Amor en un videojuego (Kirito x Sinon)

Capítulo 7

Narra Kirito.

Aunque había entrado en GGO para distraerme de lo que hizo Sugu, me dio ganas de hacer otra cosa... Creo que sí fue mejor entrar en el juego. ¡Qué clase de persona podría hacer cosas sucias pensando en su hermana-prima!

En fin, estaba observando desde unas TV's gigantes otro de los torneos creados por los jugadores. Deberían ponerle un nombre, ¿no? Incluso este mismo lugar fue hecho por jugadores—debieron haber gastado muchas monedas— para verlos. La zona parecía una especie de cafetería, cómodo y relajante, aunque tenía una zona para practicar tiros. Me senté en una de las mesas de madera a observar la partida.

Me pareció conocido lo que acababa de ver. Había una tal Llen a la que estaban desmembrando y ví a... Sinon. Se quedó paralizada por un momento sin reaccionar a nada y desapareció, como si se hubiera forzado a desconectarse. Noté que estaba Kisuyu sonriente, al momento que Sinon desapareció puso una mirada frívola, como si estuviera molesta al mismo tiempo, y le dió el golpe final a Llen. Clavó su espada en sus ojos.

Jugador que dice anuncios obvios: ¡Le ganó al demonio rosa!—dijo en voz baja.

¿Tan impactante es que hayan vencido a esa loli?—pensé adoptando la misma pose que tenía al estar aburrido en clases.

???: Disculpe señorita—me dijo un hombre acercándose a mí.

Mierda, otro que cree que soy mujer.

Kirito: S-Soy hombre.

¿¡Y yo por qué titubeé!?

???: Entonces eres un hombre muy adorable. <3

¿Y este es gay o qué? Ay Dios mío, saquénme de aquí.

Kirito: ¡Acabo de recordar que se me hizo tarde para hacer algo!—abrí rápidamente el menú moviendo mi dedo índice—. Me voy—me desconecté.

???: ¡Espera! ... :(

(...)

Me quité el AmuSphere y me quedé mirando el techo, con los brazos extendidos, me cubrí la cara con una mano y pensé "no pude ni siquiera distraerme en el mundo virtual". Me quedé dormido al poco tiempo, ya estaba anocheciendo de todas formas así que no me importó.

Adelantando todos estos hechos, el baile de graduación se aproximaba, así que no me preocupé por el juego. Al otro día me dediqué a elegir la ropa que me pondría para dicho baile. Elegí algo elegante, un esmóquin para ser precisos, y una corbata roja. Mientras lo sostenía en mis manos Sugu se me quedó mirando. Levanté la mirada con una expresión seria, ella se sonrojó y se fue... Preferí no darle importancia y agarré mi dinero para salir a comprar algo.

Narra Sinon.

El internet había vuelto, pero no pude volver a la partida obviamente. Simplemente se movieron los cables por una fuerte lluvia que hubo por mi departamento. Me quedé mirando por la ventana y ví a Kirito en su moto, pensé llamarlo aunque a esta distancia no creo que me escucharía. Me dio curiosidad, pero pasó de largo y al poco tiempo lo perdí de vista.

(...)

Narra Kirito.

El día del baile.

Vestido con la misma ropa que elegí el otro día llegué al baile. Habían muchas personas, y Klein bueno... Estaba sentado solo tomando ponche, mirando a las parejas que se preparaban para empezar a bailar. Como Sinon aún no llegaba, me senté a su lado.

Kirito: Sabía que Asuna te rechazaría...—intenté decir serio pero luego me empecé a reir.

Klein: Te odio :'v... Ah no, espera—tomó otro poco se ponche—, hubo una chica que me dijo que sí, pero aún no llega.

Kirito: ¡¿Qué?!—agarré su vaso de ponche—. Dame eso—tomé un poco y se lo escupí encima—. Esto debe ser una broma.

Klein: ¡No lo es! Sólo mira, ahí viene.

Primero ví sus piernas hasta terminar de levantar mi vista, la chica usaba un vestido negro y largo con una apertura en donde se le podía ver la pierna. Era Lizbeth.

Kirito: ¿T-Tú bailarás con Klein?

Se acercó a mi oído y me susurró.

Lizbeth: Sí, pero no le digas que es porque no tengo con quién más bailar—sentí que sonrió, se alejó de mí y miró a Klein—. Vamos.

Klein: S-Sí —se levantó un poco nervioso y sonrojado, tomando la mano de Lizbeth, luego besó la mano.

Él intentando ser caballeroso...

Me quedé sentado un buen rato con el vaso de ponche que era de Klein. Cuando me levanté a buscar un poco más ví que cerca de la puerta del salón estaba Sinon, con un hermoso vestido rojo y brillante, algo ajustado, que cerca de la cintura tenía una rosa del mismo color del vestido. Usaba unos tacones bajos rojos con detalles blancos, simplemente no pude describir lo hermosa que me pareció verla así, mientras sus ojos radiantes me buscaban entre el mar de personas, preferí ir hacia ella lo más pronto que pude.

Kirito: ¡Sinon!—dije caminando hacia ella justo cuando nuestras miradas se cruzaron—. Te vez hermosa—le sonreí, ya en frente de ella.

Ella se quedó mirándome un rato, sonrió de igual manera y tomó mis manos energéticamente.

Sinon: ¡Vamos a bailar!

Nos acercamos al montón de personas y alcé nuestras manos hasta la altura de nuestros hombros, entrelazamos nuestros dedos y acerqué mi cabeza a la suya hasta que nuestras frentes y narices se juntaran. Sonreí tiernamente mientras empezó a sonar una canción lenta, las luces se apagaron y en su lugar otras lucesitas de colores se movían lentamente por la pista de baile.

Una de mis manos la llevé hasta su cintura. Ella me puso la suya en el hombro, y dimos vueltas, bailando lentamente con elegancia, en cierto momento hicimos el movimiento en el que el hombre agarra la mano de la mujer y hace que ésta dé una vuelta. Luego nos agarramos de una sola mano separando nuestros cuerpos y volviéndolos a acercar—sin habernos soltado la mano, espero haberme explicado—, agarrando la otra mano de nuevo. Y así seguimos bailando un rato más.

Kirito: Sinon—la miré dulcemente a los ojos.

Sinon: ¿Si?—me miraba con alegría.

Kirito: Te amo—en ese momento me detuve y me acerqué a sus labios, besándolos.

Sinon: También te amo—dijo justo cuando nos separamos del beso.