Mi Mayor Deseo

Planeando una cita

-Entonces, qué harás? -preguntó la pequeña pelirroja.

-Aún no lo se, pero tengo que asegurarme de que le vaya a gustar -respondió su hermano mayor-. Ya sabes lo difícil que es Haru.

- Haruka-senpai es muy difícil de entender, mucho más de complacer. -pensó en voz alta la de cabello largo.

-Lo se... -empezó a pensar el mayor.

Ambos se quedaron pensando.
El pelirrosa quería invitar a una primera cita a su pareja, aunque primero debía pensar en algo que pudiera llamar su atención.

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-De verdad vas a hacerlo? -preguntó, aún incrédulo, el castaño.

-Si -respondió indiferente el azabache-. Además, no será difícil sorprenderlo.

-En eso tienes razón -lo apoyó el de menor estatura-, solo con que se lo pidas se sorprenderá ya que no es muy propio de ti pedir este tipo de cosas.

-Pero ya sabéis cómo es, no creo que acepte así porque sí. -dijo algo nervioso el más alto.

-Sé dónde llevarlo. -afirmó con seguridad el ojiazul.

-No puedes llevarlo a la piscina, Haru. -aclaró el ojiverde, dejándolo sin palabras.

-Alguno tiene una idea? -preguntó con seriedad el azabache, haciendo reír a sus dos amigos.

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-Tengo una idea! -exclamó emocionada la chica.

-Dime! -dijo su hermano, que quería escuchar cualquier cosa para su cita con Haru.

-A él le gusta mucho la piscina, verdad? -empezó a decir la pelirroja- Por qué no lo llevas a alguna piscina privada? Podrías reservarla y hacer que estuvieran solos allí.

-A una piscina privada? -el mayor empezó a pensar en voz alta- Puede que sea buena idea... aunque siempre hacemos lo mismo...

-Pero tienes que darte cuenta de que no quiere hacer otra cosa, sólo relajarse en una piscina y estar solo. -le recordó la pequeña.

-Tienes razón... Entonces decidido, lo invitaré a una cita en una piscina privada! -decidido, el pelirrosa cogió su móvil y llamó a su pareja.

-en la llamada-

Haru: diga?
Rin: Haru, soy Rin.
Haru: pasa algo?
Rin: quería invitarte a una cita.
Haru: una cita? Dónde?
Rin: es una sorpresa. Qué me dices?
Haru: vale.
Rin: genial. Mañana a las 5 te recogeré en tu casa.
Haru: vale, hasta mañana.
Rin: hasta mañana, te amo.
Haru: y yo a ti. *cuelga*

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-Se adelantó él. -confirmó el pelinegro.

-Dónde irán? -preguntó curioso el rubio.

-Dijo que será una sorpresa. -respondió frívolo el de ojos del color del mar.

-No irás a llevarte el traje de baño, verdad? -preguntó su amigo castaño.

-Claro. -contestó el azabache.

El ojiverde suspiró- No deberías llevártelo.

-Nunca se sabe lo que puede pasar! -afirmó el ojivioleta.