Capítulo Doce

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Bueno, seguía al lado de Killua, no se el como aun no me han encontrado, las probabilidades de que hayan ido a una misión eran bastante altas. Y otra es que se hayan cansando de buscarme; mire a killua ya habían pasado los 20 días de estimación para que los chicos llegaran. Y vaya que lo hicieron, Milluki entro a la sala y comenzó a dar de latigazos al pobre albino, pocos segundos después Zeno entro y dijo que su padre queria verle, con facilidad rompió los grilletes que lo aprisionaban.

- Honey, ya puedes salir. - Oh diablos puedo jurar que el único que no noto mi presencia fue Milluki, suspire y camine hacia Killua.

- ¡¿Y esta que?! - Killua tomo mi mano y me arrastró hasta donde estaba su padre, este me miro extrañado; yo me tense. Comenzaron a tener una charla padre e hijo, lo mas bonito y tierno que he visto venir de los Zoldyck, aparte de Kalluto. Killua y Silva hicieron la promesa de sangre, el albino se levanto e hizo una seña de que ya nos fuéramos.

- Killua, esa chica se casara con Illumi. - Ahí va otra vez la burra al trigo. - No se puede ir.

- Padre, no se casara con Illumi... Por que se casará conmigo. - Abrí los ojos impactada, ¿QUE ESTA PASANDO DOCTOR GARCIA?, Antes de que pudiera decir algo Killua me cargo al estilo princesa para llevarme fuera de su casa. Su madre lo detuvo, le dio una mirada asesina y comenzó a llorar de felicidad, fuimos hasta la mansión de los mayordomos donde ahí fue que me bajo. Llegamos justo a tiempo que el juego de las monedas haya terminado, el albino salio primero y yo detrás de el.

- ¡Killua! - Gon se lanzó al chico para abrazarlo - ¿Honey? - Podía jurar de que todos nos miraban extrañados, como si intentaran descifrar por que estaba con Killua; me alze de hombros. Salimos de la mansión y mire a Canary, su mirada se veía triste pero aun así denotaba felicidad por su amo killua; ¿Y yo?, Solo sentía pena por ella. Los cinco comenzamos a caminar hasta la puerta de la prueba mientras charlabamos de cosas varias, en mi mente no podía quitarme las palabras de Killua, bueno solo me salvo el pellejo de casarme con su hermano, aunque no suena tan mal.

Puse una mano en mi barbilla pensante, y negué varias veces negando ma posibilidad de que Wunder naciera entre asesinos. Joder, ¿Por que presiento que terminaré con uno?

Mire a los chicos salir por la puerta de la prueba, esta se cerró antes de que yo pudiera pasar, mire a ambos lados y ahí estaba Killua, suspire y me acerque a el.

- Gracias, me salvaste el pellejo de casarme con tu hermano. - El desvío la mirada. - Mentiste muy bien.

- ... - Solo guardo silencio. - No mentía. Tu... Te casaras conmigo... - El rubor subió a mis mejillas. - Por que... Creo - Oh no sigas. - ... Que me gustas. - ¿Donde quedo mi KilluGon?, mis manos comenzaron a temblar y mi cabeza podía sacar hasta humo de lo avergonzada que estaba. A la velocidad de la luz me di la media vuelta y abrí las siete puertas de golpe, todos me miraban sorprendidos y yo me fuí a esconder detrás de un árbol. ¡Les juró que pensé que sólo podría abrír la primera!

Escuche unos gritos buscando me, me hice un ovillo en mi lugar; le gusto a la rata albina... Ahhh yo quería que fueras puñetas.

- Es tu culpa killua, ¿Otra vez le dijiste que te cae mal? - Pude escuchar la voz de kurapika regañar al antes mencionado, si supieras mamapika.

- Esta cerca, puedo oler azúcar por aquí. - Olvide el súper olfato de Gon, me olfatee y olía a panquesitos de vainilla. Debo dejar de comer tantos... Pero son tan ricos. - Ah, aquí estas, nos tenias preocupados. - Mire a Gon y este ofreció su mano, lo jale y lo abracé como a un peluche.

- Gon, no me dejes nunca. - restregue mi mejilla contra la de el.

- Claro que no te dejaré, eres mi amiga. - tome sus mejillas entre mis manos y las jale. - Oye, duele.

- Eres tan adorable...

- Bien, ya deja de abrazar a Gon - Killua lo alejó de mi, o se puso celoso por mi, o por él. Nunca lo sabre. Si, si lo sé, pero es que yo quería KilluGon.

- Antes de que se vayan... ¿No quieren venir a mi casa?, Le diré a papá que me preste su casa de verano de Padokia. De todas maneras estamos aquí. - Todos me miraron.

- ¿Casa de... Verano? - yo asentí.

- ¿Prefieren ir a la casa principal?, También papa tiene una casa en York.

- ¿Eres... Millonaria? - Menciono Leorio, yo asentí. - Oh... Vamos a la de Padokia - Tomó su maletín y los demás nos siguieron. Tomamos el autobús de regreso al centro de la ciudad, para después tomar un taxi el cual se dirigía a la casa de verano. Lo pague y bajamos del auto, me acerque al guardia y lo salude, nos dejo entrar.

— Señorita, su padre esta aquí, ¿Segura de que aceptara las visitas?

— Oh claro que lo hará, soy su princesa. — Ambos reimos y los chicos nos miraron confundidos. — Bien, supongo que les presentare a mi padre — me alce de hombros.

— ¿Esto es una casa de verano?, ¡Tu casa es enorme!, no me imaginó que tan grande es la casa donde en verdad vives. — Exclamo Leorio.

— Es diez veces mas grande que esto, vamos, debe estar en el gran salón, siempre esta ahí. — Comenzamos a caminar por la casa, los mayordomos hacían señal de repesto hacia los chicos y a mi para después continuar con su trabajo. Abrí la puerta del gran salón donde estaba conversando con algunos ancianos, supongo que eran otros lideres de la mafia. El verme se despidieron y salieron de ahí, yo baje la cabeza en son de respeto, cuando las puertas se cerraron abrace a mi padre.

— Honey, querida, no sabes cuanto te extrañe, ¿No hiciste un desastre en casa? — sonrió, miro a los 4 chicos que me acompañaban. — ¿Cual de ellos es mi yerno? — Los examino, los chicos estaban sonrojados.

— ¡Papa!, Son... Son unos buenos amigos que conocí de camino acá, ¿Y que crees? — Él alzo la ceja. De mi bolsillo saque la licencia cazador. — Soy una cazadora profesional ahora.

— ... Oh genial... Honey, no quiero que seas eso, ¿Quien te dijo sobre los cazadores?, lo despediré de inmediato.

— ¿Que..?

— Honey, no puedes ser un cazador, ese mundo es peligroso; entiende que quiero protegerte. Dame la licencia. — La iba a tomar, pero me alejé.

— Pero si soy cazador.... Significa que soy fuerte... No moriré tan fácil... — ¿Que estaba pasando..?

— Honey, dame la licencia.

¿Pertenezco aquí? [Hunter x Hunter] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora