Capitulo 10

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Después de ducharse y cambiarse de manera automática ya que ambas estaban tan metidas en sus pensamientos que ni siquiera sabían muy bien lo que estaban haciendo.

Sus mentes repetían una y otra vez todo lo que había pasado en esa cama. Cada beso, cada frase que dijeron, cada caricia que se regalaron por sobre la ropa y lo que nunca olvidarían, fue el orgasmo que compartieron.

Ambas sabían que lo que hicieron no debía haber pasado, pero ninguna de las dos se arrepentía, aun así tenían claro que tenían que hablar seriamente.

Lauren's POV

Después de cambiarme salí de la habitación y baje las escaleras y camine hasta la cocina donde encontré a Camila revisando la nevera, inevitablemente recordé la primera vez que la vi.

-Hey, Camz ¿que haces?-pregunte curiosa al verla revisando ahora los cajones.

-Busco que podemos comer, porque tengo hambre- reí mientras ella me miraba con un tierno puchero y fue cuando me permití verla, llevaba un lindo vestido blanco con pequeños lunares negros, unos botines negros y su cabello castaño caía en ondas queriendo tapar sus lindas orejitas, no lo dude y me acerque para acomodar su cabello.

-Estas muy linda, Camz- se sonrojo y río nerviosa. Me acerqué hasta presionar suavemente mis labios en los suyos dejando un tierno beso que nos hizo suspirar-. Pero no podemos comer todavía porque si lo hacemos llegaremos tarde.

Me separe mientras Camila me miraba como si fuera lo más hermoso que haya visto lo cual me hizo suspirar y esbozar una pequeña sonrisa.

-Tu, tú estás hermosa, Lo- ahora la que estaba sonrojada era yo y mientras yo pensaba en donde meter mi cabeza para que no notará mis mejillas rojas, Camila me comía prácticamente con la mirada ya que llevaba un jeans negro pegado que acentúa mi trasero, unos botines negros, una camisa de botones azul que dejaba entrever mi sujetador blanco y por último mi cabello suelto en ondas.

-Gracias, Camz, pero si nos quedamos aquí  babeando por la otra, nuestras babas nos ahogaran y nunca llegaremos a la consulta.- bromee y ella río sonrojada. No había necesidad de ocultar lo que sentíamos después de lo que pasó en aquella habitación.

-Esta bien.

Después de bajar al estacionamiento, nos subimos a mi auto y emprendimos hasta la clínica que especialmente atendía a híbridos, aunque sí alguna persona con una emergencia sobre un animal herido llegaba siempre los iban a atender de la mejor manera y estaba más que orgullosa, pues mi hermana Taylor fue la que creo está clínica.

Aunque no vengo mucho aquí ya que nunca he tenido un híbrido o algún animal hasta ahora, que llegó está hermosa híbrida.

-Ven, Camz bajemos- dije ya cuando había estacionado el auto.

Bajamos del auto he inconscientemente tome su mano en el momento que se encontraba a mi lado y inmediato pensé que iba a rechazarme, pero en vez de hacer eso, lo que hizo fue apretar más fuerte nuestras manos entrelazadas.

Al atravesar las dos puertas de la entrada fuimos directo hasta una señora que está de tras de un escritorio.

-Buenos días, tengo una consulta con Taylor Jauregui.

-¿Cuál es su nombre y el de su híbrido?-pregunto sin dejar de ver la pantalla de la computadora.

-Lauren Jauregui y mi híbrida es Camila Jauregui- tuve que ponerle en ese momento mi apellido a Camila pues, si se dan cuenta de que no tengo papeles que confirmen que Camila es mia, lo más posible es que me la quiten y la lleven al orfanato y yo termine presa.

Mi GatitaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora