~Beloved~

-La Cena y los Reyes-

Previamente en Beloved:

Después de haber visitado Kaijou e ir con su primo Ryota, Kouki regresaba a Seirin, encontrándose al Rey de Rakuzan ¡Akashi Seijuuro! Luego de un extraño suceso y unas cuantas palabras compartidas, Kouki regresó a su fraternidad para prepararse para su primera cena en Teiko.

Cuando Kouki entró en su recámara, fué directo al cuarto donde se encontraba el baño y se dispuso a darse una ducha. Quitó cada una de sus prendas y las dejó en el cesto a un lado del armario donde estaban las toallas y llenó la tina con agua, regulando su temperatura.

Ni muy frío ni muy caliente.

A temperatura ambiente, pues su cuerpo así lo requería y gustaba siempre.

Primero un pie y luego el otro, y lentamente se deslizó dentro del agua, suspirando al sentir el contacto cálido con su helada piel. Tan bien se sentía.

Sonrió levemente estiró todo su cuerpo. Agradecía ser de estarura algo pequeña. Sus mejillas se sonrojaron y sus orejas se agacharon levemente y se sumergió hasta la nariz. Jugueteó con el agua y pensó un poco en lo que había hablado con su primo.

¿Sus familias les estaban ocultando algo? Parecía ser muy importante. Y si así lo era ¿Porqué ocultarlo?

Después de estar ahí metido un buen rato, Kouki decidió salir, no sabía a que hora era la cena, pero supuso que era cerca a las 19:00 hrs. Volvió a su habitación con una toalla en su cintura y otra en su pelo, solo para observar una especie de uniforme en su cama. Se acercó curioso y tomó la nota que estaba a un lado de aquello y la leyó:

Esto se usa para la cena de todas las noches. Solo es uno así que mándalo a lavar todos los días.

F.K

El castaño ladeó el rostro levemente e hizo un ademán con los hombros, luego se vistió con aquello y bajó de su suite a la planta baja en donde Kuroko lo esperaba.

-...Furihata-Kun...-Saludó al verlo salir del ascensor VIP.

-...¡Kuroko-Kun! -Exclamó y puso una mano en su pecho-...No me asuste así, es de noche y pude haber pensado que era un fantasma o algo así...-Suspiró.

-...Eso no fué gracioso, Furihata-Kun...-Kuroko tan solo parpadeó, Kouki rió un poco-...Vamos Furihata-Kun, la cena empieza a las 20:00 hrs pero debemos estar ahí antes de las 19:30 hrs pues cierran las puertas a esa hora...-Le dijo mientras comenzaban a caminar, con algo de prisa.

-...¿Cómo es que sabes eso? -Enarcó una ceja. Ni él pudo sacarle eso a Ryota.

-...Kagami-Kun me dijo eso y otras cosas...-Se sonrojó un poco.

-...No quiero ni pensar lo que te dijo...-Una pequeña gota de sudor bajó por su frente-...Aunque es buena ayuda para tu estancia aquí...-Vió lo positivo.

-...No puedo creer que es el primer día y ya me emparejé...-Sus orejas se agacharon levemente, tan solo al pensar en su pareja.

-...Kagami-Kun parace ser un buen muchacho...-Sonrió el castaño-...Espero que sepa tratarte bien y si no lo hace, dime que yo lo pondré en su lugar...-Le guiñó un ojo e hizo reír al pequeño can de cabellos celestes.

Ambos llegaron justo a tiempo y lograron entrar antes de que cerraran las puertas del gran comedor. Si Kouki pensó que el comedor de los Kise era enorme, esto sobrepasaba sus espectativas ¡Eso si era enorme! Seis mesas muy bien adornadas, muchas sillas con una muy decorada, cubiertos dd plata relucientes, vajillas y vasos de porcelana muy bien cuidadas.

Perfección.

La mesa de los profesores estaba frente a todas las mesas y estaba llena. También estaba muy bien adornada, incluso más que las de los estudiantes. Al parecer, los docentes también cenaban con ellos.