un hombre diferente

47

La tarde se hizo muy amena para ambos, entre risas, guiños, coqueteos, y miradas ardientes, la tarde se les paso volando.
-valla, han pasado horas y siento que solo ha pasado 1 minuto -dice Jerry mirando al horizonte
-cierto -intentó ocultar su emoción- creo que es hora de irme a casa
-¿quieres irte?
-eemm... Si -hace una mirada de obviedad mirando todo el lugar, con una chispa de diversión.
-¿por que no vamos por ahí?
-mmm mejor no
-¿aún me odias? -pregunta con cautela
-Jerry... jamás te he odiado
-entonces ¿me amas?
-no lo sé
-odiame o ámame... Pero no digas que no sabes
-aguarda... ¿quieres decir que si no te amo, te odie? -frunce ligeramente el ceño
-si
-¿por?
-cualquiera de las dos están a mi favor -Tali enterecierra los ojos- si me amas, estaré en tu corazón; si me odias estaré en tu mente
-Shakespeare -dijeron al unísono
-debes ser mas original Jerry -agachó su cabeza derrotado- pero amo a William Shakespeare -susurra, a Jerry se le ilumina el rostro
-¿cuanto tiempo te quedarás?
-chiquilla no he venido de paseo, ni a asuntos de negocios... estoy aquí por ti
-ya veo -disimula desinterés
-escucha, se que he sido un cabrón... Un hijo de de puta contigo... Un estúpido ¿okay?... Ya no se que hacer... Que decir... o como actuar, no se que mas quieres que haga para demostrarte que te amo y que mis sentimientos han sido los mismos desde aquel día que te vi, jamás han cambiado y no cambiaran... Me encantas, te deseo a cada momento, pero lo mas importarte, me gusta estar contigo -cierra los ojos con fuerza- adoro tu compañía, lo que me haces sentir, me complementas de a dentro hacia fuera -y cuando los abre sus ojos irradian pasión, fuego y deseo- esto jamás lo he sentido por nadie
-¿como puedes seguir amandome como siempre, si nos hemos distanciado?, no dicen que el amor se alimenta día con día
-nunca nadie dijo que para enamorarse, hay que tocar la piel, simplemente sucede, las almas se conectan mucho antes que lo hagan los cerebros.
-que cursi -se sonroja y oculta una sonrisa
-entonces ¿vamos por ahí? -sus ojos se volvieron turbios con una pervertida media sonrisa, la cual Altair no se pudo resistir
-esta bien -le lanzó una mirada sexy- sólo que traigo el coche de papá
-pasemos a dejarlo, eso no es problema.
Jerry se levanta y espera como todo un caballero a que ella lo haga para darle el paso, pero sus intensiones no son precisamente las de una caballero. Pues al darle la espalda ella, Jerry le da un agarron en los redondos y suaves glúteos.
-Jerry -le dice avergonzada.
《Cielos, ¿desde cuando con el más mino roce me pone a mil?》

《Deja de resistirte chiquilla. Tu cuerpo habla por sí solo》

Cuando salen al estacionamiento, Jerry la acompaña hasta su coche, pero es tan grande la ansiedad de Jerry que, sin darle tregua, la arrincona contra el coche y posee sus labios. Con una mano en la nuca y la otra sujetándola de la cintura. Ella solo se agarra de su camisa por los brazos apretando sus puños. La recarga sobre la carrocería y pega su pelvis sobre su monte, y le hace saber lo mucho que la desea. con una pierna abre las de Altair. La besa desesperado, con fuerza, muerde su labios y los lame también.
-basta Jerry -se aclara la garganta- aquí no -dice entre jadeos
-perdón chiquilla, no lo pude resistir -sin aliento pega si frente a la de ella.

Jerry la sigue hasta su casa con el coche que ha rentado.
-dame un segundo, hablaré con mamá -dice Altair cuando ha llegado a su casa. El asiente y Le brinda una cálida sonrisa.
Cundo ella se mete a su casa una jeep negra aparca frente su casa. De la cual desciende Mauricio. Jerry que esta recargardo en su coche, sólo se limita a mirar desconociendo aquel joven. Ambos se miran desconcertados, pero ninguno dice nada. Mauricio camina hasta la entrada y en eso sale Altair, y antes que puede decir algo Mauricio le besa la mejilla de una manera muy comprometedora.
Jerry revienta de celos, pero no dice nada.
-Hola -dice Mauricio mimoso
-Mauricio ¿que haces aquí?
-quedamos en vernos... ¿lo olvidas?
-Quedamos en que te llamaría
-bueno, por casualidad vi el coche pasar y quise sorprenderte -miraba de soslayo a Jerry que echaba humo por las orejas
-Mauricio no puedo salir contigo
-¿nos vamos chiquilla? -dice Jerry tan autoritario
-¿quien es este Tali?
-la pregunta es ¿quien demonios eres tu?
-Mauricio el es Jerry... Jerry este es Mauricio -dice en un tono serio, con temor a lo que pasara
-¿este es con el que te ibas a casar? -asiente avergonzada
-y él ¿es?
-soy el amor de su vida -se retan con la mirada
-Mauricio, tienes que irte
-pero... Pero dijiste que lo volveríamos a intentar
-dije que lo pensaría
-¿que hay del bebé? -Jerry mira a Altair confundido,sus ojos casi se desorbitan
-¿estas embarazada? -pregunta con horror
-si -Jerry respira con brusquedad, sus fosas nasales se dilatan, la mira con desprecio. Se da la media vuelta y se va a su coche.
- Mauricio lárgate, no te quiero ver -corre a tras de Jerry- ¡Jerry espera!
-¿es por eso que no querías regresar conmigo? ¿por qué estás embarazada de este imbécil
-¿eso es lo que piensas?
-explícamelo
-esto es lo importante que tenía que decirte
-¿que estás embarazada de otro?
-Jerry no seas idiota, usa las neuronas -aprieta sus dientes
-chiquilla -se lleva una mano a la frente- tu... Yo... tu y yo... -pero su expresión No estaba definida, estaba asustado, pero a la vez feliz
-si Jerry... serás papá
-pero... ¿por qué no me lo dijiste antes? -se pasa las manos por el pelo
-estaba buscando el mejor momento... ¿estás enfadado? -pregunta con un hilo de voz, el cuerpo de Jerry se relaja, deja caer los hombros y exhala
-claro que no chiquilla - la abraza- me has echo doblemente feliz.
Él acuna su rostro y le da un tierno beso en la fuente, Alatir por su parte acaricia su nuca, sus ojos miran a los de Jerry y luego mira su boca con lujuria, inconscientemente lame su labio, y el miembro de Jerry en seguida se pone duro, fuerte... Se acerca a su cara y lame su labio luego lo chupa muy lentamente y da un pequeño mordisco. El cuerpo de Jerry se dobla ligeramente, cuando la lengua de Altair implora entrar.
-para chiquilla -dice con dificultad, su cuerpo arde- o te follaré sobre el coche
-hazlo Jerry -musita
-no quiero lastimarlo
-¿a quien? -pregunta asustada
-al bebé -Tali suelta una carcajada escandalosa
-¿que? -se enfada
-Jerry, el está muy pequeño aún, además se aloja en mi útero, tu... -mira hacia abajo- bueno tu amigo, no llega hasta ahí, no tienes que preocuparte
¿y donde demonios es eso? -pregunta confundido
-te lo puedo decir... Pero mejor te lo muestro con planos anatómicos -sonríe pícara
-siendo así -su voz es muy grave- vamonos de aquí
-o podríamos subir a mi habitación.
Entran a tropezones a la casa, pero no les importa. Jerry lleva a Alatir sobre su abdomen, cargandola por las nalgas, mientras ella se sujeta de él por el el cuello, pero ni si quiera suben a a la habitación, se extrañaban tanto que, llegar arriba era una dolorosa eternidad.
La recarga sobre la pared, y con desesperación quita el pantalón de ella, después baja el de él lo suficiente y justo...
-rayos -exclama Jerry jadeante y divertido
-¿Qué?
-no traigo preservativos -ríe
-estamos protegidos -susurra
Jerry se inserta en ella, gimen, y la hace suya una vez más, con fuerza la embiste una y otra vez con intensidad sin dejar de besarla, de tocar cada una de sus curvas, entregándose totalmente a ella.
-¿mía?
-siempre
Entonces, Jerry se vacía en su interior, apretando sus ojos, gruñendo con sensualidad, desplomandose en miles de partículas, traspasando a una dimensión mística.
-quiero tocar tu piel desnuda -apenas logra decir Jerry
-lo he deseado desde que te vi llegar al restaurante -musita.
El cuerpo de Altair es incapaz de quedarse quieto cuando los dedos de Jerry recorren cada centímetro de el, desnuda sobre la nube que noche a noche la abraza Tali se retuerce cuando su torrida vagina esta siendo saqueada por una hábil lengua, y desfallece aún más cuando Jerry chupa y tira de sus pliegues mientras que estimula con vehemencia su clítoris.
-basta Jerry -dice cortadamente- no lo resisto más -pero él no se detiene e intensifica su momento.
-¡aaaaaah Jerry maldición! -su cuerpo colapsa en un intenso y placentero orgasmo.
Jerry sube a su cuello y lo besa, lo lame, sigue descendiendo y llaga a sus redondos y exquisitos senos, rodea su borde con la lengua, para después desaparecerlo en su boca, mientras sus labios se van juntando en su pezón. Lo muerte y tira de el, Alatir ahoga un gemido, que aunque la ha causado un poco de dolor, la excitación es poderosa, y todos sus neurotransmisores se llena, y van directamente a torrente sanguíneo, haciendo elevar su temperatura corporal.
Nuevamente Jerry la ha llenado de toda su virilidad, embistiendola duro, saliendo y entrando en ella con locura.
-Jerry, no puedo mas -chilla y clava sus uñas en su ancha espalda y explota nuevamente, apretando la polla de Jerry con las palpitaciones que ejerce su vulva, llenándola de sus fluidos, incitando que también se corra, el brama fuertemente inundando su interior de su espeso y caliente líquido.
-estoy muerto -dice Jerry luego de unos minutos, sobre el pequeño cuerpo de Alatir
-uau Jerry, siempre logras sorprenderme
-siempre es un placer hacerlo chiquilla -besa su hombro y se tira sobre su espalda -es hora de irme al hotel
-no, quédate conmigo
-eso no sería prudente, y bien lo sabes
-entonces llévame contigo
-eso me encantaría, pero creo que antes tengo que hablar con tus padres, ya sabes pedirles una disculpa... Seguir los pasos
-si no hay más remedio
-ven acá -la jala hacia él- no me iré a ningún lado, en cuanto salga el sol aquí estaré, no me quiero perder ni un segundo de estar a tu lado.
-me gusta estar contigo
-a mi también me encanta... Ahora me tengo que ir, pero podemos desvelarnos como unos adolescentes enviado mensajes y cosas así
-es una buena idea.

-mamá -Jerry no puede esperar a darle la noticia a Catalina- soy el hombre mas feliz del mundo
-demonios Jerry, me has dado un susto de muerte... Es demasiado tarde
-lo sé mamá, pero no podía esperar para darte la noticia
-¿de que hablas?
-mamá vine a Ensenada, a verla y manga dicho que esta embarazada ¡mamá seré padre! Altair y yo tendremos un hijo -a Jerry casi se le cae el móvil cuando su madre pega un grito
-dime que no estas mintiendo
-no madre, no haría eso
-oh mi vida, esto es maravilloso Jerry -solloza
-madre -dice serio- tienes que venir cuantos antes a Ensenada, necesito de ti
-ahí estaré mi amor, en cuanto pueda saldré para allá
-gracias madre -cuelga

La mayor parte de la noche Altair y Jerry estuvieron haciendo video llamada y enviando mensajes indecentes. El tiempo pasó volando y cuando se dieron cuenta estaba a punto de amanecer.