Tinta y Papel

Capitulo VII. La indiferencia de Sakura

Durante el transcurso de la tarde, Sasuke se había comportado demasiado serio, algo nada común en él después de que había conocido a la pelirosa, pese a que Naruto era su mejor amigo, había sido Sai quien se había percatado de lo ausente que estaba su amigo.

-Que sucede contigo Uchiha, hay algo que te preocupa, vamos hombre compártelo con el grupo – señaló Sai, mientras entraba a la oficina del azabache cerrando la puerta detrás de él.

-No es nada de tu incumbencia Sai, por favor déjame, tengo demasiado trabajo – contestó sin mirar a su amigo.

-Hmmm no te creo nada, vamos dobe, cuéntale a tu primo, que es lo que tanto te acongoja.

-Enserio no es nada Sai, solo el trabajo, y aun no he evaluado a mis alumnos eso es todo.

-Es sobre Sakura, a mi no me engañas, que paso con ella.

-Nada – menciono sin ánimos – nada.

-Bien... sabes que si no me dices jamás me iré de aquí.

-Hmmm bien tu ganas, esta mañana fui a su oficina, no me mires asi, pero como me había funcionado lo de las flores, quise saber algo más de ella, quería mandarle alguna sorpresa, y pues bueno... encontré una foto de ella con un joven, él le besaba la mejilla mientras ella sonreía, jamás la había visto tan feliz como en esa foto.

-Oh Sasuke, solo son suposiciones tuyas.

-Bueno Sai, pero no fue todo lo que encontré – menciono cabizbajo – en un sobre amarillo encontré una foto de ese mismo tipo con un traje militar, debió haberlo conocido por su padre ya que Jiraya antes estaba en la milicia, además había una carta dirigida a Sakura, ahí decía lo mucho que la extrañaba, y lo mucho que deseaba verla, le decía que la amaba, además le preguntaba si le había gustado el anillo y si al llegar seguirían con los planes, obviamente habla sobre sus planes de boda, ¿de que otra cosa más podría ser?, y por si fuera poca mi desgracia, encontré el maldito anillo Sai, el maldito anillo en su cajón – menciono alterado, mientras se cubría la cabeza con sus manos.

-Dobe, cálmate, no seas temperamental como el teme, vamos necesitas más pruebas para que saques esa conclusión, por dios Sasuke me sorprende que des clases de penal si tú no lo pones en practica, porque no simplemente le preguntas a Sakura y te quitas de dudas de una buena vez, ella ha sido mi amiga toda la vida y jamás me dijo que estuviera comprometida, quizá te estés equivocando.

-¡No es así! Yo lo se, ella me mintió.

-¿En que momento te mintió?, si ella jamás te ha insinuado nada, vamos Sasuke tienes que admitirlo, tú fuiste quien en dado caso creo una relación imaginaria – le reprocho el menor de los azabaches – jamás has sido sincero con Sakura, siempre que te dan tus ataques de celos te desquitas con ella y con los que estamos a tu alredor, y ni siquiera le explicas a ella porque, te has desquitado con el pobre de tu alumno porque siempre pretende a "tu chica", y ahora te comportas como un niño idiota, Sasuke se hombre y se maduro y encara de una buena vez a ella – salió de la oficina, dejando aún más molestó al azabache.

Al llegar a la Universidad, Sasuke para variar se encontraba más que molesto, estaba como agua para chocolate, al llegar a su clase, ni siquiera espero a que entraran todos sus alumnos y cerro la puerta, comenzó a dictar algunas apuntes, cuando a Sakura se le cayo una pluma y se agacho para recogerla.

-Señorita Haruno, quiere por un demonio dejar de hacer ruido, que no ve que estoy tratando de dar mi clase – le grito el azabache, dejando a todos impactados.

-Sensei solo se le cayó una pluma a Sakura, no ha hecho ni un solo ruido – comentó una rubia de coleta.

-Bien, señorita Yamanaka, veo que es muy amiga de la señorita Haruno y siempre quieren estar juntas, salgan las dos de mi clase ahora – exigió el moreno.