Ugh...parents.

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Jae sabiwa que su madre quería decirle algo.
La mujer se removía incómoda y le enviaba miradas de reojo cada pocos segundos para seguido aclararse la garganta y abrir la boca…para luego arrepentirse y volver a cerrarla.
Y ella estaba empezando a ponerse nerviosa.
¿No podía sólo decírselo y ya?.
Jaehwa se sentaba con los codos apoyados en la isla,mientras su madre buscaba una receta en su muy adorado libro de cocina,y su padre dejaba caer las naranjas sobre la encimera para hacer su jugo matutino.
Ahora que le prestaba atención,él también se veía un poco intranquilo. Y pálido.
Ella quería rodar los ojos. Se estaban comportando como niños,como si no le hubiesen hecho pasar la vergüenza de su vida al preguntarle,en cuarto grado,si Jongin era el Kim Jongin por el cuál ella tenía un gran e infantil crush y sobre el cuál parloteaba con su hermana mayor y hasta a veces con su madre-lo cuál fue un gravísimo error,claramente-.
Sí,ella se había sentido deslumbrada por su belleza,y,¿quién no?.
Y sí,ella todavía no había perdonado a sus padres.
De cualquier modo,el ambiente se sentía demasiado extraño para ser sólo las diez de la mañana.
—Así que…—ella empezó,para aligerar un poco el ambiente.—¿Iseul nos visita hoy?.
—Mhm.
—¿Dongyul también viene?.
—Sólo tu hermana.
—¿Y por qué él no?.
—Algo sobre una cena con su padre.
Bien. Fue lindo charlar contigo,mamá,pensó. Su padre se mantenía en silencio detrás de su madre,canturreando algo bajo su aliento y cortando las naranjas por la mitad. Parecía ser lo más importante que haya hecho jamás.
Y Jaehwa se puso a pensar.¿Había hecho algo malo?.¿Algo que había disgustado y/o molestado tanto a sus padres para que pasasen de ser lo seres más charlatanes de la tierra a hablar con palabras cortas?.¿Había hecho algo Sehun y no sabían como decírselo?.
Con sus padres,las posibilidades podían ser infinitas,y si Jaehwa quería un poco de paz,iba a tener que tomarlo en sus propias manos.
—Así que...—empezó de nuevo,zampándose un bizcochito dulce entero debido a los nervios,y casi muriendo ahogada. Su madre le dió unos delicados golpecitos en la espalda,mientras que con la otra mano acomodaba un cabello detrás de la oreja. Una sonrisa casi invisible le había curvado los labios,pero en el momento en que Jae pudo respirar con normalidad,desapareció.—¿Van a decirme lo que pasa?. O vamos a ser esta cosa rara.
Su madre la miró con los ojos en blanco mientras la licuadora comenzaba a triturar las naranjas,y el sonido ahogaba sus voces.¡Él lo estaba haciendo a propósito!.
—Mejor empecemos con esto antes de la llegada de Iseul. Ella va a pensar que algo anda mal.—gritó,lanzándole una mirada fulminante hacia su padre cuyos hombros se sacudían debajo de la camiseta de algodón.—¡Papá,apaga esa cosa!.
—¡Lo siento,no te escucho,cariño!.
Su madre rodó los ojos,suspirando mientras se movía hacia la licuadora y la detenía,regañando a su padre y volviendo al lugar en el cuál había estado.
—Mamá...—Jaehwa gimió,reposando su mejilla en la suave superficie de la mesa.—¿Ha pasado algo malo?. Por favor,sólo dilo y acaba con el sufrimiento por el cuál estamos pasando los tres.
Su madre mordisqueó su labio inferior,disparando una mirada suplicante a su marido para que él se encargase de hablar,pero éste sólo negó con la cabeza y volvió a la palidez de hacía unos minutos.
—Nada malo ha pasado,Jae.—suspiró su madre,retorciendo sus manos,luego pasando a juguetear con las hojas del libro frente a ella.—Sólo...
—¿Sólo...?
—Creo que esta es la peor parte de ser padres.—murmuró para sí misma,sujetando el puente de sus nariz,armándose de valor.
Una sonris se abrió paso por los labios de Jaehwa.¿De qué estaba hablando?.
—Sehun...
—¿Sí?.
—¿Sehun y tú...?
Jae frunció el ceño.
—¿Ya has…han…?
Los ojos se le abrieron como platos,con una idea viniendosele a la cabeza.¿Su madre estaba...?.
Una mirada hacia la figura temblorosa de su padre le comprobó que sí. Su madre estaba...
Jae se preparó para su segundo día más vergonzoso (posiblemente).
—Hija,¿eres sexualmente activa?.
Jaehwa quería morir.
—¿Q-qué?.
—Bueno,ahora que estás saliendo con Sehun… como es la juventud estos días y sólo quiero que te cuides. No quiero ser abuela tan joven.
¿Abuela?.
—Y también me preocupan las enfermedades de transmisión sexual...
—Mamá,Dios...
—Sé que Sehun te ama y es un chico responsable y no creo que él haya estado con una chica de esa forma,o al menos no con muchas...
¿Era esto una pesadilla?.
—Yo sólo...Jaehwa...
—Por favor.—dijo su padre,tartamudeando.—Sólo dinos si que están siendo cuidadosos.
—N-nosotros ni siquiera...
—¿No?.—los ojos de su padre brillaban esperanzados mientras esperaba una nueva confirmación.
No.
Ellos suspiraron aliviados. Su madre incluso llegó a secarse el sudor con una servilleta.
Jaehwa quería encerrarse en su cuarto y nunca volver a salir.
—Bien.—su madre dijo,volviendo al ser lleno de energía que solía ser. Aplaudiendo,se enganchó el cabello en una colita alta,y le sonrió brillantemente a Jaehwa.— A pesar de que no hagan nada ahora,ya sabes para fut
—¡Ya basta,por favor!. Vamos a cocinar. Sólo vamos a cocinar.—gimió,enterrando sus manos en su cabello y sintiendo cómo su rostro ardía.
Al menos,pensó,no ha sido frente a Sehun.
Unas horas más tarde,mientras se encargaban de lavar los platos,Iseul se tragó una carcajada y apoyó la cadera en la mesada,cruzando los brazos con cuidado de no ensuciar su blusa con sus manos espumosas.
—Así que...¿mamá y papá ya te han dado la charla?.
Jaehwa gimió,salpicándole unas gotas de agua a su carcajeante hermana mayor.

Adventures of Jaehwa and Sehun.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora