I Hate My Life

CAP #8: ~desmayo~

Tres semanas han trascurrido desde que tuve sexo con Levi durante cuatro días completos que fue tiempo que duró mi celo, pero hay algo que me preocupa, los síntomas de embarazo no han hecho acto de presencia, eso me hace sentir melancólico al saber que no hay ningún bebé en mi vientre.

Tocó tristemente mi panza plana mientras el profesor daba una detallada explicación de matemáticas para los que no entendieron el ejercicio escrito en la pizarra. Suspiró y me pongo a resolver algunos que están en libro, solo lo hago para perder el tiempo hasta que el timbre suene y pueda salir por comida a la cooperativa de la preparatoria “SINA”.

Tengo 16 años, hace dos semanas que cumplí esa edad. Levi me compró un pequeño pastel e invitó a Farlan y a Hanji Zoe, una amable y energética beta que habla hasta por los codos. Isabel no pudo asistir porque estaba enferma. También su hermana fue invitada, Mikasa Ackerman, una chica que me agradó mucho desde la primera vez que Levi me la presentó, sin embargo, no estoy seguro si confiar en ella, es probable que sepa todo acerca de la venganza, pero me pareció tan sincera en cada una de sus palabras.

¡basta, Eren!, ¡solo por eso cualquiera te ve la cara de idiota!

¡Levi también decía amarte y apreciarte cuando es todo lo contrario!, ¡¡reacciona, idiota!!

- ¡joven Jeager! - la voz del profesor de la materia correspondiente me sacó de mis pensamientos, haciendo que volviera a la realidad a la que estaba atado.

- ¿s-si profesor? -pregunté tímido, sintiéndome pequeño cuando mis compañeros de clase regresaron a mirarme y susurrar al respecto respecto, como si no pudiera escucharlos.

-pasa al pizarrón y resuelve todos los ejercicios que puse especialmente para ti- miré el pizarrón, donde había tres difíciles ecuaciones escritos en marcador verde.

Con cuidado me levanté de mi asiento, caminé hasta la pizarra y tomé el marcador que el profesor me extendió. Las analicé por un momento y comencé a hacer mis cálculos para hallar un resultado a cada una. Sentía una mirada persistente en mi espalda, no era una que quisiera matarme, sino, una que parecía observarme con cariño, como si fuese alguien muy valioso.

Al terminar, me giré de inmediato y busqué al dueño de aquel mirar, encontrándome con ese chico rubio de la carta al que no le he dado una respuesta aún. Cuando nuestras miradas chocaron, este se giró de inmediato con un sonrojo que cubría toda su cara de facciones finas, a esta distancia parecía un lindo omega, pero por lo que me escribió, sabía que era un beta como la mayoría de este salón, solo que él sobresalía de entre todos por ser inteligente y lindo.

¿lindo?, si, dije lindo. También se reconocer la belleza de las personas.

Antes de que me pueda sentar en mi lugar de estudio, el timbre suena, haciéndome suspirar, tomar mi pequeña bolsita azul que guardaba mi dinero y móvil, colgarla en mi hombro y salir del aula de medios, directamente a la cafetería del instituto para comprarme una rebanada del delicioso pastel de chocolate y una malteada de fresa. Me senté en una de las mesas vacías y me dediqué a comer tranquilamente, esperaba que Levi no llegara, mi cabeza se negaba en querer verlo, pero mi corazón aún latía por él y quería que me arrojara a sus brazos, me mimara, abrazara y besara, aunque sus caricias fueran frías y vacías.

Mientras metía la cuchara con pastel en mi boca, una lagrima corrió por mi mejilla, quise retirarla inmediatamente, pero alguien fue mucho más rápido que yo y la quitó por mí.

-no llores, eso no va contigo- alcé la mirada, encontrándome con el bello rostro de Armin, el chico más inteligente de mi salón y, seguramente, del instituto. De inmediato sus mejillas se sonrojaron y apartó la mano que limpió la lagrima que mi ojo desprendió- l-lo siento.