10 años después
-¡Harry!
El nombrado apareció por la puerta de la cocina cuando escuchó el grito de su esposa.
-Dime amor.
-Sube y dile a Teddy que se apure, se le va a hacer tarde y no va a poder desayunar-.Le dijo volteándose y colocando unos platos en la isla de la cocina.
A los minutos de Harry haberse marchado por la entrada de la cocina aparecieron dos niños de 9años idénticos, de oscura y abundante cabellera negra pero más controlable que las de sus padres, ambos tenían los ojos verdes pero con pequeñas moticas marrón claro.
-Hasta que por fin bajan-.Les dijo su madre.
-Está bien que ayer nos emocionamos cuando nos dijiste que llevaríamos a Teddy a King's Cross, pero ya no parece tan divertido-.Habló el niño desanimado.
Hermione volteo a mirarlo cuando se dio cuenta del tono que usó.
-¿Y eso por qué?
-Porque aún faltan dos años para que mi hermano y yo vayamos a Hogwarts, no será divertido conocer el expreso, no poder subirnos e incluso verlo irse junto con Teddy-.Explicó su hija.
Hermione sonrió, desde que les habían contado a sus hijos que eran magos, todas las aventuras que hicieron en Hogwarts y realizado hechizos frente a ellos, andaban ansiosos por cumplir los 11años para poder irse al castillo.
-Pero por lo menos conocerán el Expreso de Hogwarts, créanme cuando les digo que es espléndido...
-Y yo les he dicho que cuando menos lo esperen ya les está llegando la carta de Hogwarts, ya es septiembre, dentro de poco cumplen 10años, después los 11 y cuando menos lo crean estaremos viajando los tres en el expreso de Hogwarts.
Teddy hizo acto de presencia en la cocina, entró con una pequeña castaña de ojos verdes brillantes en los brazos.
-Buenos días madrina-.Le dijo cuándo se acercó a ella dándole un beso en la mejilla.
-Buenos días Teddy, anda, desayuna para irnos y no agarrar mucho tráfico-.Instó.
Teddy se sentó frente a los gemelos, Hermione alargó las manos hacia la niña.
-Dame a Ashley para que puedas comer más cómodo-.Dijo agarrándola.
Cuando la pequeña niña sintió los brazos de su madre separarla de Teddy, se aferró con fuerza al cuello del adolescente.
-¡No! ¡No! ¡Eddy! ¡Eddy!-.Balbuceó.
Teddy la miró divertido, soltó una carcajada cuando detalló la cara de desconcierto que tenía Hermione, se acomodó a la niña en el regazo dándole un beso en la cabeza.
-No te preocupes madrina de todas maneras no quiere separarse de mí-.Le dijo sonriendo.
Hermione suspiró resignada sentándose junto a los chicos con una taza de café.
-Después de los gemelos debería de haberme acostumbrado-.Suspiró.-Pero es difícil, realmente te adoran-.Se resignó bebiendo de su taza.
-¡Hey!-.Se quejó.-Yo no adoro a Teddy-.Aclaró su hijo varón, James, con las mejillas ligeramente sonrojadas.
Teddy y Hermione se miraron sonriendo, claramente le daba vergüenza admitirlo, pero James realmente adoraba a Teddy.

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Infieles
RomantizmInfieles... Esa palabra resuena en mi mente... ¿Realmente somos infieles? Yo lo amo tanto y él me ama a mi. ¿De igual manera se nos puede considerar infieles? ¿Cuando el acto que consumamos no es mas que hacer el amor? Lo que hacemos, lo hacemo...