𝗟𝗢𝗩𝗘𝗥𝗦 ━━ bevie ❪descendants❫

TWO

Pertenecemos a camas diferentes.

Evie literalmente aventó al rey a la cama, el cual ya estaba sin camisa ni pantalón. Su erección resaltaba en su bóxers azul.

La peliazul camino hacia él, mientras se quitaba su blusa, la cual, al igual que la mayoría, tenía la palabra Fairest inscrita.

Se puso a horcadas sobre Ben y comenzó a hacer una fricción entre sus partes íntimas. Ambos soltaban jadeos y gemidos.

Ben. Gimió Evie.

Necesito follarte princesa. Dijo el rey en un jadeo.

Evie se deshizo de su sostén negro, dejando al descubierto sus perfectos pechos. Ben subió sus manos a ellos y comenzó a acariciarlos y pellizcarlos, poniendo más húmeda a su manzanita.

Ben dio un hábil giro, quedando él ahora arriba. Comenzó a devorar el cuello de la peliazul, dejando varios chupetones. Le quito su falda y le rasgó sus bragas. Ella gruñó de excitación al oír cómo estás se rompían.

Evie dirigió su mano al polla de Ben, y comenzó a subir y bajarla rápidamente, por lo cual él gimió. Bajo un poco el bóxers para liberar esa erección. Su miembro estaba muy duro y caliente. El coño de la villana comenzaba a chorrear, y las sábanas se mojaban por sus líquidos

Te necesito. Susurró ella en un gemido.

Ben sonrió pícaro. Junto su dedo índice y el del medio y comenzó a deslizarlos por aquella húmeda entrada. Evie mordió su labio inferior para evitar gritar.

El rey introdujo sus dedos en su vagina. La peliazul apretaba las sábanas, y se frotaba contra la cama. Ben hizo movimientos circulares. Pellizcó su perla y la chica soltó un fuerte gemido. Su orgasmo estaba llegando.

Ben... por favor. Suplicó. Quería que estuviera dentro de ella, y penetrarla hasta que no pudiera más.

Tranquila nena. Susurró cerca de sus labios. El olor a Whisky invadió las fosas nasales de Evie.

La peliazul intentaba ser paciente. Hace semanas no sentía a su chico bestia. El consejo los había tenido trabajando 24/7 con todo eso de traer a niños de la isla.
Ya era justo y necesario hacer el amor con Ben.

Apuntó de que el orgasmo la invadiera, el rey sacó sus dedos. Los lamió, limpiando cada rastro de esos deliciosos jugos que salían de ella. Se levanto de la cama y se quito sus bóxers.

Evie se incorporó un poco y recorrió con su mirada el cuerpo del mini bestia. Observó su rostro, su marcado pecho y abdomen, sus fuertes brazos, y finalmente su miembro. Erecto. Grande. Duro. Y palpitando de deseo por cogersela.

Ben sonrió lujurioso al ver como ella admiraba su polla. Colocó una mano en su miembro y comenzó a masturbarse lentamente.
La peliazul mordió su labio reprimiendo un gemido. Estaba demasiado excitada. Enserio necesitaba que él la poseyera.

Ben la miraba completamente excitado. Sus ojos estaban dilatados, y la peliazul observaba, cual niño su dulce favorito en el supermercado, como la mano del pelimiel recorría con lentitud su erecto miembro. Mordiendo con fuerza el labio y deseando meterlo a su boca y comérselo entero.

El chico mitad bestia dejó de masturbarse y regresó a la cama con su amada. Tomó las muñecas de su princesa y la acorraló contra la cama, impidiendo que ella pudiera escapar.

Evie flexionó hacia arriba sus piernas, abriéndose más para él. Ben colocó la punta de su pene en la entrada de la villana, y la penetro de una buena vez.