【ℕ𝕆 𝕋𝔼𝕄𝔸𝕊 】[KV] [MPREG] ⇨EN EDICIÓN

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Como iba a heredar la empresa de mis padres, ya casi no era necesario asistir personalmente todos los días. Asi que ese día me dedique a dar las entrevistas por radio y por mi móvil que me perseguían por todas partes.

En cuanto hube terminado busqué a Taehyung para poder hablar con él, se estaba resistiendo a darle entrevistas a las revistas y periódicos por cuidar de Kae, y aunque lo entendía, el nacimiento de Kae había sido hace una semana.

— Tae, mi bebé — entré a la biblioteca y él me miró, pero apartó rapidamente la mirada, ya sabia de qué le hablaría. Me senté en el sofá que estaba a su lado y le hice una mueca a Kaewoo lo que hizo que apartara su carita — Taehyung escúchame por favor, trata de atender algunas revistas aunque sea, no dejes que eso se te acumule bebé...

— usualmente me gustan las entrevistas sin importar cuantas preguntas me hagan - dijo haciendo contacto visual conmigo - pero no me gusta que me vayan a preguntar a detalles sobre Kae, me entiendes Kookie?

— entiendo, pero debes hacerlo sabes? Algún día tendrás que salir de aquí y enfrentarte a las cámaras — Taehyung bufó — Mírame, si comienzan a preguntarte más allá de lo que deberían saber, solo respóndeles seco, ellos no pueden obligarte a contestar todo como ellos quieran. Y mientras tu te vas, yo cuidaré de nuestro bebé — Taehyung se mordió el labio inferior y jugó con la manito de Kae.

—  está bien Kookie — dijo levantándose y lo hice también — veré hasta cuantas podré atender, y en cuanto termine...

— paseamos por el jardín con Kae? — dije para complementar y Tae me sonrió

— siempre sabes lo que deseo — depositó un beso en mi mejilla — iré a arreglarme y me iré por ahí mismo. Cuida bien de Kae, y si se caga, solo llama a las sirvientas para que te ayuden okis? — dijo entregándome a Kae en mis brazos y le acaricié su pancita.

—  ve tranquilo mi vida. Cuídate — dije tomándolo con mi otro brazo por la cintura para darle otro beso más lento. Y en cuanto Tae salió besé la mejilla de Kae y él colocó sus manitas en mis mejillas.

— quieres que te cante un poco? — dije sentándome donde anteriormente estaba  Acomodé a Kae en mis piernas y acaricié sus brazitos.

—  señor Jeon? — escuché una voz venir de la entrada y luego se dejó ver tímidamente — puedo limpiar aquí? — dijo Hyuna agitando el plumero y asentí.

Siempre habia tenido la curiosidad de saber de donde mi madre habia contratado a Hyuna, jamás la habia visto en la mansión, y yo conozco todos los rostros que trabajan aquí, pero a Hyuna no vi jamás.

— En un barquito blanco, en el cielo azul, hay un canelero y un conejo~… — comencé a cantarle bajito a Kae mientras lo acunaba en mis brazos y él tardó en mirarme a los ojos, pero en cuanto lo hizo, observó cada una de mis expresiones y con sus manitas trató de tocarme la nariz a lo que reí bajito

— se ven tan tiernos juntos... — dijo Hyuna por lo bajo a lo que alcancé a escuchar y sonreí.

Tomé a Kae y lo alzé un poco y él contrajo sus piernitas mientras movía sus deditos tratando de tocar mi rostro de nuevo.

— Kaewoonie! Kaewoonie! — dije mimándolo y él sonrió mientras pataleaba y lo acosté en mis piernas, con las suyas sobre mi pecho y coloqué sus piecesitos en mis labios para acerles cosquillas y Kae agitó sus brazitos hasta que le saqué una pequeña carcajada.

Como era la única persona que estaba conmigo ahí, Hyuna colocó sus manos en mi espalda hasta llevarlas a mis hombros y sentí un escalofríos

— Hyuna... — traté de decirle que parara, hasta que se acercó peligrosamente a mi oído y cuello y me levanté rápidamente del sofá con Kae en mis brazos.

— No me toques! Qué te ocurre!? Tu trabajo es servirnos, no pasarte de lista. Ya sé de donde mi madre te recogió... — dije enojado y ella tembló en su lugar con su plumero en brazos y salió de ahi llorando.

Suspiré frustrado y tomé el puente de mi nariz, creo que fui algo rudo con ella. A lo mejor solo iba a limpiar el sofá y lo insinué todo...

— ella trabaja sin parar... creo que no fue justo de mi parte gritarle, no crees Kae? — caminé en dirección en donde ella se habia ido y la encontré en la lavandería, sentada en una esquina mientras lloraba y me sentí peor

— Hyuna... — la llamé pero siguió llorando y gruñi — Hyuna... — esta vez me miró — Yo... lo siento, no debí gritarte — ella se levantó rápidamente e hizo una reverencia

— usted discúlpeme por tan penosa escena —  dijo cabizbaja antes de irse y rodé mis ojos

Editado
07/02/19
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