Capítulo 44:

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Mi alarma sonó y yo levanté la cara de la almohada somnolienta y la apagué. Volví a apoyar mi cabeza en la almohada, pero la siguiente alarma ya estaba molestándome nuevamente.

Gruñí y me levanté a apagarla.

-No me dejaste dormir anoche, bebé- dije cansada y mirando mi vientre ya bastante crecido.- Ya, deja de patear.

Estos seis meses de embarazo han sido de lo más agotadores.

Me bajé de mi cama y me dirigí al baño caminando como podía. Me miré al espejo y pasé mis manos por mi cara agotada. Las ojeras me llegaban al piso y mi cabello estaba asqueroso.

-Mmh-solté un quejido cuando sentí otra patada por parte del bebé -Basta ya- miré mi barriga- ¿Tienes hambre? Mamá también tiene hambre, vamos a comer.

Me lavé la cara y até mi cabello en una coleta desordenada.

Bajé las escaleras rápidamente, ya que cuando tenía hambre, no me importaba para nada si estaba embarazada.

Abrí el refrigerador ansiosa por buscar algo para comer.

-Tranquila, bestia- rió Rose desde el taburete de la cocina- Compré tus manzanas verdes.

-¡Sí!- dije feliz sacando una manzana verde de la heladera. Son mi adición.- Gracias a dios.

-No, gracias a mí que las compré porque tú no mueves tu culo de embarazada- dijo ella mirando su celular.

-Pero es que me pesa demasiado el cuerpo- me quejé sentandome en otro taburete.

-¡Claro que sí, estás cargando con un niño!- dijo ella obvia y luego soltó una risita- Espera a que llegues al noveno mes.

-Dios, no- suspiré cansada. Luego de unos segundos me levanté- Debo ir a trabajar.

-¿Al final no irás más a la Universidad?- preguntó Rose sin sacar la mirada de su celular.

-La retomaré cuando nazca el bebé- dije yo asintiendo y llevándome a la boca un pan tostado. Y luego otro- Pero trabajaré un tiempo más.

-Oye, ¿y los chicos cuando vuelven?- preguntó ella quitando la mirada de la pantalla y mirándome.

-Tú quieres que vuelva Harry, es distinto- reí y ella se sonrojó- No lo sé, en realidad.

Hace dos meses iban a venir supuestamente por unas mimos vacaciones de la gira. Pero al final surgieron inconvenientes y no lo hicieron. Pero creo que pronto ya estarán aquí.

Y respecto a Niall. No lo sé. Me manda mensajes cada vez que puede, pero no es muy seguido. He vuelto varía veces a la casa y está estaba llenas de flores enviadas con Niall, pero nada más. Lo que sí sé, es que Modest rompió su contrato con Meghan, ya que todos se enteraron de que yo estaba embarazada. Pero la prensa me acosa demasiado, y los mensajes de las fans son horribles. Me tratan de puta, zorra, interesada y que solamente quiero el dinero de Niall. Es doloroso cuando en realidad no tiene nada que ver.

Pero lo extraño demasiado, y si hay algo de lo que me arrepiento mucho, es de no haber aceptado cuando me pidió ser su novia nuevamente.

Me subí a bañar y cuando salí me paré en frente de mi armario lista para la diaria batalla de que pondría hoy.

-Vamos, sube- dije haciendo fuerza y saltando para lograr ponerme un bendito jean, pero no me cabía con esta gigantesca panza.

Suspiré y me lo saqué resignada. Entonces opté por ponerme un vestido blanco que me llegaba hasta un poquito arriba de la rodilla. Estábamos en verano y ya podía usar este tipo de ropa. Junto con él me puse unas converse negras que gracias a dios nunca me faltan. Me maquillé natural, nada raro ni extravagante y dejé mi cabello suelto para que se secara.

Let Me Fix You (n.h)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora