Capítulo 18: "... y a veces sólo tienes que morder la bala y seguir adelante."

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Lanzándome a través de la habitación, me acerqué al balcón de mi ventana donde Justin estaba de pie con un sweater, una chaqueta de mezclilla y unos pantalones de chándal holgados. Haciendo caso omiso a la gran sensación de lujuria que me venció con sólo mirarlo, me tiré sobre una delas bisagras para desbloquear la ventana, pero no se movía. Traté de sacudir un par de veces más, pero sin embargo, cada intento fue en vano. "M*erda." Murmuré en voz baja, rascándome la cabeza. Miré por el vidrio para encontrar a Justin agarrándose de los costados por la risa, señalándome. Maldito idiota.

Di un golpe en el cristal con impaciencia, alertando su atención. Dejó de reír, aunque su labio seguía temblando y él alzó las cejas.

"Cierra tu maldita boca o no vas a entrar." Pronuncié, pretendiendo darle una mirada de muerte. Justin se levantó bruscamente de pie y rodó hacia atrás los hombros con más entusiasmo. Luego me saludó con la mano derecha, antes de colocarla en la espalda. Rodé mis ojos y comencé a trabajar con las bisagras de nuevo. Finalmente, luego de unos cinco minutos me las arreglé para deslizar la bisagra hacia la derecha y abrir la puerta de cristal.

"Eres natural con las bisagras de la puerta." Justin sonrió, colocando un pie en mi habitación. Automáticamente lo empujé hacia la puerta, lo que provocó que se tambaleara ligeramente. Me miró confundido, con su pose más dramática colocando una mano sobre su pecho.

"Contraseña." Pregunté, poniendo ambos brazos sobre cada lado del marco del cristal. Justin levantó una ceja, sonriendo levemente mientras se acariciaba la barbilla.

"Hmm, déjame pensar." Inclinó la cabeza hacia la izquierda, con sus ojos fijos en mí.

"¿Y bien?" Sugerí, perdiendo la paciencia con él sonriéndome. En el segundo que las palabras salieron de mis labios, él se abalanzó, tomando mis dos piernas y me tiró por encima de su hombro. Grité cuando me entró en la habitación, y me llevó a la pared más cercana de la habitación, riéndose de mis protestas para que me bajara. Bajándome, me empujó contra la pared con su cuerpo, sujetando mis dos manos por los costados.

"Te tengo." Murmuró tan cerca de mí cara, que podía oler su aliento de menta. El aroma envió escalofríos por mi columna vertebral.

"No-no dijiste la contraseña." Tartamudeé mientras él se empujaba a sí mismo más cerca de mí.Justin levantó la cabeza, sus ojos llenos de diversión y deseo.

"Ésta es la contraseña." Respiró, colocando sus suaves labios en los míos. Nuestros labios moldeados juntos, presionando ligeramente contra los otros. Entonces, algo cambió. Fuegos artificiales comenzaron a estallar y una sensación de hormigueo me recorrió de pies a cabeza. Sentí que el deseo me superaba, como una corriente eléctrica. Quité mis brazos de la pared y los envolví alrededor de su cuello. Justin sonrió contra el beso, poniendo una mano firma sobre mi espalda. Cuando estaba llegando a sacar su chaqueta de mezclilla de los hombros, la puerta se abrió de par en par.

Los dos alarmados, nos alejamos respirando con dificultad a medida que mirábamos con los ojos abiertos a mi hermana, con cara de suficiencia. Esta era la segunda vez que lo hacía, por causa de ****.

"Lo siento, no quise interrumpir nada." Ella guiñó un ojo, dando una risita de nuevo. Justin la miró de frente, con el pecho todavía moviéndose de arriba hacia abajo.

"Hey, todo está bien." Él dijo en el tono más seductor y ronco que pudo, haciendo que Alex se tambaleara. Se apoyó pesadamente contra el marco de la puerta, sonriendo a la tierra. Oh, genial. Ahora el seducía a mi hermana menor.

"Alex, ¿qué necesitas?" Le pregunté frustrada, luchando por recuperar el aliento. Alex seguía mirando a Justin, haciendo girar un mechón de cabello alrededor de su dedo.

Signed Anonymous [נusтιnвιeвeя&тú]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora