Capítulo 1: "____, es un placer verte por aquí."

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“¡____, despierta!” Oí a mi hermana gritar desde afuera de mi habitación. Gimiendo, enterré mi cabeza bajo la almohada en un intento de ahogar sus golpeteos en la puerta.

“¡Déjame en paz!” Aún teniendo la cabeza bajo la almohada, fue lo suficientemente alto como para que pudiera oírlo. Dios, ¿es que no podía parar de amortiguarme?

“¡El tío Dom dijo que tenía que despertarte, se está haciendo tarde para ir a la escuela y tú tienes que llevarme!” Ella casi gimió. “____, estoy segura que no quieres que pierda este importante repaso para mi examen, ¿verdad?”

Exámenes parciales. Eso es todo con lo que mi hermana está obsesionada. A los 15 años de edad, los exámenes y las tareas escolares tienen prioridad sobre todo lo demás. Quiero decir, la mayoría de las chicas de su edad andan vueltas locas sobre el hecho de que Zayn, miembro de One Direction, se hizo un nuevo corte de pelo, o porque consiguieron entradas para uno de sus conciertos. Pero no, no mi trastornada hermana.

Sin embargo, yo soy todo lo contrario. Tengo 17 años y realmente no me preocupo por mi educación. Esto explica en particular por qué siempre estoy en fiestas rodeada de amigos emborrachándonos hasta no recordar absolutamente nada. No me considero popular, pero soy bien conocida en la escuela ya que salgo con Liam, Liam Kahn, mi novio de 18 años.

A medida que continuaba con mis ojos cerrados y deseando que mi hermana dejara de golpear la jodida puerta, mi teléfono vibró iluminando mi mesita de noche. Estiré el brazo a través de las sábanas para agarrar el teléfono. Hablando del rey de Roma, era un mensaje de Liam. El texto decía:

Buenos días sexy, me preguntaba si vas a venir hoy x

Me reí para mis adentros. Decir que no me gusta la escuela sería eufemismo. De hecho, la mayoría de los días conducía a la ciudad e iba a tiendas durante horas. Tecleé una respuesta rápida:

Mi hermana me va a hacer, literalmente, pedazos si no voy. Nos vemos en el estacionamiento, ¿en el espacio de siempre? xoxo

Me respondió al instante:

Claro que sí, bebé. Te veo allí  x

Suspirando pesadamente, decidí salir de la cama y saludar al engendro del diablo que continuaba gimiendo como un cachorro perdido. Abrí la puerta, puse mis dos manos a los lados del marco, prohibiendo su entrada a mi habitación.

“Dios, ____, ni siquiera estás lista. Las clases comienzan en unos 15 minutos y también mi repaso del exa...” Ella estaba comenzando a hiperventilar y no quería lidiar con lo que se venía, por lo que la interrumpí.

“Alex, estaré lista en 5 minutos. Rayos, cálmate.” Rodé mis ojos y me acerco a mi armario.

“¡Bueno, si no estás lista en 5, el tío Dom amenazó con que te castigaría una semana!” La oí cantar, saltar y correr por el pasillo.

Mantuve mi boca cerrada, me abstuve a insultarla y comencé a buscar algo entre mi ropa. Al final me decidí por un par de jeans azules oscuros, un top chaleco negro y una chaqueta ligera de mezclilla azul. Un collar de plumas, unas gafas de sol y mis zapatillas. Ya estaba lista. Suerte que anoche había tomado una ducha (gracias a Dios) y mi cabello ya estaba perfectamente ondulado para el día siguiente. Sin molestarme en hacer la cama, guardé los libros que necesito para las clases en mi bolso de cuero negro. Seguido de un estuche de maquillaje, chicles de menta sin abrir, un cepillo de pelo, un lápiz para escribir, mi perfume y, por supuesto, mi iPhone.

Mientras bajaba por las escaleras, oí a mi tío Dom hablar con Alex. Él está cuidando de nosotras este año, ya que mis padres decidieron que era más importante ir a un viaje alrededor del mundo que nosotras, sus hijas. Lo que sea. El tío Dom fue un empujón más. Incluso cuando el trataba de comportarse como “los padres deberían” y tener control, fue fácil engañarlo para que me dejara hacer lo que quisiera. 

Signed Anonymous [נusтιnвιeвeя&тú]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora