Deku

Capítulo tres: Fue real

-No necesariamente tenemos que ganar.- Explicó Izuku.- Tomemos esto como una presentación, una forma de darnos a conocer. Debemos mostrar que nos tomamos las cosas enserio, también que somos fuertes.- El chico miraba los papeles que estaban desperdigados por toda la barra del bar.- Sé que nuestro objetivo es All Might, pero no empecemos por el jefe final.- Miró a Tomura.- Empecemos por un golpe en su orgullo.

Tomura le lanzó una macabra sonrisa, escondida detrás de la mano en su rostro que dejaba ver sólo uno de sus ojos. Izuku tomó dos de las hojas y las puso encima del resto.

-Estos son los héroes que supuestamente estarán en el entrenamiento de la próxima semana. Kurogiri, tú te encargarás de Número 13. Es una heroína principalmente de rescate y no será mucho problema en combate. Nosotros nos ocuparemos de Eraserhead. Según mis investigaciones, su fuerza en combate cuerpo a cuerpo es impresionante, pero no deja de apoyarse directamente en su Don al atacar.- El chico sonrió ligeramente.- Pero no puede anular el Don de alguien que no tiene uno.

>>De los estudiantes no sabemos nada, no realmente. Separémoslos y que los villanos de bajo rango hagan tiempo, aunque no creo que venzan a ninguno. En resumen, nuestro objetivo es neutralizar a los maestros, si no muertos, al menos deberán de quedar incapacitados permanentemente.

-Aunque si nos llevamos a uno o dos estudiantes en el camino no me quejaría.- Tomura soltó una leve risa, la cual desató un pequeño escalofrío desde la espalda baja de Izuku. Realmente no quería dañar a los estudiantes.- ¡Casi lo olvido!- Gritó animadamente, como si no acabara de insinuar el asesinar adolescentes.- Conseguí algo para ti.- Asintió a Kurogiri y el hombre sacó de debajo de la barra una caja metálica.- Estuve pensando bastante y a pesar de que me esforcé, no logré idear un traje que te hiciera ver temible. Por más que quieras esa carita no puede infundir miedo.- Dijo con una suave risa.

-Así que recomendé ir a la elegancia en su lugar.- Kurogiri puso la caja frente a Izuku y con una mano le incitó a abrirla. El chico hizo lo indicado y dentro encontró un bello traje de casimir negro, una camisa de vestir blanca y una corbata verde. Debajo de ésta se encontró con una segunda caja de metal, la cual abrió con curiosidad. Dentro había un bozal de metal que probablemente cubriría la mitad de su rostro.

-Me imaginé que no querrías que se mostrara tu cara.- Tomura quitó la mano que cubría su rostro y le lanzó al chico una enorme sonrisa.- Vi el dibujo de tu traje de héroe al final de tus notas. Lo único que me gustó de ese espantoso traje fue esto.- Dijo, tocando repetidamente el bozal con un sólo dedo.- Espero que con esto, tu apariencia sea un poquito más de villano.

Izuku les agradeció a ambos, haciendo una reverencia y lanzándoles una deslumbrante sonrisa que bien podría haber cegado a alguien. El corazón de Tomura dio un brinco mientras una encrucijada se formó dentro de él; quería proteger esa sonrisa, pero también quería verla destruída, junto con Izuku convertido en un verdadero villano.

Los días pasaron y finalmente el día del ataque a la UA llegó. Izuku estaba terminando de arreglarse en su cuarto, viéndose al espejo y apreciando el bello traje que traía puesto. La tela hacía que sus músculos se marcaran levemente cuando hacía fuerza, demostrando lo mucho que habían crecido en un año. Aún con el saco y los pantalones de vestir puestos, se sentía ligero y ágil. El traje le quedaba a la perfección y no limitaba ninguno de sus movimientos. Miró su mano, donde sostenía el bozal y sonrió ligeramente.

-Irónico.- Dijo en voz alta. Nunca había pensado estar en aquella situación. La simple idea de ser un villano solía parecerle repulsiva, aberrante. Ahora todo había cambiado. Tomó el bozal con ambas manos y lo acomodó sobre su rostro, acomodándolo hasta detrás de sus orejas y cerrándolo en su nuca. Miró el espejo y no pudo evitar comparar su reflejo con el de hace un año. Se veía completamente distinto. Estaba casi seguro de que ni su madre lo reconocería si lo viera así.