Shadow and Light

2.

PV KUROKO

Desperté. Me encontraba en una pequeña habitación de hospital con un gran dolor de cabeza. Intenté mover el brazo izquierdo, pero no pude. Entonces me di cuenta. La habitación estaba llena de personas. Eran mis compañeros de la Generación de los Milagros. Además, había otras dos personas. Un pelinegro y un pelirrojo con las puntas negras.

-¿Donde estoy?

-¡Kurokocchi por fin despertaste?- Un rubio de ojos color miel me habló. ¿Kurokocchi? Ese era Ryouta Kise, el dorsal 8 del Teiko.

-Kurokochin, ¿como te encuentras?- Un chico muy alto de pelo color morado habló esta vez. Atsushi Murasakibara, el 5 del Teiko.

-Parece que el Oha Asa! no estaba de tu parte hoy- ¿Peliverde, con gafas y hablar del Oha Asa!? Sin duda era el 7 del Teiko. Shintaro Midorima.

Y así, poco a poco, fui reconociendo uno a uno a mis compañeros de la Generación de los Milagros. Pero seguía sin centrar a los otros chicos que estaban allí. Tal vez serian amigos de Kise-Kun. Pero para cerciorarme se lo pregunté a mi Luz.

-Aomine-Kun.

-Dime Tetsu.

-¿Quienes son ellos?

PV KAGAMI

Estaba arrepentido. Arrepentido y asustado. Aún tenía en la mente como ese coche se llevaba a Kuroko por delante. No había sido totalmente mi culpa. Ese Ahomine me drogó.

FLASBACK

Hoy es mi día libre y lo aprovecharía para prepararle una velada romántica a mi querido Kuroko. Me metí en la cocina y empecé a pensar lo que podía preparar. Al rato, oí que llamaban a la puerta. Era extraño. Kuroko no llegaría hasta dentro de dos horas.

Fui a abrir y ahí encontré con el ex-compañero de equipo de Kuroko, su ex-Luz, su ex-novio. Aomine Daiki. Cuando el jugaba en el Toõ y yo en el Seirin nos llevábamos a matar, pero ahora que trabajábamos codo con codo (el como policía y yo como bombero), éramos buenos amigos.

-¿Qué hacés aquí?

-Vengo a que celebremos mi ascenso.

- Tío que bien. Me alegro por ti pero quiero prepararle algo romántico a Kuroko ya que es mi día libre.

- Venga, he traído cervezas.

- Vale, pasa. Pero solo una, luego te vas.

- Qué si.

Nos bebimos la cerveza entre risas pero de pronto, empecé a sentirme mal. Tenia un calor sobrehumano, mi respiración era agitada, mi corazón latía muy rápido y mis pantalones me dolían. Aomine me mostró una sonrisa que me heló la sangre e hizo que me entrase miedo.

- ¿ Qué me has hecho maldito?

- Nada que no te haga disfrutar.

Intenté huir de él pero estaba tan débil que no podía moverme. Me llevó como si fuese un saco de patatas hasta la habitación que desde hacia dos años compartía con mi Sombra y me tiró en nuestra cama en la cual habíamos compartido Kuroko y yo tantos momentos. Ahomine dijo que lo disfrutaría y lo disfruté pero no tanto como cuando lo hacía con Kuroko.

Y la puerta se abrió. Vi su cara rota con lágrimas en los ojos. Me sentí el mayor idiota del mundo.

- Kuroko, te lo puedo explicar.

FIN DEL FLASBACK.

Ahora estábamos todos en el hospital esperando a que Kuroko despertase. Menos mal que a mi lado estaba una de las personas que mejor me conocia: Tatsuya Himuro.

- Ya verás como despierta pronto.

- Oh shit!

- Taiga stop!

- Shut up Tatsuya!

- Bakagami y compañía. Cerrar ya el pico.

- Ahomine deberías ser tu quien cerrara el pico. Que Kuroko esté así es por tu culpa.

- Podéis parar ya. Lleváis dos horas así.

- Midorimacchi tiene razón. Gritando no solucionareis nada. Sólo que nos echen a todos.

- Rubia cállate ya. No me calientes.

- Ya te gustaría que te calentase Morena.

- Fuck!

-Dejar de discutir si no queréis que os abra en canal con mis tijeras.

Todos nos callamos y oí la dulce (no mucho la verdad en estos momentos) voz de mi Sombra.

-¿Donde estoy?

-¡Kurokocchi por fin despertaste?

-Kurokochin, ¿como te encuentras?

-Parece que el Oha Asa! no estaba de tu parte hoy.

Kuroko me miró y le sonreí. Tenia la vista nublosa debido a las lágrimas que se agolpaban en mis ojos. Pero algo no iba bien. Me miraba como si no me conociera.

-Aomine-Kun.

- Dime Tetsu.

- ¿Quienes son ellos?

No me reconocía. Con el golpe había perdido todos los recuerdos relacionados conmigo.

-Soy Kagami Taiga. Estuve contigo cuando estuvimos en el Seirin.

-Kagami-kun... El... El 10 del Seirin.

-Si, y el es Tatsuya Himuro, mi mejor amigo de la infancia.

-Me alegro que estés bien Kuroko-Kun.

-Gracias.

La hora se visitas se acabó y le prometí a mi Sombra que al día siguiente volvería para estar con él. Tendría que reconquistarle y sabía que no sería fácil y que además tendría rivales a los que superar.

CONTINUARA