Dulce Soledad...?

344 39 43
                                    

El sábado por la mañana, Miguel se despertó cinco minutos antes de que sonara su alarma, odiaba el sonido de ésta pero sobre todo detestaba cuando Dante aullaba para que Miguel se levantara para apagarla de inmediato, la luz que atravesaba su persiana ayudaba para mantenerlo despierto y con una ligera sonrisa acarició al xolo que se encontraba tranquilamente dormido junto a él en la cama. 

Hoy bien pude estar acompañado

Se levantó para al fin comenzar su día, entró a bañarse completamente decidido; después de todo quería estar presentable para ir al aeropuerto, no sólo por sus ahora nuevos amigos, sino que los paparazzis y las fans siempre estaban a la orden del día, un tweet y se vería rodeado de fans que lo perseguirían hasta el fin del mundo con tal de conseguir una foto o un autógrafo decente y él no era alguien que se negara a eso, en cambio, le gustaba la cercanía que podía tener con sus admiradores. 

Romper el hielo donde estaba encerrado

Eran finales de octubre, no podría decir que había una gran cantidad de frío en el exterior pero la voz de mamá Elena siempre estaba presente en su cabeza "Póngase un suéter mi'jo, que hace frío y si no hace ahorita, perate y vas a ver que al rato vas a andar de chillón". Salió de bañarse y se dirigió a vestirse, unos jeans ajustados junto a sus confiables botas Rivera,camisa de cuadros roja con una camisa blanca en el interior, procurando pasar desapercibido entre la multitud de la calle y del aeropuerto, pues aún tenía que ir a comprar dulces para contentar al chino y a su hermano el celoso. 

Caminó un poco por la pequeña sala y pudo ver que Dante ya estaba despierto, lo saludó amable y se dirigió hacia la cocina para preparar ambos desayunos, después de pasar la mayor parte de su vida desayunando en compañía de su familia, seguía sin acostumbrarse a esta nueva vida, ahora sin su hermano mayor; el cual obtuvo su beca para Música en San Fransokyo un año atrás dejándole el apartamento para él sólo y un testarudo roomie que acababa de llegar hace un semestre de intercambio. 

Hoy bien pude haber conocer algún amigo

Abrió el refri, café negro y un tamal de dulce que logró guardar de un día anterior seguro le vendría bien a él, de igual manera tomó un poco de leche y la vertió en el plato de Dante. Vaya manera de comenzar el día, seguro sería un día tranquilo, como todos los sábados.

Terminado el pequeño desayuno se dirigió a su cuarto donde había una caja con sus discos, tomó un par de ellos y llevó su plumón indeleble, si iba a disculparse con el chino lo iba a hacer completamente por las buenas, después de todo, esa familia había ayudado tanto a Honey por como le había contado la noche anterior que hasta él se sentía en deuda con los Hamada. 

Cuando tomó sus cosas en una mochila se encaminó al fin a la salida del apartamento, no era un algo grande pero era algo a lo cual podía llamar hogar y lo dejaban tener a Dante, sin duda es un buen lugar para vivir por ahora. 

Al salir de casa se puso sus audífonos, colocó sus gafas y se dispuso a caminar hacia el metro, era uno de esos días donde el sol quemaba pero el aire corría frío, se podría decir que el Cempasúchil inundaba el ambiente, amaba esa época, lo único que no amaba era el hecho de tener conciertos para distintos lugares en esas fechas, el día de muertos lo tendría que pasar solo y no en familia como estaba acostumbrado, pero no podía estar mal, al fin de cuentas; todo era para un bien en el futuro .

Hoy bien pude haber dejado de estar contigo.

:::::::

La Vuelta Al Mundo [Higuel;Hiroguel]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora