capítulo 2

3.2K 339 248
                                    

Recuerden que estaré publicando sus comentarios en mi cuenta de instagram, sois las mejores, me río a carcajadas con vosotras. Os amoo🌹

Capítulo 2.
Robos.

En la ciudad habían estado ocurriendo una serie de robos que no dejan indiferente a nadie.

Parecía ser un grupo profesional que se encargaba de saquear las casas por la madrugada o cuando no había nadie y ejercer la fuerza si hacía falta. Todos protegían sus casas y sus vidas como podían...

Entonces le vino otro problema más a Helena. Además de estar sola en una casa enorme durante toda la noche y madrugada... No es que fuese un escenario idílico.

Sus padres le dejaban el número de la policía marcado para que solo tuviera que presionar un botón y por ningún motivo debía abrirle la puerta a nadie, pero... ¿De qué sirve si Helena estará sola TODA la noche?

El profesor Justin Bieber se enteró de esto también en clase. Estaba entrando justo en el momento que Karen y Helena intercambiaban palabras.

—Buenos días —sonrió amablemente dirigiéndose al escritorio para dejar un buen número de fotocopias y su maletín.
—Vente a mi casa —insistió Karen—. O si quieres, Leo y yo podemos irnos a la tuya y pasar la noche contigo.

Justin centro toda su atención en la conversación.

—No —murmura Helena avergonzada—. No hace falta chicos —dijo helena girándose levemente a Leo—. No tenéis que cambiar vuestros horarios por mi. Estaré bien.
—No es molestia para nosotros —sonríe Leo—. Y si te quieres venir alguna noche a la casa de alguno... ¡Tengo la solución! —dijo de repente muy rápido asustando a Helena y a Karen. Incluso el profesor dirigió levemente la vista a Leo—. ¡Mi primo rescata perros de pelea, los adiestra y los da en adopción! Hace nada ha conseguido domar a un rottweiler. Si lo adoptas, podemos entrenarlo de manera que te defienda a ti y a tu casa.
—Leo... No exageres —murmura Karen mientras mira de reojo al profesor acomodar las fotocopias—. ¿No es un poco exagerado?
—Yo creo que es perfecto. Es un perro de un aspecto temible y nadie entrará a casa sabiendo que hay un animal tan peligroso.
—¿Y si llevan armas y le hacen algo al chucho? —jadea Karen.
—Mejor que se lo hagan al perro antes que a Helena.
—Pues la verdad es que soy muy amante de los animales y preferiría que me pasara algo a mí antes que a un perro —dice Helena con una sonrisa. Suspira y se gira definitivamente para quedar enfrente del profesor.

Se miran instantáneamente pues ambos bajan la mirada. Justin, cada vez que la mira, siente cosquillas en el estómago. Es como estar viendo algo que te gusta mucho y que no puedes dejar de ver pero tienes que hacerlo o si no... Sería muy raro.

No le gustaba clasificar a la gente por su aspecto físico pero es que había alumnas mucho más preciosas que Helena. Literalmente, tenía dos o tres enfrente de él. Eran absolutamente deslumbrantes.... Pero no tenían tal vez los ojos de proporciones perfectas, pero sí de un color bonito. No tenían un rostro simétrico pero sí muy atractivo. No tenían labios que siguieran la proporción áurea y contrastarán con las medidas de todo el conjunto facial... Pero sí tenían labios muy bonitos, imperfectos pero bellos.

Era casi una paradoja. Pues Helena iba mucho más allá en el aspecto físico. Incluso en largo de su cabello, su cuerpo, su altura, sus proporciones. Incluso las uñas... Era como si todo estuviera pensado, como si alguien hubiese decidido que iban a poner a alguien perfecto en la tierra y ese alguien es Helena.

—Hoy vamos a hablar de Medea. ¿Qué sabéis de Medea?

Varios alumnos levantaron la mano como posesos. Pero Justin sabiendo perfectamente que era un tema bastante interesante para las mujeres... Le cedió la palabra a una chica del principio.

Olympus: Apolo 《j.b》 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora