【ℕ𝕆 𝕋𝔼𝕄𝔸𝕊 】[KV] [MPREG] ⇨EN EDICIÓN

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- mmh... Bien, perfecto... pero... y esa cicatriz? - dijo el pediatra colocándose el estetoscopio alrededor de su cuello y rápidamente miré a Kae en busca de aquella cicatriz, y en cuanto la vi, arrebaté a Kae de los brazos de Taehyung para verla más de cerca. ¿Como no lo había notado antes?

- Taehyung, como se lo hizo? - dije acariciando con mi pulgar la cicatriz mientras buscaba la vista de Tae, pero el solo se encogió de hombros sin despegar su vista de su móvil. - Tae, tú te quedas con él todo el día. Que pasó? - dije preocupado, aquella cicatriz no se veía nada bien.

Si los periodistas llegaban a verlo empezarían a especular en contra de Taehyung.

Miré a Kae y él quitó su pulgar de sus labios para colocar su mano en mi nariz y besé su manita: - gracias por todo. Nos vemos en dos meses - dije tomando la mochila de Kae antes de levantarme y salir junto con Taehyung de ahí. 

Miré a Taehyung de reojo. ¿Cuando iba a despegar su vista de su celular?

Me encargué de acomodar a Kae en su asiento y le di su peluche para que se distrajera. Entré al auto y antes de encenderlo, le dirigí otra mirada a Taehyung, pero seguía cayado y sin hacerme caso.

- hey! dame eso! - se quejaba Taehyung en cuanto le quité su móvil y trató de arrebatármelo, pero se lo impedí.

- es enserio? Candy Crush? Creí que hacías algo más importante! - dije al ver lo que tenia a Taehyung tan distraído de mi y de Kaewoo, y para mi sorpresa, iba por el nivel 65. - he intentado que me digas que le ocurrió a Kae, pero no cooperas!

- es enserio Jungkook? - dijo en un tono molesto y ya no trató de arrebatarme su celular - ahora te preocupa Kaewoo?

- siempre me ha preocupado Tae

- pues si quieres saberlo, ve con Hyuna y pregúntale. A lo mejor si te lo cuento tú no me creerás - dijo recogiendo sus cosas y salió del auto, pero sujeté su muñeca antes de que se fuera.

- Taehyung, que te pasa? - dije algo molesto por su comportamiento y automáticamente sus ojos se cristalizaron

- Hyuna me pasa - dijo safandose de mi agarre antes de irse y tirar la puerta. Kaewoo comenzó a lanzar quejidos mientras estiraba sus bracitos hacia Tae y trataba de salir de su asiento, pero como no lo logró y solo vio a Tae alejarse, comenzó a llorar por su ausencia.

(...)

¨habla con Jungkook las cosas. La comunicación en un matrimonio es fundamental¨

Ahora mismo no tenia ganas de hacer eso. Ignoré aquellas palabras de Jimin y no miré hacia atrás mientras me alejaba. Estaba furioso, frustrado y deprimido. Me enojaba que Jungkook no se diera cuenta de lo que estaba pasando, era tan obvio que hasta pensaría que él lo sabe y solo quiere tapar aquello como si no significase nada.

Pero la manera en la que mira a Hyuna si significa algo para mi.

En cuanto me alejé lo suficiente, caí en cuenta de que estaba en medio de una plaza, llena de gente, sin Jungkook, Junghee, o mis guardaespaldas. Estaba solo. Me abrasé a mi mismo y leí uno de los carteles de señalización, honestamente no sabia en donde estaba, pero me sonaba muy familiar.

Divagué por mi mente unos minutos tratando de recordar algo y recordé la dirección que me había dado la chica de aquel día en el parque, era la misma. Estaba cerca.

Me encaminé hacia donde me guiaba la señal, siguiendo a un grupo de personas que estaban muy ocupadas como para fijarse quien era yo y paré justo en un crucé de semáforo cuando este estaba en rojo. Esta parte de Seul era muy transitada. En cuanto se puso en verde, seguí los pasos de las demás personas mientras me abrazaba a mi mismo de lo frió que se estaba poniendo el ambiente, y en cuanto vi que las demás personas aceleraban su paso, levanté mi vista del suelo y miré a un auto desde lejos que se dirigía a toda velocidad, me quedé congelado sin saber que hacer y cuando estaba chocarme sentí que alguien me había jalado de la manga de mi camisa, haciéndome caer a un lado y quebrar mi muñeca al apoyar mi peso en ella.

Solté un gran quejido y sentí lagrimas correr por mis mejillas del dolor que sentía y del miedo que tenia. Voltee mi vista en dirección hacia aquel Ferrari que casi me mata y logré reconocer el cabello y el rostro de aquella chica que se asomaba  por la ventana del copiloto. Mi corazón le dio un vuelco.

Era la inigualable Hyuna.