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d i e c i n u e v e

No era pasado de la media noche cuando Taehyung ya había estado con siete hombres desde que empezó el turno, uno más y su cuota estaría cubierta, tenía dos opciones; seguir trabajando y embolsarse las ganancias o simplemente pasar lo que restaba de la noche en la penumbra y descansar. Físicamente su trasero pedía piedad, y emocionalmente no podía evitar sentirse sucio. En un intento de saber si alguien estaba mínimamente interesado había hablado menos con sus frecuentes y se redujo a complacerlos, patéticamente solo fue eso, sexo.

Los elogios a su cuerpo y belleza le habían interesado en lo más mínimo y fue tan descortés y frío con sus clientes que uno se atrevió a llamarlo "gatito uraño" aquello le había molestado muchísimo y tan pronto como aquel anciano se retiró corrió a encerrarse en los sanitarios para limpiar todo su cuerpo, en especial la zona entre sus piernas. La razón por la cual se mantuvo tan ocupado fue que no quería que Hoseok se apareciera como si nada y pidiera su servicio. Taehyung sabía que no tenía ningún derecho de molestarse por que aquél tuviera pareja, muy a pesar de que incorrectamente había creado un pequeño mundo de fantasía, que se derrumbó al saberse un medio sexual para saciar una curiosidad.

Salió del sanitario vistiendo en la simple bata, sus largas piernas prácticamente estaban descubiertas y muchos hombres lo miraron con perversión; a Taehyung le importó una mierda. Justo al regresar al pasillo para buscar un nuevo cliente se encontró al indeseables pelirojo recargado en el otro lado con uno de sus compañeros pasando descaradamente sus dedos sobre su pecho. "Sínico" dijo mentalmente, he intento de manera inútil pasar desapercibido, pero Hoseok lo siguió. El menor dio pasos rápidos hasta volver al sanitario, entró a uno de los cubículos y se encerró. Sus manos sobre su pecho queriendo calmar sus latidos cuando Hoseok golpeó débilmente la puerta con sus nudillos.

- Vete. - Espetó molesto.

- ¿Podemos hablar? -

- No hay nada de que hablar, si quieres follar hay varios chicos fuera, algunos lo harán gratis también. - Sugirió con desgane, la simple idea de otro hombre complaciendo a Hoseok le resultó insultante. Ante las palabras él pelirojo soltó un prolongado suspiro. Taehyung escuchó pisadas y supuso que había atinado al que al negarse Hoseok buscaría alguien más. Pero grande fue su sorpresa cuando vio una cabecita roja asomarse por encina del cubículo, quedó boquiabierto y estuvo por reclamar cuando Hoseok pasó una de sus piernas y con dificultad saltó dentro, el menor quedó arrinconado ante el pequeño espacio.

- ¡No puedes hacer eso! -

- Ya lo hice y no saldremos hasta que me escuches. - Dijo a la par que tocaba su nuca con nerviosismo. - Taehyung, no puedo darte explicaciones. -

- Claro que no, porque no somos-

- No puedo dartelas porque ni siquiera yo las tengo. - Le cortó y el otro lo miró sugerente. - ¿Recuerdas cuando nos conocimos?, que te dije que vine con un amigo y lo perdí, su nombre es Yoongi, y siempre ha sido abiertamente gay, nunca lo juzgue, pero he de admitir que tenía cierto conflicto con sus preferencias, me era incómodo. Crecí en un núcleo familiar convencional, me criaron con ideas machistas, yo nunca he sido bueno tomando las riendas de mi vida, estudie lo que mi padre quería, estoy con la mujer que mi madre eligió y vivo la vida de mierda que ellos me inculcaron.... Taehyung, soy un perdedor, y soy heterosexual; Lo sé porque me siguen atrayendo las mujeres, pero también me atraes tú. No me describiré como una persona bisexual porque eso sería mentirme más de lo que ya lo he hecho. Pero me gustas mucho, me gustas en todo sentido y la idea de estar contigo me atrae más que estar con cualquier mujer. -

El menor lo miró neutral, no terminando de creer sus palabras, era de suponerse que estuviera inconforme he insatisfecho con su vida, pero detrás de todo había notado que una nueva faceta -y quizás la real- había despertado en Hoseok "nunca he sido bueno en tomar las riendas de mi vida", ¿eso significaba que Taehyung sería el comienzo en la búsqueda de su felicidad?

- Te gusto... - Susurró con débil alegría.

- Me encantas. - Le agregó. - No hay momento en el que no estés en mi mente, sé que es descabellado, que apenas nos conocemos y yo soy un maldito idiota. Pero no estoy buscando nada con esto, temía dejarte sacar tus propias conclusiones y en consecuencia no quisieras estar de nuevo conmigo, por favor no me aléjes, no lo soportaría. - Admitió con toda sinceridad, dando un paso lejos del chico para observar sus expresiones.

Taehyung estaba inmerso en una felicidad dudosa "me gustas en todo sentido" si Hoseok supiera el valor que significaban esas palabras probablemente lo hubiera ironizado. Era más que eso, para Taehyung era más que eso, ¿sería Hoseok aquel que vería más allá de su físico y su imprudencia?, ¿sanaría su frágil corazón y su alma en decadencia? Hasta cierto punto era romántico, en su dulce imaginación no podía evitar sentirse en una película vintage, donde un caballero se enamora de una mujer de la vida nocturna, claro que él no era mujer, pero lo relacionaba.

- También me gustas. - Dijo sin verlo y Hoseok sonrió con ternura, acercándose al chico para posar su cabeza en el espacio de su cuello. - Abrázame. - Rogó, para enseguida sentir fuertes brazos a su rededor, él también lo abrazó, con sus manos aferrándose a su espalda como si su vida dependiese de ello. - No sabes cuanto he esperado esto... - Murmuró con la voz cortada. Y era cierto sentía que Hoseok era ese motivo, su rayo de sol y su esperanza, creyó firmemente en que era él para quien nació, para amarse y lograr ser amado.

Hoseok pegó su rostro he hizo que sus narices se rozaran unas cuantas veces haciendo reír al menor. Al principio Taehyung estaba nervioso por el hecho de estar medio desnudo, pero Hoseok parecía absorto en mirar únicamente sus ojos mientras sus manos lo sostenían cariñosamente, sin apretarlo, sin acariciarlo, no había nada sugestivo en eso, y Taehyung pensó que la cercanía era real, no un toque forzado al placer.

- ¿Qué pasará de aquí en adelante? - Indagó con duda, temiendo qué Hoseok lo tomara como un romance de media noche, aunque muy en el fondo sabía que no podía esperar un nuevo comienzo, había tantas cosas que debían concluir primero.

- No lo sé. - Admitió agachando un poco la mirada. - No tengo ni la menor idea. Pero podemos probar. -

Dejo un dulce beso en sus mejillas y lo tomó entrelazando sus dedos para salir del sanitario, Taehyung estaba contento de que Hoseok lo llevara de esa manera, porque desde ahí supo que no era como los demás, como los que se ahachaban y se cubrían por la vergüenza a ser descubiertos. Tomaron una habitación, y contrario a lo que el menor estaba predispuesto, solo se recostaron para darse inocentes mimos y hacer promesas inciertas. Era diferente, Taehyung rogaba porque Hoseok fuese diferente.