Capitulo 8

275 24 1
                                    

*Narra Irene*

*Al día siguiente, por la mañana, de nuevo en el backstage de Croke Park*

-Habla con él-Repitió Lorena por vigésima vez en lo que llevábamos de mañana.

-Mi respuesta sigue siendo la misma que todas las anteriores veces que me lo has dicho, no-Respondí.

-Diana, vamos a comprar un helado, mientras mamá hace algunas cosas-Le habló Lorena a la pequeña.

-No voy a hacer nada, lo vuelvo a repetir-Dije cansada de su insistencia.

-Diana, mientras hablo un momento con mamá ve a jugar allí con Lux un momentito-La dijo a la pequeña señalando a Lux y a su madre al final del pasillo.

-Si no quieres hacerlo por las buenas…-Dijo metiéndome dentro de una habitación- habrá que hacerlo por las malas-Salió de esa habitación cerrando la puerta con llave por fuera.

-LORENA ABRE LA PUERTA-grité aporreándola.

-Diana, vamos a por tu helado-Escuche que decía Lorena al otro lado de la puerta.

Pegué otro puñetazo a la puerta, pero fue en vano, solo podía hacer una cosa, sentarme y esperar, me senté apoyando la espalda contra la puerta y me abracé a mis rodillas

Escuché que se cerraba un grifo detrás una puerta que no había reparado que estaba ahí, igual que el  sonido de agua cayendo, con los gritos, no pude escucharlo.

-¿Quién hay ahí?-Escuché que decían al otro lado de la puerta-¿Harry, eres tú?

-mierda-Murmure entre dientes.

Lentamente la puerta se abrió y apareció Zayn con una toalla enrollada a la cintura, con el cabello escurriendo sobre su rostro y con una decena de tatuajes sobre torso bien esculpido.

No pude evitar acordarme de la última vez que le vi así… para ser exactos fue la última vez que le vi antes de irme.

-Irene…               ¿Q...que haces aquí?-Preguntó en un susurro.

-Pasar el rato… ¿a ti que te parece?-Dije borde.

Zayn intentó abrir la puerta, pero tuvo la misma suerte que yo: ninguna.

-Estamos encerrados.-Dijo finalmente.

-Bravo, te felicito, no me había dado cuenta de ese detalle.

-¿Por qué eres así conmigo?-Preguntó deslizándose sobre la puerta hasta quedar sentado en el suelo a mi lado.

-¿Así como?-Dije sin mirarle a la cara.

-Distante… dolida…Has cambiado, ya no eres la de antes-Dijo agarrando mi barbilla para que le mirase a la cara como tantas veces hizo tiempo atrás.

-Si quieres vuelvo a ti con los brazos abierto después de todo lo que paso… ¿pero es que no te das cuenta de lo que has dicho?-Dije apartando su tacto de mi cara y levantándome para poder estar lo más alejada de él-Claro que estoy dolida, confié en ti cuando nadie más lo hizo, me prometiste que no me ibas a ocultar nada más, y aún sabiendo las consecuencias que eso podía tener lo hiciste, y lo peor no fue eso, estabais todos compinchados, y ninguno fue capaz de hacer nada por evitarlo.

-Irene…-Dijo abandonado su sitio junto a la puerta para acercarse de nuevo a mi-Perdóname, por favor.

-Perdonar… para que, ¿para que no sirva de nada y vuelva a pasar lo mismo?, no puedo dejar que pase eso, ahora tenemos una hija, de la que tú no te has preocupado ni un minuto, ha crecido, engañada, sin saber quién es su verdadero padre, en la guardería, las madres me miran raro, porque Diana no se parece a Asthon y como Diana dice que es su padre todas creen que yo le engañe, ¿ sabes lo que es vivir con eso? ¿Sabes cómo es vivir con miedo de que tu hija un día llegue a casa y te pregunte que porqué no se parece en nada a su supuesto padre? No, no lo sabes… No sabes nada…-Dije secándome las lágrimas que sin querer habían abandonado mis ojos.

-Irene…princesa…déjame hablar con Diana, contarla quien soy de verdad, decirla lo mucho que la quiero aunque la acabo de conocer, seguro que lo entiende- Dijo secándome las lágrimas con sus pulgares

Me recordaba tanto a como era todo antes que dolía, las palabras cariñosas, su forma de mirarme cuando estaba triste o lloraba, la forma de hacer que le mirara a las ojos…… no había cambiado en absoluto, pero en cambio, yo, lo había hecho tanto, que a veces me costaba reconocerme a mí misma, me faltaba él en mi vida, era él el que la alegraba y la ponía color cada mañana con sus cosquillas, quería mucho a Asthon, pero aunque me costase reconocerlo nunca había olvidado a Zayn.

-Está bien, pero ha salido a su padre, es la niña más cabezota del mundo-Reí.

-Gracias-Dijo dándome un corto abrazo-Voy a llamar a alguien para que nos saque de aquí.

No tardó mucho en llegar un guardia de seguridad con la llave que abría la puerta.

-Muchas  gracias Paul, eres el mejor-Dijo Zayn antes de salir de la habitación.

-Yo también-Dije en un susurro cuando se fue.

Forgetting youDonde viven las historias. Descúbrelo ahora