Tinta y Papel

Capitulo XI. Lo que uno hace por amor

El cumpleaños de Jiraya se acercaba, motivo por el cual habría una enorme celebración por motivo de su cumpleaños, al viejo le gustaba hacer fiestas en grande, y por ende invitaba a casi todo el mundo; a pesar de que a Tsunade no le gustaba mucho ese tipo de fiestas, sabía de antemano que todo mundo hablaría de dicho evento, motivo por el cual no desaprovechaba la oportunidad para poder organizarla en grande, y por ende había gastado una fortuna en el salón, en la comida, en el mejor vino, del cual era muy devota, ya que le gustaba tomar demasiado, y por si fuera poco había gastado una fortuna en su ropa y en la de su preciosa hija.

La fiesta de Jiraya sería dentro de dos semanas, motivo por el cual había decidido viajar a Paris por su hermoso, sofisticado y fabuloso atuendo que usaría el día de la fiesta de su esposo, motivo por el cual le había pedido a Jiraya que la acompañara ya que él, tenía un gusto exquisito por la moda además de que él siempre con tal de verla feliz la complacía en casi todo, mejor dicho en todo, Jiraya por su parte había querido llevar con él a su hija, pues la había notado un poco distante y rara de lo que él estaba acostumbrado a verla, sin embargo al estar en periodo de exámenes ella se había negado a faltar a clases y sólo le había dicho a su padre que se encontraba bien, que no había nada porque preocuparse.

Durante esa semana Sasuke había buscado toparse con la pelirosa, sin embargo no había logrado conseguirlo.

Al fin había llegado el fin de semana en que se llevaría a cabo la fiesta de Jiraya, sería en un gran salón estilo barroco que se encontraba a las afueras de la ciudad de Konoha, el evento era exclusivo pero no por ello había sido sencillo, habían alrededor de 500 invitados, todos esperaban ver al viejo, quien siempre a pesar de todo había estado inundado de una enorme sonrisa, y esa noche no había sido la excepción, se veía deslumbrante, al lado de él iba acompañado por su hermosa y extravagante esposa, quien llevaba un vestido verde, con un escote enorme que realzaba su enorme busto, su cabello lo tenía suelto con una peineta en color plata que combinaba con su maquillaje y sus zapatillas, detrás de ellos se encontraba Gaara quien se veía apuesto con un traje color negro que hacía que resaltara su pálida piel, una camisa blanca y una corbata roja que combinaba claramente con su cabello, por su parte Sakura llevaba un vestido tradicional japonés en color rosa pastel con blanco, su cabello lo tenía recogido en un molote con una peineta plateada, su maquillaje había sido un poco más fuerte de lo que ella estaba acostumbrada hacerlo, lo que hacía que sus ojos verdes resaltaran con lo negro de la sombra, se veía hermosa, y Sasuke se había dado cuenta de ello.

La fiesta había sido un éxito, al término de la cena Tsunade que ya estaba pasada de copas anuncio el compromiso de su hijo Gaara con Azura, a quien todos felicitaron, y posteriormente anunció la partida de Sakura al extranjero, al terminar el ciclo escolar, el cual sería el próximo mes.

Sasuke se sentía inquieto, como demonios la vida le estaba jugando de nuevo otra jugarreta como esa, porque tenía que irse ella.

Como era evidente todos los presentes estaban felicitando a Gaara por su compromiso, así como felicitaban a Sakura por su viaje al extranjero, ella al igual que su hermano se mantenían al margen, aceptando todo tipo de felicitaciones y buenos deseos por parte de los presentes, pero a diferencia de su hermano, ella estaba deseando con ansias que al fin llegara la fecha de su partida.

Durante el transcurso de la velada Sasuke había intentado acercarse en todo momento para estar con la pelirosa pero ella en ningún momento se había encontrado sola, sobre todo que la presencia de cierto pelirrojo (que no precisamente era Gaara) jamás se alejaba de ella.

-No quiero que se vaya – dijo al fin Sasuke sin importarle que su primo Sai quien tanto lo molestaba lo escuchará, después de todo ya estaba demasiado ebrio para ocultarlo.