SIRIUS »BaekSoo

Ventiquattro: solo per un arrivederci

En esta no. No coinciden nuestros universos, ni podemos escribir un verso que describa nuestro amor.
En esta no -Sin Bandera

Para ninguno, las cosas habían logrado ser sencillas a partir de la separación.

Cuando BaekHyun tomó su decisión después de su charla con JongIn, eligió hablar con YiFan, buscando un consejo para todo ese lío de sentimientos que le atormentaban. El chino fue muy paciente y directo, dejándole en claro una única cosa.

Por su parte, KyungSoo se reunió con NaYeon para terminar con su relación. Ella exigió explicaciones, sin embargo, él no pudo decir muy bien por lo que pasaba, acobardándose a último momento para confesarse. Aunque, si lo pensaba, KyungSoo no tenía por qué explicarle más de lo que debía.

Aquel día no era uno de los mejores. Desganado, KyungSoo regresa entrada la noche a su casa. No hay seguro en la puerta, lo que indica que no va a estar solo. Él había agradecido a SeHun salir con su hermano, pero sabe que no puede seguir pidiendo que lo distraiga. Irremediablemente JongIn lo conocía bien como para saber que estaba pasando un mal momento.

Pero esas ideas no son concretadas cuando al entrar a la cocina todos lo esperan para cenar. KyungSoo sabe que no porque él haya tenido un mal rato, todos deban estar igual, y si nadie lo nota, mejor para todos. JongIn se ve emocionado contándole el millón de cosas que había hecho junto a TaeMin. También SeHun se une al recuento de su experiencia y Soo a ratos olvida entre su mar de pensamientos, que debe hablar de algo.

Mientras SeHun y JongIn tontean en la preparación de un platillo, HaYoung se acerca a KyungSoo, llevándolo hasta el salón sin explicar qué. Él la sigue, sabe la finalidad de la situación.

Ella toma un lugar en el sofá, KyungSoo en la mesa de centro para poder verla de frente. HaYoung tiene esa expresión en el rostro que denota preocupación.

—NaYeon me llamó esta tarde y me dijo que terminaron —explica en lenguaje de señas. Mirando rápido a sus espaldas y luego a KyungSoo—. Quiero saber cómo estás.

Él aprieta sus labios antes de suspirar. A HaYoung no le puede mentir, de todas formas se va a enterar y sabe que debe ser sincero.

—Estoy hecho una mierda —responde sin llegar a levantar bien las manos—. Cuando dejé a NaYeon le envié mensajes a BaekHyun. Él no ha respondido.

—¿Por qué hiciste eso?

—Quería saber de él.

KyungSoo mira con culpabilidad el suelo. Se encoge en hombros aunque no quiera y HaYoung le toma del menton para hacerle ver. Ella le regala una cálida sonrisa, pero eso no resulta de instante.

—Tú lo amas ¿verdad? —cuestiona HaYoung con una mueca—, ¿sabes si él quiere esto? ¿le has preguntado a BaekHyun si quería que esto sucediera?

De repente, todos esos focos que habían estado apagados en el cerebro de KyungSoo encendieron. Era como haber recibido la respuesta final de un examen. ¿BaekHyun quería todo eso? Hasta entonces se había dado cuenta que una vez tras otra, durante ese largo tiempo conociéndose, jamás le había preguntado a BaekHyun si estaba de acuerdo en algo. Y en cambio, Byun fue quien en cada situación le empujaba a darle una respuesta para proceder ¿tan egoísta había sido todo el tiempo?

KyungSoo deja de mirar el suelo, está aturdido al encontrarse en aquella situación. Si sus pensamientos eran cientos, ahora se habían convertido en millones. Todos ellos, recuerdos de cada segundo al lado de BaekHyun. Cuando él mira al frente, ya no es HaYoung a quien se encuentra, sino a JongIn que intenta alcanzar sus manos.