Marinette y Adrien se conocían desde hace mucho tiempo desde que tenias 3 años sabían todo del otro eran los mejores amigos de París hasta que Marinette se tuvo que mudar a Italia, ya después de muchos años se encuentran y tienen grandes aventuras y...
Marinette: bueno lo eh pensado y tengo una idea de como no pueden sospechar que no nos amamos( le cuenta idea a Adrien)
Adrien: me parece una buena idea.
HORAS DESPUÉS.
Adrien y Marinette se encontraban jugando y riendo en el jardín, en eso el chico carga a la oji azul con una gran sonrisa.
Parecían muy enamorados. Cualquiera que los vea diría eso.
- hay Adrien eres muy gracioso - decía la chica en sus brazos mientras reía.
- No tanto como tu princesa. - le responde con una gran sonrisa en el rostro mientras bajaba a la azabache.
La Sra. Agreste los estaba observaba desde una ventana de su habitación que tenía de vista al jardín. Ella estaba tan complacida por la escena que observaba. De verdad pensaba que su hijo por fin sería feliz.
- Hay Gabriel... - la rubia suspira mientras su esposo se acercaba a ella - ¿te acuerdas cundo tu y yo éramos jóvenes?
El la abrazo por los hombros mientras ambos miraban la escena - por supuesto, lo recuerdo siempre. - Le da un beso en su muñeca
- Bueno... hay que decirles a los chicos que ya se metan, ya está oscureciendo y ya casi está lista la cena.
- de acuerdo
El Sr. Y la Sra. Agreste bajaron hasta llegar al patio, ahí se encontraban los dos jóvenes platicando muy gustosamente en una banca.
- bueno par de Tortolitos... - Emilie se acerca a ellos con una linda sonrisa - es hora de cenar y después a descansar, ¿ De acuerdo?
- Por supuesto mamá, en un momento vamos.
- claro señora Agreste, no tardamos.
La mayor se retira dejando a lo los dos chicos solo de nuevo.
- ¿ya se fue? - pregunta la ojiazul verificando si ya nadie los observaba
- parece que si. - afirma el rubio
- la chica da un suspiro y comienza a ríe - parece que si se la creyeron...
Adrien también comienza a reír - eso parece, me alegra que se la creyeran. - el se para y se dirige a Marinette - Bueno tenemos que entrar o se enojaran
Adrien se acerca más a Marinette y besa su mano.
La chica ríe por su acción.
- después de ti amor - dijo en tono burlón mientras le guiñaba un ojo
- muchas gracias cariño - ella se sigue el juego.
Ellos entran a la mansión para dirigirse a l comedor y cenar. Una vez terminada la cena, ambos chicos se despidieron y cada uno se fue a su habitación.
Marinette llega a su habitación un poco cansada su se recuesta sobre su cama mirando hacía el techo.
- parece que ya te enamorarte de el ¿verdad? - aparece la pequeña creatura roja en frente de su rostro
La chica se sorprende y comienza a reír - no, claro que no Tikki.
La notita la mira confundida - ¿Entonces porque se veían muy felices allá abajo?
Mientras tanto en la habitación de del ojo verde el miraba su computadora ya con algo de sueño y cansancio.
- parece que ya te enamorarte de ella, ¿no lo crees niño? - el gato decís mientras tomaba un queso de un mueble.
El chico sin ver al pequeño gatito le respondió indiferente - claro que no Plagga, yo solo amo a Ladybug.
- Plagga mira al chico confundido sin dejar de comer su queso - ¿entonces porque estaban muy contentos, divirtiéndose y riendo allá abajo?
Marinette: bueno es que acordamos que...
Adrien: fingiríamos estar felices y "enamorados"...
Marinette: en frente de otra personas...
Adrien: y cuando estemos solos nos evitaríamos...
Marinette: para no pelear ni enfadarnos.
Plagga y Tikki: ¿Solo eso?
Ambos: solo eso y no habrá otra cosa.
- hay Marinette..., no se como puedes soportar tal mentira y peor aún como puedes soportar este matrimonio arreglado... supongo que no eres feliz - la motita mostraba una mirada triste y de preocupación hacía su portadora.
- la verdad yo tampoco se como soportarlo pero bueno... Lo importante es que mis padres estén bien y felices y eso es lo único que me importa, ellos... Me han dado todo y más de lo que nesecito... Y quiero devolverles en favor.
La chica trataba de convencerse a sí misma para no arrepentirse de casarse.
Quería ayudar a sus padres en todo los pudiera y daría todo por verlos felices, y eso incluye su misma felicidad.
Mientras tanto el chico rubio apaga su ordenador para prepararse para dormír
- los humanos son tan raros en ese aspecto del amor.
- ¿a que te refieres Plagga?
- es que todo esto del amor me parece ridículo... Es un sentimiento muy complicado a tal punto de no dejarte dormir o descansar, sería mucho mejor que todos los humanos fueran felices comiendo queso camembert.
- Adrien comienza a reír por el comentario que acababa de hacer el pequeño felino - hay Plagga ... tu no piensas en otra cosa que no sea queso, ¿O sí?
- en eso tienes toda la razón niño, como no poder pensar en esa delicia - en esos se come una gran porción de queso.
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