Tinta y Papel

Capitulo XIII. Sakura y Sasuke

-Ash frentona, eres muy tardada – le dijo la rubia de coleta, arrebatándole la carta a Sakura, quien comenzó a leer – Sakura... la verdad no se por donde empezar, lamentó tanto haberme comportado como un completo idiota, no pretendo justificar mis acciones, pero quizá los celos me cegaron un poco, ¿poco? Más bien diría demasiado, las cursilerías no van conmigo, siempre me he considerado una persona fría y sin escrúpulos, pero es que desde la primera vez que te vi quede cautivado, recuerdo cuando acababa de llegar a la Universidad, tenía ya 4 años que había salido de ella, no pensaba regresar, pero supongo que tu madre fue muy insistente en que volviera, quería que diera clases de penal, al principio me negué e iba a declinar, pero en esa ocasión te vi tan absorta en tu lectura, te veías hermosa con tu vestido blanco, creí por un momento que eras un ángel, me regalaste desde la primera vez que hablamos una tierna y sincera sonrisa, y lograbas que me ruborizara cada vez que me veías, tenía miedo en un principio de aceptar lo que sentía, pero cuando tu amigo Sasori mostraba interés contigo, me encolerizaba y actué como un completo idiota, quise subsanar el daño, mandándote en aquella ocasión las flores, después todo fue natural, tu cambio a mi juzgado fue en mi beneficio más que al del Juzgado, pues además de compartir la mañana contigo laborando, al atardecer podía disfrutar de tu presencia en mis clases, me sentía satisfecho por el hecho de que compartía tiempo contigo, quería sorprenderte nuevamente y debo confesar que revise en tus cosas de la oficina, ví una fotografía donde aparecía abrazada de un joven pelirrojo, te veías tan feliz mientras él te besaba una mejilla, después vi la carta y el anillo que él te había mandado, supongo que no hace falta decir que me imagine y que por ello me encolericé, pero fue hasta muy tarde, que me entere de que ese joven al cual odie por la fotografía era tu hermano, no pretendo que me perdones, pero me haría muy feliz que lo hicieras, si al menos tengo un poco de esperanza y ya has leído mi carta, me gustaría que pudieras asomarte a tu balcón, aún te tengo una sorpresa..." – finalizó Ino mirando sorprendida a la pelirosa – de verdad le gustabas al Uchiha – agregó sorprendida.

-Se los dije, creo que Temari me debe algo – rió tenten, estrechando su mano hacía la rubia de coletas.

-Que acaso no están sordas, dijo que Sakura se acercara al balcón, vamos frentesota hazlo – exclamo emocionada.

Sakura seguía conmocionada, temerosa se acerco al balcón y cuando se asomó, se percató de la presencia del azabache que estaba abajo esperándola, Sasuke la saludo con una sonrisa de lado y ella le correspondió con una tímida sonrisa, bajó de su balcón para encontrarse con el azabache, ambos se miraron sin decir nada, el pelinegro se alborotó un poco el cabello y después miró de frente a la chica.

-Bueno... ya lo sabes...- menciono casi en un susurro el azabache.

-Sí... eso parece... yo... bueno... no se que decir... - dijo la chica mientras se abrazaba asi misma.

-No tienes que decir nada... creo que esto resulto ser más incomodo de lo que esperaba – sonrió el azabache, mientras rozaba accidentalmente con su mano la mano de la pelirosa, logrando así que ésta se ruborizara aún mas.

-Sabes... tal vez deberíamos irnos a otro lado, las chicas están en mi recamara y conociéndolas deben estar espiando ¿te apetece ir al jardín? – preguntó Sakura sin mirar al azabache, Sasuke se acercó mas a ella, y tomó los dedos de su mano, Sakura lo noto inmediatamente, pero no hizo nada por contenerlo, al contrario entrelazo su mano con la de él, llegaron al jardín y se sentaron en una banca blanca que se encontraba ahí, permanecieron ambos en silencio, quienes aún seguían tomados de la mano, hasta que Sakura se atrevió a hablar.

-Así que... hurgaste mis cosas – rió dulcemente la joven.

-Yo no lo diría de esa manera... más bien, buscaba información – sonrió el azabache.