Deseo Perdido

VIII - Final del Torneo (I)

---Día del evento - Tercera hora de la tercera séptima---

- ¡Bienvenidos a la última parte del torneo de ingreso! - exclamó Vatemi con muchas ansias - ¡Agradecemos a los estudiantes y maestros veteranos de la academia que pudieron asistir a este evento! En breves instantes se dará comienzo a las peleas uno contra uno para comprobar quién de todos los participantes presentes es el más fuerte. Serán cuatro parejas de peleadores, cuyas habilidades y expedientes serán estudiados para poder equilibrar lo mejor posible las peleas - Es interrumpida por un pequeño murciélago que se posó en su hombro y le dijo algo al oído, Vatemi sonrió y el murciélago se alejó volando - Me acaban de informar que los balances ya están finalizados y los peleadores están listos para combatir - comenzaron a levantarse unas paredes en la arena - Como verán, las peleas serán simultáneas. La arena se dividirá en ocho partes separadas por barreras seyg'hark-427, lo último en tecnología de defensa militar; estas barreras pueden nulificar la energía potencial de cualquier ataque hasta el 96% haciéndolas casi indestructibles, proporcionando seguridad a quienes estén dentro. Una vez que uno de los peleadores gane una pelea esperará a que los combatientes del espacio consiguiente terminen de pelear. Una vez que quede solo un peleador en cada una de las celdas consiguientes, la pared que las separa se desactivará para que peleen otra vez entre los ganadores del anterior encuentro, simple, ¿No? - los peleadores aparecieron en sus respectivos lugares - Sin más que decir, ¡Que empiece la última fase del torneo!

Luego del largo discurso, sonaron campanadas sucesivas que indicaban a los peleadores que empiecen a pelear. Las zonas de pelea eran más o menos de unas cuatro hectáreas, las peleas eran transmitidas a través de unos cristales mágicos que generaban pantallas para que pudiesen apreciar mejor el espectáculo. Todo el público estaba expectante ante los movimientos de los combatientes animando a sus favoritos a ganar. Kenta tenía una excepcional cantidad de fanáticos en las tribunas, ¿O debería decir fanáticas? Bueno, era de esperarse de un famoso príncipe y heredero del imperio más grande del planeta, si una noble consigue su atención tendría una posición social bastante estable. Kaoru y su contrincante caminaban en círculos mirándose mutuamente, examinando a su oponente. Kaoru rompió el silencio.

- ¿Vas a venir o qué?

- No sería tan imprudente.

- Al menos preséntate.

- ¡Oh! ¡Pero que irrespetuoso! - dijo poniéndose la mano en el pecho de forma arrogante - ¿Acaso no me conoces a mí, el Gran Príncipe Storgem de Ask'jyart?

- ¡Bajaste la guardia! - se propuso a darle un corte con su hacha pero sus movimientos fueron detenidos.

- Te ten-go Jaja - dijo con una voz irritante - Permíteme un momento... ¡Por el conflicto entre el cielo y la tierra naciste y ahora este conflicto terminarás! ¡Ven a mis manos, Mjul'knyr! - un cetro con punta de hacha apareció en su mano derecha, cubriéndola de rayos azules - Fácil como siempre.

- Ggg - No podía articular palabra, su cuerpo estaba siendo violentamente electrificado cada vez con más fuerza - ¡¡¡Grrrraaaahh!!!

- Oh, cierto. No debo matarte - dejó de electrocutarlo.

- E-eres muy fuerte... - pronunció con pesadez Kaoru - fuiste un digno rival... espero y seamos amigos...

- Lo mismo dig... - "Un momento... ¿Qué ha pasado?" pensó en el mismo instante en que recibió el puño de Kaoru en su abdomen sin darse cuenta - Q-que velocidad... - se desmayó.

- Tu rival nunca está vencido si no está inconsciente o muerto.

Dejó caer el cuerpo de Storgem al suelo, quien fue teletransportado a la sala médica. Kaoru estaba bastante quemado así que se sentó un momento y cerró los ojos. El cuerno central característico de los dragones rojos comenzó a brillar en su frente, todo su cuerpo empezó a calentarse a temperaturas que rozaban los 1500°C, efectivamente las heridas de su magmático cuerpo comenzaron a sanar. Cuando se halló completamente curado su temperatura volvió a descender hasta llegar a la normal. Tuvo que esperar unos minutos a que la pelea de al lado terminara, se recostó mirando al cielo, recordando a alguien de su pasado. La barrera desapareció y apareció la figura de una chica desgastada por el combate del otro lado.