— Vamos princesa, dime qué es lo que pasa.— Es dificil Russ, el solamente... Solamente... ¡Ahg!
— ¿Él? ¿Quien es el?
— Lo amo Russel.
— ¿Qué?
— ¡Ahg! ¡Lo amo Russ! ¡Lo amo! ¡¿No lo entiendes?! ¡Simplemente amo a ese hijo de puta con todo mi corazón! ¡Lo amo! ¡¡Lo amo!!
La chica se echó a llorar, sollozaba tanto que hasta a el afroamericano le dieron ganas de también hacerlo.
— Princesa...
— Lo amo...