6~ ¡cuidado mi amor!

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---Oye cariño mi madre nos invitó a su casa.

---¿qué?---respondí mientras seguía caminando y el me seguía.

---¿que, que?

Rodee los ojos y baje las escaleras aun sin detenerme para responderle a mi esposo.

---no es necesario que asistamos ¿verdad? ---hable suplicando que por primera vez mi esposo me entendiera.

---Cristine no ha visto a la abuela desde hace ya algún tiempo.

---no metas a mi hija en esto---dije dando la vuelta y deteniendo a Alberto para discutir esto, o si amigos teníamos que discutir esto.---yo no veo a la niña suplicando por ver a su a-tormentosa y joven abuela

---cuidado mi amor, es mi madre.

---por eso.---lo mire fijamente y retadora como siempre cuando hablábamos de su madre.---la convierte en mi suegra,...mi amor.

---¿que quieres que haga para que accedas?

---nada, por que no lo voy a hacer.---me gire sobre mis pies y camine hacia la cocina con una sonrisa en los labios.

---Pues ya confirme.

Me detuve inmediatamente, literal me quede estática, cerré los ojos y volví a dar la vuelta.

---entonces aquí te esperamos tu hija y yo, por que iras solo. No pongas a prueba mi palabra---dije tan autoritaria que hasta yo me haría caso y sin duda no me atrevería a contra atacar.

---Pues e dicho que iremos y vamos a ir mi amor. ---No espero a que contestará se dio la vuelta demostrando que había ganado. Hay por Dios este hombre si que estaba aprendiendome algo.

Todo estaba listo y en la camioneta, estábamos apuntó de llegar. Cristine estaba inquieta, quería bajarse del auto, tal vez de sentía asfixiada.

---cariño ya falta poco para llegar.

---esta bien mami.

Los arboles pasaban rápidamente por la ventanilla del auto las cuales me daban una gran tranquilidad.

Alberto detuvo el carro y me incline un poco hacia adelante. Me había quedado dormida. Al igual que Cristine.

---frenaste muy brusco.

---es que quiero ir al baño.--- respondió mi sensual esposo.

Reí. Y eso ocasionó que se despertara mi hija.

---¡bienvenidos!---nos recibió mi querida suegra.

---hola mamá, voy a pasar al baño.

---claro que si cariño. Hola lisa y ¿mi nieta?

Cargo a mi hija entre mis brazos quien ya esta mas que despierta---hola, acaba de despertar, venía llorando.

Cerré la puerta y camino hacia mi suegra para saludarla y después entrar.

Cuando Alberto salio del baño bajo todas las maletas del auto y las llevó a la recámara..

---¡hola!---gritaron mis cuñadas al entrar por la gran puerta de la cocina.--- ¡llegamos!.

Una abrazó a su madre y otra besó a mi hija para después saludarme a mi. Mi hija tímida no saludo a ninguna, ni a sus tíos ni primos.

---ha, presten atención---señaló la abuela--- la casa tiene nuevos centros de mesa y son de vidrio la mayoría son de vidrio, así que tengan cuidado con los niños, no vayan a romperlos. Mejor lleven los al patio de atrás.

El amor de su vida.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora