Maravillosa Tentación

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POV's Jackson

Solté un bufido mientras aparca el auto, Alex bajo enojado del auto tenía cara de "Voy a matar a Jessica" – además fueron sus palabras – por mi parte encontrar a la castaña que estaba ebria y metida en mi cabeza era una locura de pensamientos, quería poner mis manos alrededor de su cuello y estrangularla. Pero no podía, por el simple hecho de que era importante en mi vida... ¡Jodida Moon!

Dejo el auto sin seguro, tengo que buscarla a ella antes de que haga alguna locura peor, porque no sabía los alcances que ella tenía en ese estado.

— ¿Dónde estás? — murmure. Entre a la cabaña, y la música estaba en todo su volumen máximo, sentí mis tímpanos explotar y mi cabeza palpitar, a lo lejos ví a Mark. Me acerque a ellos a paso rápido

— ¿Jackson? — pregunta confundido Liam, Mark se gira y casi se ahoga con la bebida que tenía.

— ¿Dónde está Julieta? — pregunte de golpe.

— ¿Julieta? — Mark confundido y perdido abre sus ojos a tope al darse cuenta de la situación — ¡Joder la dejamos en la barra!

— Ya mire por ahí y no aparece. — hablé tratando de dejar mis instintos de golpearle por haberla perdido de vista.

¿Qué no median las consecuencias?

— ¿Ya buscaste por la fuente? — pregunta Liam.

Negué y sin despedirme volví salir de la cabaña, caminé un poco más arriba de donde había dejado mi auto. El frío ya se hacía presente. Una Castaña estaba acostada en una de las bancas hablando sola.

Sin evitarlo me reí. Lleve dos dedos al puente de la nariz liberando el estrés que se había adueñado de mi cuerpo.

¡Me estaba volviendo loco!

— ¡No! Yo ser la reina de Ponylandia. — se ríe, gira un poco en su eje y cae de trasero en el suelo — ¡Maldición!

— Julieta, levántate. — hable una vez me acerque a ella, levanta su cabeza mirándome desde el suelo y se queda así por un momento.

Bufa. — Ya vienes a arruinar mi diversión, eres... — no terminar porque estornuda.

Me puse de cunclillas y quite el asco que tenía para pasarlo sobre su cuerpo. Me mira fijamente, ladea la cabeza.

— Vamos. — murmure.

— ¡No quiero, los unicornios están junto a mi! — exclama como niña, suspire y la tomo en mis brazos quedando ella como un Koala sobre mi.

Agradecí mentalmente que no para tanto. — Tengo frío. — esconde su rostro en mi cuello, sus piernas se entrelazan en mi cintura, sus brazos alrededor de mi cuello.

Sentí su respiración. La abrace por la espalda. — Pareces una bebe Julieta, ¿Sabes? A veces tus acciones dan a pensar mucho. — empecé a caminar con ella pasando mi mano por si espalda suavemente tratando de ser cariñoso con ella, era casi imposible estar enojado pero lo estaba.

— Me porte mal, me escape con los chicos. — saca su rostro de mi cuello y me mira fijamente, pare antes de tropezar — Lo siento. — hace un puchero gracioso, reí haciendo que ella se sonrojara. Era demasiado tierna.

— Me va a dar un ataque de diabetes por tu culpa. — murmure, ella inclina su rostro un poco y besa mis labios castamente.

— Tus labios son suaves, me gustan. — con las mejillas y nariz rojas por la vergüenza y el frío, esconde otra vez su rostro.

Esta chica me... No sé porque estoy pensando en ello.

— Eres un fastidio. — murmure, su respiración se hace pausada, debe estar dormida, empecé a caminar hacia el auto.