Capítulo 5

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Siento haber tardado tanto en subir capítulos, pero he estado muy liada y no he tenido tiempo, para compensar la tardanza, voy ha subir un par de capítulo, espero que os gusten y que opineis :)

Empujo la puerta de la cafetería y entro en el atestado lugar, nunca lo había visto mirarla con tanto odio antes, parecía que la golpearía en cualquier momento, cuando Frank le pregunto como estuvo su semana… es que su amigo estuvo fuera y llego esa mañana, pero el la miro con una sonrisa torcida y le entraron temblores, esa mirada de superioridad le daba miedo ¿Qué había hecho Gerard para mirarla asi? ¿Sabrían todos… ? ¿Tendría que aguantar la mirada de todos? Si Gerard la vio irse con Max y pensó… diablos seria el nuevo escándalo… demonios no quería ser la comidilla de todos, no quería estar en boca de esos degenerados…

… nadie la miraba extraño, ¿nadie hablaba cuando ella pasaba, seria que el guardo silencio? Y si lo hizo ¿Por qué? No desaprovecharía la oportunidad de fastidiarla…

- ¿Qué pasa _____, por que Gerard dijo esas cosas? El siempre te molesta pero esto era más que eso.

Respiro hondo y la verdad necesitaba desahogarse un poco, Lynz es su mejor amiga y no conocía nadie mejor como para hablar.

-Tenia cena con Max bebí de mas, me vio y ahora jura que Max y yo… es repugnante pero el lo cree y me figuraba que todos hablarían… no se que trama.

- Dile que es tu hermano. No tienes que aguantar que te diga estas barbaridades, solo dile que Max…

-No tengo por que hacerlo, que se pudra… pero lejos

Había veces que su amiga la fastidiaba, odiaba que también quisiera agradarles a esa porquería de ser humano, los populares, la peste, pero era prácticamente su única amiga, y la verdad no quería más.

Le avisaron que Max la estaba esperando en recepción lo que significaba que estaría en su cuarto esperándola, seguro le traía sus cosas olvidadas, su hermano no tendría cosas de chicas en su departamento de soltero, lo vio salir del ascensor, el no la vio, y algo la hizo detenerse, mirarlo… siempre llevaba su cabello con rizos y había otras en que parecía un plato de tallarines todo revuelto… imposible, no lo dejaba crecer mucho y la verdad a ella le gustaba ese cabello, cuando lo vio por primera vez el tenia mas corto el pelo y le dieron unas ganas terribles de enredar sus dedos en ese cabello rubio pero rápidamente se quito esas ganas, habían pasado tres años de eso, era una adolecente de 17 años bueno le faltaba poco para cumplir 18 como ahora, que faltaba poco para sus 21, el tenia 21, ahora el iba por los 25 y luego se dedicaría a los negocios familiares… ¿Por qué estudiaba artes? Bueno era buen músico… pero el tenia decidido trabajar en las empresas familiares… ¿Por qué se tomaba la molestia? Ya tenia un titulo de empresariales… cuando llego era mas delgado, ahora tenia… era mas grueso y la cara infantil casi había desaparecido, le gustaban los zapatos, no los tenis casi nunca iba con tenis, y los pantalones ajustados… tenia piernas gruesas… y un trasero que hacia babear a las chicas de la academia… sus hombros eran anchos y sus brazos, tenia músculos, nada grotesco pero el chico cuidaba su cuerpo… maldición ¿que estaba haciendo? Frunció el ceño, lo despreciaba y nada mas, no necesitaba mirarlo… todas incluyéndola sabían que el cretino estaba bueno, como un tren, y no necesitaba… maldición debía dejar de mirarlo, el detuvo su paso pero lo reanudo inmediatamente como si algo lo hubiera sorprendido…

- Wow… debe estar buena en la cama para tenerte mendigando en su puerta apenas unas horas después.

Eso la detuvo a ella ¿Qué se creía el imbécil para decir una cosa asi a su hermano? Maldición Max parecía apunto de golpearlo.

- Disculpa niño bonito ¿Qué dijiste?

- O eres un patético o la Deep debe ser salvaje en una cama Frankenstein, aunque nadie lo creería.

- Metete en tus asuntos si no quieres que te rompa la cara hijo.... de…

Acéptalo, eres mía (Gerard Way y tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora