De Vacaciones: Parte 1

561 38 0
                                    

Al verme se extrañaron y Dean dijo:

-¿A dónde te crees que vas?

-A un spa.

-De eso nada, te estás muriendo.

-Gracias, Dean, no me había enterado. Mis poderes no se activan, es una pérdida de tiempo y ya me encuentro mucho mejor. Así que, para descansar de esta locura me voy a un spa.

-No vas a ir sola.

-No estoy pidiendo permiso, Dean.

-¿Quién te va a llevar?

-Pensaba coger uno de los coches del garaje.

-¿Para que los rompas?, de eso nada, vamos contigo.

-Agghh, por favor, no soy una niña ni tú mi padre, déjame en paz.

-Ve tú, Dean. Nosotros nos quedaremos aquí investigando y si encontramos algo os avisamos.-Dijo Sam ayudándome un poco.

-Si pasa cualquier cosa…-Dijo Dean advirtiéndoles.

-Te avisaremos de inmediato.

Ir yo sola con Dean tampoco me parecía tan mala idea. Si que quería ir sola, pero lo podía ver como una escapada romántica.

Durante el viaje no hacía más que pensar en cómo sería Dean en bañador. Ya lo había visto desnudo, así que mucha diferencia tampoco habría.

Llegamos, dejamos las cosas en la habitación y lo primero que le dije fue de ponernos los bañadores y bajar a las piscinas. Al principio se negó pero al final conseguí convencerle.

Bajamos y había distintos tipos de piscinas y distintas salas. Yo fui directa a la piscina más grande ya que era la de agua templada. Me metí y Dean detrás mía. Parecía que no había estado nunca en un spa por las caras que ponía. Yo no paraba de reírme de él por ello. Al final, nos quedamos en unas tumbonas que había en la piscina de las que salían chorros de agua. Me giré para mirar a Dean y como él estaba mirando el culo a una chica que estaba saliendo del agua. Me enfadé un poco y dije:

-Se te cae la baba.

Y salí de la piscina. Vi como me miraba un tanto extrañado.

Cogí las cosas y subí a la habitación. Mientras no pare de pensar. Él y yo nunca habíamos dicho que estuviéramos juntos, y él desde luego que no era mío. Igual había exagerado un poco. Siempre me había molestado que Dean ligase con todas, pero ahora fastidiaba aún más. Igual yo le dí más importancia a lo de la otra noche que él.

Tocaron a la puerta y me levanté para abrir. Era Dean:

-Hola.-Dije cabizbaja.

-____, ¿estás bien?

-Si, lo siento, solo he reaccionado un poco mal.

-Yo lo siento, ni siquiera he disimulado. Espera, -Dijo con medio sonrisa- ¿estabas celosa?

Me puse colorada al instante.

-Por supuesto que no, no te lo tengas tan creído.

Sonó mi teléfono desde dentro de la habitación y ambos entramos para que yo contestara. Era Sam por lo que puse el altavoz.

-Hola, Sam.

-Hey, Sammy, ¿que pasa?

-Tenemos un caso para vosotros.

-¿Qué? Pero si estamos de descanso.

-No te preocupes, ____, no tendrás que moverte mucho ya que el caso es en el spa en el que estáis.

-Por eso nunca venimos a un spa.-Dijo Dean rodando los ojos.

-¿Qué es lo que ha pasado?

-Durante los últimos años un montón de gente se ha suicidado sin motivos aparentes. Creo que el edificio está maldito, deberíais iros de ahí.

-Por eso las habitaciones son tan baratas.

-Pero, en todos los hoteles alguien ha muerto. No es algo tan raro.-Dije ignorando los comentarios de Dean.

-Aquí mueren en orden de las habitaciones. Van 234 personas,  toca la habitación 235.

-Dean, esa es la habitación que está al lado de la nuestra.

-¡Ahhh!-Se oyó en la habitación de al lado.

Dean y tu (Una vida desconocida)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora