Mi Verdadero Yo.

El romance no va con los Sádicos.

Sougo dentro del hospital iba despertando de su sueño. Ya habían pasado varios días de internación. Y lo primero que ve cerca suyo es una trenza castaña. Dormido a un costado sobre una cama de hospital. Por un momento pensó que sería otro paciente pero por la forma tan singular que tenía dicho personaje al dormir lo hacía dudar sobre ello. Este castaño estaba como atravesado en la cama, con sus brazos colgando a los costados y sus piernas sobre las barandas de la camilla.

La habitación estaba semi-oscura por las amplías cortinas que cubrían los ventanales. No lograba escuchar ningún sonido. Recorriendo su alrededor con la mirada. Y tocando sus  labios, recordaba cada centímetro dulce de la boca de su china.

Mientras seguía  sumido en su fantasía. El otro lo estaba observando con cara de pez.

Ryo- Que pervertidos son los terrícolas.

Sougo- ésto es un hospital para animales? Por eso estás aquí acostado?- lo decía con burla.

Ryo- ríe con dicho comentario -mas bien eres tú quién está siendo atendido aquí sadisto- con cara de póker face.

Sougo- quieres pelear para ver quién es realmente el más fuerte?- Lo decía amenazando.

Ryo- oi oi oi así es como agradecen los terrícolas cuándo cuidan de ellos?

Sougo-nadie te pidió que lo hicieras. Con su cara de monotonía.

Ryo- Kagura-chan salió hecha una piedra del cansancio. Ya pasaron dos días. Se olvidó que dejó aquí a un sa-dis-toooo???

Sougo con venitas de enfado trató de levantarse para propinarle una patada pero ingresan Toshi y el gorila.

Sougo sorprendido al verlos - gorira, mayonesa.

Toshi- a quien llamas mayonesa??

Kondo- sougo veo que estás recuperado- Toshi lo interrumpe.

Toshi- oi tu maldito, deja de holgazanear y levanta tu trasero de esa cama. O piesas estar allí toda la vida. Necesitas que mami te cuide Moscoso?

Kondo-no seas tan duro con él, solo tratas de ocultar tu preocupación- nuevamente es interrumpido por el pelo negro

Toshi- shiii- silencio gorira.

Kondo- Toshi me dijo gorira -llorando- por qué??? Tu nunca me habías dicho gorira- seguía llorando...

Sougo- no necesito que nadie cuidé de mí, además los que necesitan ayuda son tus gustos culinarios por esa cosa amarilla y viscosa mayora.

Toshi- NO INSULTES al espíritu de la mayonesa. Idiotas como tú, no reconocerían las delicias de la vida.

Kondo- joven Ryo arigatou.
Por cuidar de nuestro pequeño.

Sougo con cara de pez muerto.
Y Toshi con cara de asco.

Ryo- no tenía nada que hacer. Además es mejor tenerlo aquí sujeto a una cama que cerca de mi preciosa Kagura-chan...

Sougo seguía con la cara de pez mirándolos a ambos.

Gin- "Mi preciosa Kagura-chan" -aparecia el permantado imitando graciosamente a Ryo.- mocoso ni te creas que tendrás alguna oportunidad con Kagura, ella es un verdadero...

Plop..... Gintoki queda callado por el golpe en la cabeza de la pelirroja.

Kagura- De quién crees que estás hablando idiota de permantado.

Kondo toshi y sougo. Se quedan sorprendidos mientras que Ryo se acomoda de pie a lado de la cama de suogo.

Kagura- tu sadistoooo bastardo- y lo toma del camisón- me vas a llevar junto a mi bakaniki, quienes se creen para llevar a Soyo-chan.

Sougo sale de la habitación como una bolsa agitada al viento.

Ya fuera de la habitación lo suelta. Lo mira de pies a cabeza.
El estaba todo desaliñado y con cara de pez.

Sougo-china, me trajiste aquí para saludarme? El romance no va con los sádicos.- riendo con una cara picara.- Veo que estás mejor, y entiendo del por qué no volviste al hospital- pensando "por el danna".

Kagura- ya deja de molestar. Si quieres ser mi novio debes complacerme con 3 comidas al día y 15 cajitas de sukombu-aru.

Sougo- Pero si vas a comer así. Me vas a dejar pobre. Mejor continuamos como rivales- dijo para provocar a la pelirroja.

Kagura- eeeee.... Sadistoooo pervertido, me hiciste propuestas indecentes y ahora piensas retractarte-aru.

Sougo- no te propuse nada - con carita de pez.

Kagura- ahhh siiiiii... De acuerdo, ya veremos quién viene con la cola entre las patas pidiendo atención de la gran Gura-sama.

Sougo-china... La agarra de ambos brazos mirándola fijamente a los ojos. Tu me perteneces. Lo entiendes? - lo dice con vos baja.

Kagura- sintiendo su cuerpo tan cerca. Esos ojos carmín envolviendola. Y las palabras del castaño la hicieron tensarse de pies a cabeza. Ella no podía quitar los ojos de el, mientras la sujetaba de esa forma tan firme y tan protectora.
Deseaba desesperadamente un beso de dicho sadisto. Pero el beso no ocurrió.

Sougo soltó a su china y se dirigió devuelta a la habitación de hospital donde los demás se encontraban.

Kagura- que demonios???... quedó allí en ese pasillo. Sin entender del por qué  nuevamente volvía esa personalidad del sadisto con ella.