Capitulo 12

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Suena mi despertador, miro a mi lado y Armando aun esta en la cama, si por fin me lo he puesto para desayunar con él, la idea de dar media vuelta y seguir durmiendo aparece rápidamente en mi cabeza, pero me levanto y me voy a lavarmela cara, así me despejo.


El desayuno es sencillo, yo cocino lo básico, así que unas tostadas con mermelada. Y preparo la mesa para ir a despertar a Armando.

-Vamos dormilón- digo a Armando mientras me coloco encima de él.

-Aun no ha sonado mi alarma- dice Armando .

-Pero tu novia te ha preparado el desayuno, y quedaría mal que no te lo comas- digo seria.

-A mi novia si que me la comería-mientras dice esto, se da la vuelta sobre mi quedando yo acostada en la cama- mucho me tienes que querer para levantarte antes marmota.

-Vamos levántate, o te ganaras el titulo de marmota 2- digo riendo. Mientras él me llena la cara de besos.

-Vale voy al baño y salgo- dice Armando cogiendo la ropa que va a ponerse.


Cuando sale es un perfecto Adonis, y yo no puedo dejar de agradecer tenerlo conmigo. Cuando hemos terminado el se va y yo me quedo recogiendo, luego me arreglo y me voy atrabajar con Sebastián.


Llamo al timbre y la puerta se abre. Y allí esta mi segundo amor, tiene una sonrisa en los labios, cuando paso dentro cierra la puerta.

-Buenos días- dice mientras me besa.

-Buenos días- le sonrió. Devolviendole el beso.

-No se para que te di las llaves si nunca las utilizas- dice Sebastián levantando una ceja.

-Yo tampoco lo sé, cuando ya te dije yo que no iba a utilizarlas.- digo con otra sonrisa, aunque tenga las llaves yo sigo a la mía.

-Me alegro que lo hayas aclarado con Armando- dice Sebastián, pasando su brazo por mis caderas y llevándome a la cocina para tomar el sagrado café.

-¿Tu como lo sabes?- se que están siempre en contacto, pero ayer estuve todo el rato con él y no toco el teléfono.

-Mientras dormías, me dijo que se levanto y te vio en el sofá, y eso es muy mala señal, te llevo a la cama- me mira y sonríe- y me contó el plan, y no podía fallar. Te lo dije Armando te quiere mucho.


No se que responder, que él me diga eso me pone un poco incomoda, ya que yo siento que también lo amo,pero aun así estoy con Sebastián. Simplemente le sonrió.


-Bueno tenemos que ir sacando trabajo,ya que este fin de semana haremos tantas fotos que intentaremos escoger, revelar y enseñar al cliente cuanto antes.- dice Sebastián,le gusta sacar el trabajo rápido.

-OK, me pongo en ello- le digo dejando la taza de café en el fregadero.


Hablamos de todo un poco, sobre todo del sábado, el cual como tengo que ir, la boda es en un hotel de cinco estrellas, son gente de dinero. Por eso lo de hacer tantas fotos, y estar tanto tiempo para ellos. Cuando terminemos volveremos a dormir a casa.


De vez en cuando Sebastián se acerca a ver como voy y aprovecha para besarme, porque aunque tengamos muestras de afecto, no desatendemos nuestro trabajo.

-Arroz blanco, macarrones o spaghettis?- pregunto a Sebastián. Mientras me levanto.

-¿pollo al horno?- pregunta Sebastián.

Entre dos hombres  (+18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora