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—soy el novio—exclame una
vez frente al médico—¿Cómo
está ella? ¿Y mí hija doctor?

Pero no tuvo que decir mucho,
su mirada hablaba por si sola;no
eran buenas noticias y la verdad
me asustaba.

—no tengo buenas noticias—me
miro y suspiro pesadamente,ya
no quería escuchar lo que tenía
que decir—su novia perdió una considerable cantidad de sangre,
aún está en observación y le estamos realizando algunos estudios para saber si el bebé o ella están en
riesgo ¿Comprende?
—si doctor—respondí—¿Cuándo
voy a poder ver a mí mujer?
—dentro de unas horas—hablo mirando la planilla—ella por lo pronto tiene que descansar y recuperar la energía que perdió

El doctor se despidió y me dijo que me avisaría ni bien pudiera entrar a ver a Carolina. Todo paso tan rápido, no tuve tiempo de hacer nada y me odiaba por eso; ahora mí conejita estaba en la cama de este hospital y nuestra pequeña e inocente bebe corría riesgo por culpa del maldito de Héctor Kopelioff y su manía de querer arruinar nuestra vida.

—¿Por qué no podemos ser
felices?—cuestione sentándome
al lado de mí padre—¿Por qué?
—no hijo—murmuro mí padre captando mí atención—no les
des gusto de verte derrotado,
tenés que ser fuerte y poner todas
tus energías en estar con Carolina
que ahora te necesita mucho

Como todo podía llegar a cambiar,
mí padre no aceptaba bajo ningún terminó mí relación con Carolina y ahora era la única persona que estaba acá para mí sin juzgarme y sobre todo con sus palabras me hacía entrar en razón.

—siempre supiste decirme las palabras correctas para hacerme entrar en razón—respondí con mí mano sobre su hombro—vos fuiste
él primero en decirme que lo mío
con Carolina era algo de locos y
ahora paradójicamente sos la única persona que me está y permanece
a mí lado papá
—me di cuenta a tiempo que estaba por perder a mí único hijo por un capricho—bajo la mirada, estaba avergonzado—si vos sos feliz yo
no puedo ni tengo el derecho de reprocharte nada
—te quiero papá—susurre
—yo también te quiero hijo
mío—se acerco a mí y me abrazo fuertemente—y mucho, sos lo
más importante que tengo

Mí cuerpo estaba tensó, todo está situación me preocupaba y sobre todo el hecho de que Héctor no iba a parar hasta alejar a mí conejita de mí lado pero yo no lo iba a permitir al menos hasta que ya no me quedarán fuerzas para luchar; tenía que frenarlo ¿Pero cómo?

































































Volví, espero que les guste
Las quiero muchísimo

Querida socia |Aguslina/Agusnere|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora