocaron la puerta de la habitación, el ente oscuro volvió a desaparecer en las sombras. La expresión de Kaoru cambió de seriedad a tranquilidad. Abrió la puerta, se trataba de Kenta que traía consigo unos bocadillos típicos de donde él vivía.
- ¡Mmm! ¡Los cocineros de tu padre tienen la mejor sazón con el pescado, Kenta!
- ¿Verdad? Son deliciosos, ¿No? - dijo llevándose un puñado a la boca y tragándoselo casi de inmediato - ahora tendremos tiempo para hablar.
- ¿Y sabes que se necesita para una buena conversación? - dijo mientras abría una caja de debajo de su cama - ¡Trago!
- ¡Sí! Sabía que traerías un poco de ese famoso licor que prepara tu familia.
- El mejor de este lado del continente - dijo mientras abría una botella y bebía todo su contenido de un solo sorbo - ... y del mundo! ¡Ja!
Hablaron y bebieron hasta el amanecer, tenían mucho de que hablar luego de tres largos años sin verse. Faltaban dos horas para el evento siguiente y ellos seguían con la resaca, salieron a correr un poco para pasar los efectos del alcohol.
Fueron los primeros en llegar a la arena, faltaban diez minutos para la hora indicada. Estaban los dos parados mirando los alrededores cuando de repente Kaoru sintió una figura muy femenina en su espalda y un par de manos taparon sus ojos.
- ¡Adivina quién soy!
- Acaso eres... - dijo retirando las manos de sus ojos y volteando a ver a aquella chica - ¡Alice!
- ¡Kaoru! - saltó hacia él y se abrazaron fuertemente - Te extrañé, te fuiste mucho tiempo...
- Lo sé, Ali. Cierto, ¿Cómo es que estás acá? No te ví entre los ganadores.
- Ah, cierto. Mira - sacó una capa, se la puso y se cubrió el rostro con una capucha - ¡Ta-da!
- ¿Eras la encapuchada? - dijo Kaoru, sonriendo - Bueno, eso explica muchas cosas; nadie es tan buena con el arco como tú, Ali - le decía mientras le acariciaba la cabeza.
- Jeje... Un momento, huele al alcohol de tu familia, ¿Estuviste tomando?
- Hey... yo también existo - dijo Kenta, acercándose a la pareja.
- Oh - la expresión de Alice se hizo fría - Hola Kenta ¿Tú estuviste tomando con Kaoru?
- Oye, Que grosera.
Ambos se dieron una mirada mortal. Luego de un rato comenzaron a llegar los demás participantes, cuando habían llegado todos, las puertas de la arena se abrieron y todos entraron. La presidenta Vatemi los esperaba en el medio de la arena.
- ¡Buenos días! ¿Descansaron? Espero que sí porque viene su última prueba. - dijo cambiando el ambiente con un tono alegre y risueño - Si bien todos ya están dentro, todavía falta designar los grados de habilidad de cada uno. Esta prueba consiste en tres niveles de batallas de eliminación uno contra uno. Es simple, si pierdes en el primer nivel eres de primer grado y si llegas hasta el tercer nivel, serás de tercer grado. Ya se han investigado sus habilidades, se han seleccionado y equilibrado las parejas de combate. Sin más que agregar, empecemos.
La pareja que iba a pelear primero estaba situándose en el campo, mientras que los demás esperarían en las graderías. Se iba a dar inicio a la primera pelea.
- ¡Príncipe Leviathan Flue'tsor Kenta contra el Vizconde Firegun Thar'tsor Sunder!
- Oh - dijo Sunder con aire sarcástico - el séptimo hijo del Señor de los Mares contra el tercer hijo del Conde de las Flamas. Esta batalla será formidable.
- Lo mismo digo - respondió Kenta con emoción.
Se pusieron en posición de inicio e invocaron sus armas. Kenta invocó el tridente sagrado de su abuelo y Sunder, la espada llameante de su padre. Su batalla será muy ajustada, agua contra fuego, valor contra fuerza. Solo el destino sabrá quién ganará.
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Deseo Perdido
FantasyEn un mundo en el que la magia y los espíritus existen, un joven soldado posee una importante misión encubierta: proteger a la princesa del reino. Para ello tendrá que pasar duras pruebas y pelear épicas batallas tanto con sus enemigos como con sus...