I don't want to.

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Jae lo miraba moverse de un lado a otro. Podía escuchar que estaba murmurando algo debajo de su aliento,pero no qué.
Aunque por la expresión de su rostro,ella sabía que nada bueno.
Ella había intentado anudarle la corbata,pero Sehun no se quedaba quieto. Sus pies no le daban un descanso,y ella casi podía ver marcado el camino por el cuál había pasado una y otra vez.
Fuera,el cielo estaba cubierto por nubes grises y un fresco aire corría,levantando palcenteramente los vellos de sus brazos.
Ella pensó que el día estaba muy acorde al humor de su novio,y se tuvo que tragar una risa.
—Hun.Vas a hacer un agujero en el piso si continuas con esa marcha repetitiva.
Él la miró con un puchero,pero no detuvo su andar.
—No tienes porque estar nervioso. Es sólo tu abuela...
—No estoy nervioso,yeobo.—él le dijo con voz apretada,pasando las manos por su cabello negro y dejando caer la cabeza hacia atrás. Su nuez de Adán resaltaba atractivamente y Jaehwa detuvo el impulso de saltarle encima. Él estaba claramente descompuesto.—Tú eres lo suficientemente afortunada al nunca haber conocido a mi abuela.
Jae sí se rió,levantándose para alisar la tela de la chaqueta,que se había arrugado gracias a los movimientos nerviosos de su propietario.
—Sehun. Todas las abuelas son pequeñas y lindas y tiernas y aman alimentarte hasta que no puedes más.
—No ella.—susurró,mirándola detenidamente mientras ella anudaba su corbata.—No es pequeña ni linda ni tierna. Y es ella quién come hasta no poder más.—se inclinó hacia ella para poder susurrarle en el oído,y un escalofrío le recorrió la espalda cuando sus labios tocaron su piel.—Ella tiene niños pequeños como desayuno.
Jaehwa se alejó con un jadeo dramático,la habitación llenándose con el sonido de su risa un segundo más tarde.
—¡Oh Sehun!.
—¿¡Qué!?. Es verdad,yeobo.
Él,por fin dejó de pasearse,y se dejó caer al lado suyo. El colchón rebotó un poco,haciendo chocar sus hombros y sacándoles risitas.
—¿No puedo sólo quedarme contigo y tu familia normal?.¿Y con tu abuela pequeña linda y tierna,que ama alimentarme hasta que no recuerdo ni mi propio nombre?.
Jaehwa suspiró,enterrando sus dedos en su cabello suave y dándole una mirada comprensiva.
—No.—le dijo lentamente,atrapando sus labios entre sus dedos pulgar e índice para detener la queja que sabía que iba a salir por esa pequeña boca.—Tus padres van a molestarse si no vas,y vas a lastimar los sentimientos de tu abuela,ya que hace mucho tiempo que no la ves.
Los labios de él vibraron debajo de sus dedos,y ella ni siquiera quería saber qué estaba diciendo.
—No. Vas a ir,y punto.
Él rodó los ojos,y Jaehwa lo dejó ir,sabiendo que ese era el acuerdo que podía darle.
—Bueno.—sus labios estaban curvados en un puchero,y él no la miraba,pero todo era parte de su acto,así que ella esperó.—Pero quiero un beso como recompensa.
—¿Como recompensa?.¿De qué?. Si estás siendo un mocoso.—se burló,pellizcandole una pálida y mejilla. Él gimió,y entrelazó sus manos.
—Dame un beso.—gimoteó.—Así podré recordarlo durante esta desastrosa velada a la que me estás obligando a ir.
—Ay,Hun.—se rió,pero de igual manera se encontraba inclinándose hacia él,tomando entre sus manos las mejillas que empezaban a colorearse debajo de su toque,y juntando sus labios con suavidad.
Sehun se había derretido debajo de ella,todo su cuerpo perdiendo tensión mientras sus bocas se acariciaban y sus alientos se mezclaban. Las manos de él estaban hechas un puño en la tela de la camisa de Jaehwa mientras el beso se profundizaba y un sonido bajo se le escapaba.
Ella amaba sus labios,y su sabor,y los sonidos que podía sacarle. Amaba cómo el se volvía suave debajo de sus manos y su boca siempre la esperaba entreabierta. Jaehwa encontraba nuevos mundos mientras lo besaba y sus corazones parecían fusionarse.
—¡Sehun!. Ya es hora de irnos.—ella lo dejó ir con un jadeo y la respiración acelerada. Jaehwa estaba agradecida que la madre de Sehun lo hubiese llamado desde la planta baja,ya que si ella hubiese subido a su habitación,los habría encontrado devorándose al otro,y eso era algo que quería ahorrarles a sus padres.
—¿Por qué paraste?.—le preguntó Sehun,casi sin aire,mientras sus ojos permanecían pegados a su boca.
—Tu mamá está hablándote. Ya es hora de que te vayas.—mientras hablaba estaba poniéndose de pie,estirando los brazos e ignorando el ardor de su boca y los ojos negros de si novio puestos en ella.
—Dame un beso más.
Ella le dió una mirada inexpresiva,pasando los brazos por la manija de la mochila,y dejándola caer contra su espalda.
—Ya conozco ese un beso más,Hunnie. Vete,ahora.
Él le sonrió secretamente mientras se elevaba en toda su estatura y le enredaba los brazos en la cintura.
—Un beso más.—susurró sobre sus labios,con los ojos cerrados y las mejillas arreboladas.
Jaehwa no caigas en la trampa,se repetía. Date la vuelta y ve a casa.
Pero él ya tenía su boca sobre la de ella y había retomado el ritmo de antes.
—Ya...—dijo después de unos segundos,a penas separándose de sus labios cuando él se acercaba por más. Sus besos le estaban debilitando las rodillas y Jaehwa tenía un límite de resistencia. Que...se iba acabando poco a poco.—Ya tienes tu beso.—jadeo,sintiendo sus delgados dedos envolverse en el pelo de su nuca,tirando su cabeza hacia atrás para acomodarla a su gusto. No te estremezcas,no lo hagas...
Sehun apresaba su labio inferior entre los dientes mientras la espalda de Jaehwa chocaba contra la puerta de la habitación,y un sonido ahogado se le escapaba.
Señora Oh,pensaba,mientras sus propios brazos se enredaban en su elegante cuello. Por favor quedese abajo.



¿Verdad que es el gif más tierno del mundo? *sobs*

Adventures of Jaehwa and Sehun.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora