Toda la vida me he pasado sabiendo que mi padre poco se importaba por mi por no tener el potencial que él quería que quisiera. Aunque aun así, no podía quejarme. Me daba todo lo que le pedía y aunque no era hijo de su esposa sino de una aventura que había tenido, no me había dejado de lado como siempre había creído que hacia su tipo de persona.
Buena no era, pero por lo menos se lograba ver que muy en su fondo, no era tan malo como quería que lo vieran.
Me críe bajo su techo, desconociendo casi el paradero de mi madre, aunque tampoco era que me importara mucho el saber de ella, después de todo, me vendió por una suma de dinero lo bastante exorbitante a mi padre. Lo unico que sé de ella es que una fan empedernida de las drogas y el alcohol y la prostitución fue lo unico que logró mantener luego de gastar todo el dinero que mi padre le había dado en el casino o en apuestas ilegales.
Como ya dije, no me importaba su vida, ni tampoco la de mi padre. Tampoco es que la mía me importara, después de todo, a los trece años caí en las drogas y supongo que gracias a Josh logré salir de ellas.
Aún recuerdo el primer día que lo conocí. Se veía en su rostro que no tenía miedo de los mastodontes que los estaban examinando para saber si tenían potencial.
En sus ojos color bosque no se lograba ver nada, ni siquiera qué era lo que pensaba. Tenía cara de póker como muchos dirían, y creo que eso fue lo que llamó la atención de mi padre al contratarlo en seguida.
Nos puso a entrenar juntos, ya que ambos teníamos casi la misma edad, pero yo, era un holgazán a diferencia de Josh. Él avanzaba con todo, y yo… seguía estancado en el mismo lugar en el que me había quedado. No tenía motivos para avanzar, y la verdad, no quería hacerlo. Pero Josh me dio ese algo que necesitaba para hacerlo y no morir más joven aun de la edad que sabía que moriría.
Yo lucho por mi mejor amigo… mi hermano… y compañero que quiero proteger fue lo que me dijo cuando le pregunté qué era lo que lo motivaba a seguir luego de todas las heridas y los golpes que recibía en los entrenamientos. Y fue allí donde por primera vez vi que se le iluminaban los ojos, arrastrándome con él en el fondo de su alma. Un alma que parecía cortada en pedazos y que me propuse de ese momento en arreglarla.
Aunque sabía que nunca llegaría a ser tan querido como él amaba a Nath, yo quería ser importante para él. Quería que me quisiera… o que por lo menos me considerara como su hermano, o mejor amigo, su mano derecha, como mi padre consideraba a los que estaban cerca de él.
Misiones tras misiones completamos juntos, aunque no eran gran cosa, pero la última que hice con él antes de que callera preso, sabía que daría complicaciones, en especial cuando nos percatamos que el grupo del que nos teníamos que encargar de aniquilar había secuestrado a Nathael.
Lo ayudé a rescatarlo, lo que me costó un tiro en uno de mis brazos, en el cual aún tenía una marca muy particular y cuando terminamos me pidió que me fuera antes de que llegaran los policías. Aunque nunca había entendido porqué sabía que llegarían hasta después de saber quién era verdaderamente Nathael. Hijo de un policía, sabía que le era imposible a Josh el mantener esa relación y por ello se había entregado, aunque… siempre supe que muy en el fondo de su alma deseó que Nath lo protegiera como él siempre lo hizo.
Yo amaba a Josh, y siempre había sido capaz de hasta dar mi vida por simplemente verlo sonreír aunque fueran unos segundos. Pero no me metería con Nath, no lo haría porque sabía que si lo hacía Josh no me hablaría nunca más y no me lo perdonaría. Aunque muy en el fondo quería acabar con la vida de ese mal nacido que no pudo protegerlo y sabía que nunca lo haría.
Las personas enamoradas son capaces de hacer hasta locuras para poder proteger al que aman; lo sé por experiencia, pero, si el amor no es mutuo, ¿por qué uno sigue insistiendo hasta que todo se va de las manos? ¿Por qué Josh seguía insistiendo en esa relación que sabía no tendría futuro? No lo sé y nunca lo sabré, pero por lo menos sé que mi amor no fue egoísta como el de Nath. Yo nunca pedí nada a cambio. Yo nunca lo obligué a hacer nada que él no quisiera. Mi amor nunca fue egoísta, porque yo nunca lo traicioné y aunque morí aun sabiendo que nunca me amaría... siempre supe, que lo seguiría haciendo.
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Bueno n.n aquí termina esta historia n.n
Esperen su continuacion que será dentro de una semana o mejos XD jejeje
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Lo que solíamos ser [TERMINADA]
RomanceLas circunstancias los separaron, tomando así diferentes caminos. El destino los volvió a reunir dos años después de lo que los separó. ¿Seguirán siendo los mismos? ¿Será Joshua capaz de perdonar a Nath por todo lo que hizo?