Capítulo 5

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Narra Everett.

Strange se había portado algo distante desde ese día, casi no me dirigía la palabra era como si yo no estuviera presente. En la mañana sólo era un "buenos días" antes de salir de la habitación hasta que se ponía oscuro y regresaba a decirme "duerme bien" mientras se acostaba dándole la espalda a mi cama. No es que me afecte su comportamiento hacia mí, me da igual...debería darme igual ¿no?.

Pero debo admitir que se vuelve un poco tedioso estar encerrado y no tener nadie con quien hablar más que mis máquinas de ejercicio, Strange era un engreído, aparentemente violador, no sabía escuchar, acosador y todo lo malo que ha demostrado ser, pero era una salida de la monotonía en este encierro. Y sí, sé que no puedo salir de la habitación, pero ¡ey! Nada malo me ocurrirá dentro de la casa.

La puerta estaba asegurada, sí, pero era sólo para impedir que alguien entrara más no que alguien saliera así que fue fácil burlar la cerradura. Los pasillos eran gigantes y muy confusos, no lo noté la primera vez que vine, debí estar demasiado distraído.

Caminé y caminé por ellos varios minutos, tal vez una media hora, algunos tenían foto de Strange que me confirmaban su egocentrismo, algunas reliquias y algunos libros, pero aún no encontraba la sala principal.

Al cabo de unos segundos escuché unas voces que venían del fondo de un pasillo, en un principio creí que era Strange con su supuesto amigo Wong así que traté de ser lo más sigiloso posible, sin embargo al acercarme más me di cuenta que era una voz femenina.

Llegué al final del pasillo y me asomé sólo un poco, no quería ser descubierto. Me di cuenta de que en efecto era Strange hablando con una mujer, era blanca, su cabello era casi pelirrojo y parecía estar muy cómoda hablando con él.

-En serio no puedo creer que estés aquí... -le dijo sonriente-

-Me dieron vacaciones en el trabajo y me dije "¿por qué no visitar al viejo y amargado Stephen? –Hizo muecas con su cara lo cual desató la risa de Strange-

¿Por qué estaba tan feliz con ella? Nunca lo había visto reír tanto.

-Jajajaja gracias por venir Christine, me hacía falta, necesitaba hablar con alguien.

¿Acaso yo estoy pintado en la pared o qué?

-¿Ah sí? –le dijo ella abriendo los brazos sonriente- venga, un abrazo

-No, Christine, no empieces.

-No me quedaré si no me abrazas ¿eh?

-...Ah, ok, ok tú ganas...

Strange la abrazó fuertemente unos segundos para luego levantarla con sus brazos y dar vueltas con ella mientras ambos se morían de la risa. Se veían muy felices de estar juntos, pero ¿por qué? Se supone que él me dijo que se sentía atraído hacia mí y ahora además de ignorarme durante días lo encuentro así con una mujer. Es un maldito mentiroso. Como lo odio.

No sentía más que rabia, se supone que Strange debía protegerme y en vez de hace eso ha estado con esta mujer todos estos días, joder, ¡no es justo!

-Ya hablando en serio... -dejaron de abrazarse y se pusieron serios por fin- te tengo que hablar de algo.

-¿de qué? –dijo ella confundida-

-Necesito consejos... es acerca de Everett...

Apenas escuché mi nombre, así como un impulso involuntario me volteé para regresar a la habitación. Por algún motivo mi corazón se aceleró, no lo entiendo, yo no siento nada por Strange, no debo sentirme tan emocionado porque le haya mencionado mi nombre a la chica. Sin embargo esa estupidez no pasó desapercibida, al voltearme tropecé con una de las reliquias del pasillo e hizo un gran ruido llegando a donde estaban ellos.

Un viaje al pasado (Rosstrange)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora