Puede ser, que haya alguien, en alguna cueva, en algún país del mundo. Una persona, un hermitaño, que abandonó tanto la vida como la sociedad. Es probable que este individuo crea, que ya ha sido el fin del mundo. Monstruos, demonios y otra infinidad de seres espantosos, gobiernan lo que ha quedado.
Puede ser, que no haya salido en años, por el temor de ser aniquilado. Que viva como un insecto, que ha sobrevivido alguna catástrofe natural. Quizá ha perdido todo rasgo de humanidad, y lo que queda es solamente un animal. Los recuerdos son tan confusos, matices de lo que alguna vez fue. Piezas tan diversas de un rompecabezas irresolvible, que lo han hecho olvidar hasta su propio nombre.
Puede ser, que todo sea su imaginación. El mundo sigue girando, y el tiempo sigue fluyendo. Las personas continuan viniendo y yéndose, mientras él sigue estancado. El laberinto sigue cambiando, sin que él logre atravesarlo. Perdido en fantasía se encuentra, temiendo que lo real pueda lastimarlo.
Puede ser, que todo lo he soñado. Que ni este individuo, la cueva, o tampoco el mundo existan. Aunque quizá si lo hagan.
Porqué, puede ser, también, que esta persona sea yo.
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Relatos
Storie breviConjunto de varios cuentos, todos ellos experimentos narrativos de un escribidor novato.