___, una chica tímida y sin quirk, tiene una vida normal.
Bueno, no sale mucho de casa, no tiene muchos amigos y sus padres están constantemente de viaje. Al menos es medianamente feliz.
Pero toda la normalidad se ve amenazada con la aparición de...
Hoy es un día normal. Como otro cualquiera, supongo. Estoy en mi cuarto, en el ordenador, como siempre. Oigo como mi madre se acerca
Mama: ___, papa y yo nos tenemos que ir, ¿Vale? Volveremos en una semana.
___: Vale, mama
Mama:¿Otra vez en el ordenador? Hija, me preocupas, deberías salir y despejarte un poco... ¿Porqué no sales un poco con tu amiga Mina?
___: Seguro que está ocupada... Quiero decir, al estar en la U.A. tiene cosas que- Mama me interrumpe.
Mama: Tienes que tomar el aire, es más sano que quedarse aquí encerrada todo el día. Llámala, anda.
Al principio no quería, pensaba que le molestaría, pero realmente, me caía muy bien... Así que, cuando mis padres se fueron la llamé.
Mina: ¿Hola?
___:H-h-hola Mina, s-soy ___
Mina: ¡___! ¿Eres tu, en serio? ¡Hacía una eternidad que no hablábamos! ¿Que tal?
Mina, como siempre tan alegre, tan llena de vida y tan abierta. Eso es algo muy agradable de ella. No necesito hablar demasiado con ella y, de todos modos, es cómodo.
___: Bien, ¿Tu?
Mina: ¡Genial! ¿Sabes? ¡Deberíamos quedar! Tengo que contarte un montón de historias que me han pasado. ¿Te apetece?
___: Si, de hecho para eso te llamaba...
Mina: ¡Guay! ¿Quieres que vaya a tu casa?
___: N-no, querría dar un paseo... ¿Te viene bien esta tarde?
Mina: ¿Un paseo? ¿Que te ha pasado? ¿Te han secuestrado unos villanos y te obligan a decir esas cosas?
Mina se rie.
___: Esto...
Mina: Ahora tengo que colgar, que estoy en pleno entrenamiento, te recogeré en tu casa a las cinco, ¿Vale?
___: Vale
Mina: ¡Muy bien!
Finalmente cuelga. Suspiro y vuelvo a dirigir mi mirada al ordenador. Mina no ha cambiado, sigue siendo igual de activa que siempre, en contraste conmigo... Realmente me hace ilusión, no puedo esperar a que lleguen las cinco.
Sábado, 17:20, casa de ___.
Mina suele llegar tarde, por lo que aprovecho a revisar si lo llevo todo una y otra vez.
___: Vale, solo es una quedada normal, ¿No? Cartera, llevo. Móvil, llevo. Mis llaves también... ¿Algo más? ¡Paraguas! Si, llevaré uno plegable, por si acaso... ¡Y pañuelos! Una libreta y un boli por si tengo que apuntar algo, una pequeña linterna...
El sonido del timbre me saca de mis paranoias. Agarro la bandolera y corro hacia la puerta.
___: ¡Mina!
Abro la puerta y ahí está.
Mina: ¿Vamos?
Sábado, 21:33, afueras de la ciudad.
Tras despedirme de Mina, empiezo a caminar hacia casa. Tan pronto como dejo de ver a mi amiga comienzan a caer unas gotas. Por suerte llevo un paraguas plegable. En cuanto lo despliego la lluvia va a más, y temo por mi paraguas, pero resiste.
Camino tranquilamente hacia casa, disfrutando de las calles mojadas, del olor a lluvia. Gracias a esta, no hay ni un alma en la calle, y es verdaderamente reconfortante.
La lluvia no cesa, pero llego al paso de peatones de cerca de casa. No hay ningún coche, pero aun así, no quiero cruzar en rojo.
Empiezan a pasar algunos coches, y junto a mí se para otro peatón.
Es difícil no fijarse en su cara, es muy extraño, incluso da miedo. Tiene la cara con una especie de ¿parches? sujetos a la piel con grapas. Eso si, se está empapando.
Me mira, y me doy cuenta de que me he quedado empanada mirándole.
Cuando paran de pasar coches, el chico cruza. Se está empapando y aun así va caminando a su ritmo...
Casi sin darme cuenta, cruzo detrás de él. Parece darse cuenta, se da la vuelta y me mira directamente a los ojos.
???: ¿Y bien?
Le miro con cara de confusión y rompo el contacto visual. No creo poder mirar a alguien directamente a los ojos sin sonrojarme, y menos con unos ojos tan azules...
???: ¿Porqué me sigues?
No le estaba siguiendo, ¿verdad? Solo cruzaba y...
___:N-n...
No puedo hablar de buenas a primeras con un desconocido... Y menos en estas circunstancias...
Para escapar de esta incomoda situación decido ofrecerle el paraguas. Él me mira extrañado, como si no supiera que quiero decir. Reúno fuerzas y consigo hablar. Más o menos...
___: Vivo cerca... Quédatelo...
No parece agradarle la idea de un regalo de un extraño (a quien no), pero parece que le fastidia más la lluvia. Finalmente coge el paraguas.
???: Gracias.
Se va sin decir nada más, y yo, me doy prisa para llegar a casa.
¿Qué acaba de pasar? ¿Porqué demonios he hecho eso? Me está dando un ataque de vergüenza...
Me voy a dormir sin más, sin cenar ni nada. Aún medio dormida, proceso todo lo de esta tarde. Mis conversaciones con Mina, el montón de sitios a los que me ha llevado... y ese extraño chico... ¿Quién es? Pareciera el típico malo de un anime, solo que esto no es un anime, y que si lo fuera yo sería un personaje secundario que no tiene nada que ver con la trama. Aunque tampoco es importante lo del paraguas... ¿O si?
¿Porque le doy importancia?
Sigo divagando en mis pensamientos hasta que me quedo dormida.
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Hola! Esta es mi primera historia, agradecería que me corrigierais las faltas, si tengo alguna. No sé cada cuanto actualizare, pero al menos espero que os guste. Si veo que esta historia sale bien igual hago más. No prometo nada,eso si. ¬ Niseno-chan
