HNLY ♡ jeongmo

❥ Capítulo 11

El día para JeongYeon fue horrible. Después de aquella pequeña conversación, Momo la ignoró en todas las clases, no le dirigía la palabra ni tampoco la mirada. Y la coreana tampoco intento hablarle por respetar su espacio, ella sabía que tenía que pensar sobre lo que había sucedido.

El último timbre sonó para que los estudiantes volvieran a sus casas. Algunos alumnos soltaron un pequeño grito de emoción e hicieron un gran desorden en el salón por salir más rápido, mientras tanto, JeongYeon, guardaba sus cosas sin ánimos. Lo único que quería era llegar a su casa, tirarse en la cama y pensar en Momo.

La rubia levantó su mirada y sacó su mochila, logró ver a Momo salir con SoonYoung con una pequeña sonrisa decorando su rostro aunque no se notaba tan feliz como siempre y ella sabía muy bien por qué estaba así. JeongYeon soltó un pequeño suspiro y comenzó a caminar, con la intención de llegar a su casa lo más rápido posible.

En uno de los pasillos se encontró con JiHyo, quien tenía una gran y hermosa sonrisa en su rostro mientras se acercaba a la pelicorto.

— ¡Hey, Jeong! — Le saludó — ¿Qué te parece si salimos? — Preguntó la menor

— JiHyo... Hum, no estoy con ganas... — Le respondió para después apretar sus labios — Lo siento. —

— ¿Qué sucedió? Tú sabes que puedes contarme lo que quieras, yo te escucharé atentamente. — La chica con ojos grandes posó su mano en el hombro de su amiga, regalándole una sonrisa.

— Nada importante, de verdad, no te preocupes. — Intento sonreír pero fue en vano, no tenía ganas como para hacerlo.

— Hm... Qué te parece si... ¿Salimos a comprar unos cafecitos y me platicas de lo que te tiene así? — Sugirió la menor. JeongYeon lo pensó un momento, tal vez desahogarse la ayudaría en algo y le diría algún discurso con buenos argumentos.

— Vale, me ganaste. — Dijo finalmente. — Vamos a comprar unos cafecitos. —

— ¡Perfecto! — Y dicho esto, JiHyo y JeongYeon se dirigieron al starbuck más cercano que encontrarán por la zona.

Estuvieron un rato platicando mientras caminaban, comentando sobre cómo les estaba yendo este año y las expectativas que tenían.

JiHyo se acercó al cajero y pidió un cappuccino y un americano, el favorito de JeongYeon. Solamente unos minutos más y el pedido estaba listo, la menor agarró los vasos y se dirigió hasta JeongYeon con los cafés.

— Toma, Jeong. — Se lo entregó con una pequeña sonrisa antes de sentarse en la silla de al frente.

— Gracias... — La nombrada tomó el americano y probó un poco. Estaba exquisito, como siempre.

— Y bien, ¿Qué sucedió? — Cuestionó la chica con ojos grandes y preciosos

— La cagué, JiHyo... lo arruiné. — Le respondió la mayor mirando la mesa, se podía ver la tristeza que sentía a través de sus ojos. A JiHyo le entristeció ver esa imagen de su amiga, no le gustaba ver a las personas que quería de esa manera. — Momo ya no me habla...—

— ¿Por qué? Ya sabes que te escucho atentamente.—

JeongYeon soltó un suspiro antes de comenzar a contarle todo lo sucedido. Tomó aire y levantó su mirada. — Bien... Ayer, fui donde SoonYoung porque necesitaba saber qué tiene en la cabeza al andar con Momo y JeongHan al mismo tiempo, después de "conversar" con él — JeongYeon hizo unas comillas con sus dedos — Fui donde Momo, con la intención de contarle lo que me había dicho SoonYoung pero ella estaba ebria y.. caliente, La cosa es que pasó y al otro día me desperté junto a ella desnuda. Llegamos tarde a clases y en el recreo, Momo me llevo al baño para hablar sobre unos chupetones que le dejé por... ¿casualidad? y ah... Fui tan tonta que le dije que no debía preocuparse mucho, tan solo le quité la calentura y ya esta pero Momo me respondió que ella sintió algo mas y... ¡Joder! — La pelicorto apretó sus puños con fuerza, sentía rabia por sus acciones.

— JeongYeonnie... Tranquila...— JiHyo acarició suavemente el hombro de la contraria. Apretando sus labios y pensando en qué decirle. — Mira, Yeonnie, escúchame... — JeongYeon alzó sus cejas — Yo creo que lo mejor es que se den un tiempo, para que cada una piense bien en sus acciones porque estamos claro que para ti significó mucho más que hacerlo porque ella estaba caliente, y que Momo también sintió algo mas, hasta ella te lo dijo. — La mayor soltó otro suspiro más, tomando más de su americano. — Cuando te sientas lista, podrías acercarte a hablarle y contarle como te sientes realmente. —

— ¿Tú crees que deberia hacerlo? —

— ¡Claro! Algún día te debes que confesar, ¿o no? —

— Ah... voy a pensarlo primero, y esperaré a sentirme lista para hablarle a Momo. — JeongYeon esbozó una pequeña sonrisa, provocando que JiHyo copiara su acción — Gracias, JiHyo. —

— No es nada~ Ya sabes que puedes contar conmigo. —