CAPITULO 17

9.1K 372 34
                                    

EMILY
Después Logan y yo salimos del despacho para ir a cenar al salón ya que Nana nos tenía preparada la mesa. La cena consistía en tres platos principales y un postre; Ensalada, verduras con pescado, pollo y una deliciosa tarta de limón. De hecho Max también nos acompañaba.
Cuando estabamos cenando note algo de tensión en la mesa entre Nana y Logan, ¿Que será lo que tienen? Tengo que averiguarlo.
Al terminar de cenar, ayude a Nana a recoger la mesa y a lavar los trastos;
-¿Cómo haces para que una casa tan enorme siempre este tan reluciente?- le pregunté a Nana mientras que secó el último vaso que quedaba.
-Fácil, el truco es no ensuciar demasiado- Dice divertida pero se le ve algo distraída.
Yo solo reí por su comentario;
-¿Qué es lo que te ocurre con Logan?- Le pregunté sin pensármelo dos veces.
-Sabía que me lo preguntarías- Dice mientras se seca sus manos mojadas por el agua con el delantal, Nana suspira para luego hablar;
- Hace una semana más o menos discutí con mi hijo al contarle de que tenía algún parentesco con Doménico y ya sabes como es Logan con ese tema- Dice triste, algunas lágrimas comenzaron a salir de sus ojos. Yo no pude evitar romperme al ver la en ese estado, es que Logan no se da cuenta el daño que hace con su caracter... Debe aprender a controlar sus impulsos. Entonces yo limpie las pocas lágrimas que había derramado y ví en sus ojos el cansancio.
-Debes de descansar Nana- le aconseje.
-Tienes razón querida, los años no perdonan...- Dice mientras se da la vuelta para irse de la cocina.
Nana se despide de mí con un beso y se marcha, de seguro está sufriendo por la indiferencia de Logan hacía ella, tengo que hablar con él y pedirle que intente escucharla.
Cuando subí a la habitación encontre a Logan de espaldas en el balcón tomandose una copa, está tan sumido en sus pensamiento que ni si quiera nota de que estoy ahí. Al llegar me puse justo al lado de él, yo ni si quiera lo miré simplemente miré hacía el frente y hablé;
-Tienes que hablar con ella Logan- Digo son seriedad.
-Lo sé, pero necesito tiempo- Dice mientras tomá su último trago, deja el vaso en el barandal del balcón y se va hacía dentro de la habitación.
En cierta forma entiendo su actitud fría y cortante, no quiere hablar de temas que le causen daño. Hasta yo he tenido esa actitud con mi madre, el problema es que Logan aún no sabe que Nana es su verdadera madre. No quiero ni imaginar la que se puede liar cuando ella se lo confiese todo.
Después de unos minutos yo también decidí ir a dormir ya que mañana nos esperaba un día algo ajetreado.
Abrí mis ojos lentamente al notar un cálido beso en los labios, cuando por fin terminé de ablirlos ví a un Logan mañanero bantante sexy que me observaba y abrazaba la cintura.
-Buenos días preciosa- Me dice con voz ronca y seductora.
-Buenos días...- Digo mientras le regalo una sonrisa.
-Daría hasta lo que no tengo por pasar un día entero en la cama contigo- Confiesa mi Dios, ahora sí, mi cuerpo se ha hecho gelatina.
Yo sin saber que responder acaricié su rostro con mi mano, él cerró sus ojos ante mi tacto y lo bese. Poco a poco el beso comenzo a intensificarse, dejando paso a nuestras lenguas. Entonces, Logan bajo sus manos hasta tocar mis muslos desnudos acariciandolos con suavidad. Subió la mano por la camiseta que es lo único que llevaba puesto además de la ropa interior y comenzo ha hacer círculos con el dedo por mi abdomen, hizo que sitiera conquillas interiores muy satifactorias. Sin dejar de besarnos apasionadamente mi Dios, me posiciono debajo de él rozando su sexo con el mío, yo no pude evitar jadear pues nada más que con su tacto me ponía a cien. De repente unos golpecitos en la puerta hace que nos detengamos;
-Mierda...- Susurramos a la vez Logan y yo, al escucharnos no pudimos evitar reírnos.
Nuevamente los golpecitos en la puerta se hicieron presentes, Logan rodeó los ojos cansado y preguntó;
-¿Quién es?-
Yo reí por ver la cara de Logan, la situación lo merecía.
-Soy yo señor, traigo el desayunó- Dice Nana con su voz dulce pero con formalidades.
-Yo iré- Le digo a Logan con una sonrisa para que no se mostrará tan sério, lo que menos quiero es que Nana sufra otro de los rechazos de Logan.
Mi Dios griego se quitó de encima de mí y fuí a abrir la puerta;
-Buenos días señorita Emily- Dice Nana con una sonrisa al ver me, traía la bandeja con el desayuno en la mano.
-Buenos días Nana, no se preocupe yo la llevaré- Le digo mientra cojo con mis manos la bandeja.
-Como guste señorita- Dice Nana antes de irse.
Yo cerre la puerta tras de mí con un pie y fui en dirección a la cama, Logan me mirá de arriba a bajo con una ceja levantada;
-¿Qué pasa?- pregunté mientras me volvía a sentar en la cama junto a él.
- Nada, solo que esa camisa te hace lucir muy sexy- Dice seductor mientras que coge una tostada y le da un bocado.
-Yo creo que me veo más sexy sin ella...- Digo igual de seductora que él, ambos sonreímos. Al terminar de desayunar Logan tuvo que irse a prepararse para la boda, asi que yo me metí en la ducha ya que el estilista estara dentro de medía hora aquí o eso fue lo que me informó.
Me despoje de la camisa, me quite la ropa interior y me metí en la ducha. Ahora que lo pienso... soy la mujer de uno de los narcotraficantes más peligroso de la ciudad, tengo que ser consciente de que Logan es un hombre que está dispuesto a todo, incluso de matar cosa que habra hecho me imagino. Pero he sido yo la que ha aceptado tener está vida junta él, una vida de criminalidad asi que ante la ley soy su cómplice, aunque tampoco es que me cuente mucho sobre su trabajo, bueno en realidad no estoy muy segura de querer saberlo. ¿Consumirá drogas? Por la virgen Emily que estas pensando, Logan trafica con ellas no las consume. En apenas unos minutos ya estaba aseada, me coloqué el albornoz y salí del baño. De repente alguién llamo a la puerta de la habitación haciendo que volviera a la realidad. Fui hacía la puerta y la abrí;
-Bella Emily... Que placer volverla a ver- Me saluda Guillermo con su acento italiano, hace una reverencia y me besa en la mano.
-El placer es mío Guillermo- Le digo con una sonrisa.
-Por favor pasa- le pedí al estilista. En una de sus manos llevaba un maletín enorme con maquillajes y todo lo que hace falta para peinarme, en la otro llevaba una percha con lo que supongo que sera el vestido pero no logré verlo porque estaba tapado con una bolsa de cremallera negra.
-Bien querida, comencemos por el pelo- Dijo Guillermo para luego dar comienzo a su trabajo.
Al cabo de una hora más o menos Guillermo ya había acabado de prepararme;
-Mi bella donna sino fuera porque soy gay yo mismo te hubiera pedido en matrimonio- Dice Guillermo piropeandome al ver su obra acabada.
-Gracias Guillermo- Le agracezco con una sonrisa. Sin esperar más me gire sobre mi misma para poder contemplarme en el espejo y si el día de la gala estaba guapa hoy estoy hermosa; Mi pelo estaba recogido en una trenza en la parte delantera y un moño bajo pero con varios rizos que sobresalían, el maquillaje era delicado y sutil, sin llamar escandalosamente la atención. Iba vestida con un vestido corto, color rosa palo, con pedrerias en toda la parte superior pero suelto y algo ponposo por la parte de abajo, era bellísimo.

OBSESIÓN DE UN MAFIOSO (editándose)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora