Estoy feliz de escuchar esas palabras,siento como su semen sale disparado inundando todo mi interior, me muevo un poco para que termine de soltar todo dentro de mi, me encanta sentir su corrida dentro, Armando se queda quieto, noto su respiración en mi cuello, poco a poco se va normalizando, al final noto que se ha quedado dormido.
Sin molestarlo voy al cuarto de baño a limpiarme. De golpe viene a mi mente que no he cenado, siempre tomo la pastilla antibaby en la cena, voy a mi bolso y me la tomo. No estamos para aumentar mis problemas, con mi dilema ya tengo bastante.
Al volver a la cama, Armado esta de espaldas, me arrimo a él, paso mi mano por su cadera y me acerco a su oído.
-Te amo- se que no me oye.
A la mañana siguiente, Armando ya se ha ido, hoy es el día que le dije a Armando que podía venir Fran a tomar una cerveza, no me fío de él, así que monto el sistema"anti-ratones", uno en la cocina, otro en el comedor y otro enfocando nuestra habitación, ¿por que? No lo se, pero ¿porque no?.
Compruebo que toda la información pasa a mi ordenador, me arreglo y me voy a trabajar.
Tengo llaves de casa de Sebastián, mi suegro, joder no se como llamarlo. Pero prefiero llamar al timbre y que el abra la puerta, no sea que me encuentre algún día algo raro, si seguro que tiene alguien para follar, aunque me moleste el estomago de pensarlo. Él es libre, yo no.
-Buenos días, ¿café?- me abre Sebastián, su cara y el tono de su voz son serios.
-Buenos días, te pillo en mal momento,vuelvo más tarde- no se si lo he pillado con alguien.
-No, pasa, estoy bien, ¿café?- sigue siendo serio el tono, y no me mira.
-De verdad, Sebastián, me voy a dar una vuelta y más tar....- no me deja terminar.
-¿Quieres pasar de una puta vez? Y responder si quieres café.- ¡¡Dios!! el horno no esta para bollos.
-Si, perdón, si- paso insegura, nunca me ha hablado así.
-Quita esa cara, no te voy a hacer nada, solo tenemos que hablar- dice más suave.
-Lo siento, no quería hacerte enfadar-digo casi en un susurro, aunque no se que he hecho.
-Quien lo siente soy yo, perdóname,desde que te fuiste ayer he estado mal, te llame y te envié mensajes y no me respondiste, pensé que hoy no vendrías, y no he dormido en toda la noche- se ve abatido, débil, vulnerable, inconscientemente voy a abrazarlo. Me hunde verlo así.
-Lo siento, no he mirado mi móvil desde ayer antes de irme de aquí, se que tengo llamadas y mensajes pero no se de quienes son.- se queda quieto mientras yo lo tengo abrazado. Cuando noto que esta mejor lo suelto.
-Tenemos que hablar Sara- sigue serio,pero ya no es como al principio, esta más relajado. En cambio a mi se me dispararan los nervios. Soy como la avestruz si no lo veo no existe.
Mis manos tiemblan, en unos segundos pasan mil ideas por mi cabeza, es como dicen cuando vas a morir.
-No me mires así, parece como si fuese a matarte, solo quiero que hablemos e intentemos solucionar la tensión sexual que existe entre nosotros- eso me relaja.
-Sebastián tu me gustas mucho y me atraes, pero estoy con tu hijo, eso hace que me sienta culpable, porque siento que os quiero a los dos, y no quiero haceros daño a ninguno.- uuufff me siento aliviada ya lo he dicho, he reconocido que quiero a mi suegro.
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Entre dos hombres (+18)
ChickLitTodo era perfecto para Sara, iba a empezar una vida con su novio Armando. Pero sin quererlo, se ve atraída por su suegro, y lo malo, que su suegro siente lo mismo. Aunque ella huye de la tentación, las circunstancias hacen que este en tensión y ten...