Capítulo 11

41 12 4
                                    

La situación tomo un rumbo catastrófico y cada vez era peor; como era de costumbre en mi vida incluso antes de que los muertos caminaran libremente por las calles. Kat yacía inconsciente en el suelo gracias a tres heridas de bala mientras que yo me encontraba de rodillas con la horrible sensación de que el lado izquierdo de mi cara estaba en llamas, todo esto gracias a los misteriosos individuos que comenzaron a darnos caza a través del bosque.

Abúndate y rojiza, esa es la descripción de la sangre que brotaba de mi mejilla izquierda, y para colmo, al parecer estos sujetos nos habían confundido con el grupo del infame Tomas; mejor conocido como el Nuevo Orden Mundial. Patrick Thompson, era el nombre del aparente líder de nuestros atacantes.

Conocí a Patrick cuando éramos jóvenes, ambos solíamos ser muy parecidos en ciertos aspectos; hijos únicos con notas regulares que normalmente no destacaban mucho. Nos hicimos muy amigos rápidamente gracias eso, pero de manera repentina el cambio, al ser promovidos al noveno año quedamos en secciones diferentes; yo en la C y él en la A, sin embargo a pesar de esto los primeros meses nuestra amistad era aún muy sólida, todo hasta que Patrick descubrió su talento para jugar al futbol, era realmente bueno a decir verdad y gracias a esto le aceptaron sin dudar en el equipo del instituto. Fue a partir de ese momento cuando dejamos de hablar. ¿Los motivos de esto? Pues muy simple: Amigos más cool, chicas por montón y fiestas descomunales en donde el sexo y el alcohol eran protagonistas indudables y en donde obviamente no aceptaban a perdedores como Steven Connors.

Simplemente nos distanciamos, al principio me sentí muy mal, no lo negare...Pero luego con el regreso de mis amigos de infancia; Luis y Stephanie, todo aquello quedo en el pasado y Patrick nunca más volvió a hablar conmigo, cosa que sinceramente ya no me importaba.

Nunca imagine que me encontraría con él en este nuevo mundo.

— ¿Steven?—Pregunto mientras soltaba mi cabello.

—Sorpresa— Respondí mirándole fijo a los ojos y contiendo mis ganas de gritar de dolor.

—No puedo creer que hayas sobrevivido Connors—Dijo quitándose la capucha lo que dejo al descubierto su rostro de facciones alargadas, nariz perfilada y ojos oscuros, esto acompañado de su ahora alargado cabello negro que lucía bastante desaliñado.

Por alguna razón, Patrick parecía ser otra persona; diferente incluso al Patrick futbolista que me dejo de lado. Ahora era mucho más frio e inexpresivo, a simple vista daba escalofríos y su voz también había cambiado drásticamente ya que esta paso de ruidosa y molesta a ser...sombría.

—Lo mismo digo Patrick—Dije mientras me levantaba lentamente.

— Alto—Me dijo Patrick apuntándome con su arma— No te confundas Steven, ya no soy tu amigo así que ponte de rodillas—

Estaba muy estresado en esos instantes. Debía ser audaz con mis palabras para convencer a Patrick de que habían tiroteado a las personas equivocadas.

—Calma Thompson—Replique de inmediato— Haz jodido a la gente equivocada—Dije mientras le demostraba que no tenía intenciones de luchar poniendo mis manos al aire.

—Tus mentiras de segunda no servirán conmigo—Respondió totalmente inexpresivo antes mis intentos de razonar.

— ¡No estoy!—Le replicaba pero el maldito me asesto un cachazo muy fuerte en la cabeza, cosa que me aturdió, luego de esto me golpeo con su puño justo en el rostro mandándome al suelo de forma instantánea con la nariz rota.

—El mundo ha cambiado y yo tuve que cambiar con el—Dijo mientras se ponía en cuclillas— Yo solo quiero una cosa de ustedes y eso es la ubicación de su escondite— Insistió con aquel tono de arrogancia que tanto odiaba.

Crisis:La CaídaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora