·Casado· || Joerick || Terminada

Nueve

Maratón 1/4

-Debes irte.

Fue lo primero que susurró Joel cuando Erick se acurrucó sobre él a besarlo.

-¿Qué? -preguntó confundido el ojiverde.

-Sabes que debes irte.

-¿Por... qué?

-Riki va a llegar en cualquier momento y no quisiera incomodarlo, haz que viniste mas temprano y ponte tu ropa común -dijo parandóse de la cama y poniendóse unos shorts- Ah, y ... Preparaleun rico desayuno -agregó con una sonrisa.

Él ojiverde se levantó de la cama confundido, tomó sus boxers y se los colocó para luego salir de la habitacion e ir a la suya con un monton de preguntas que le hacian estallar la cabeza.

¿Joel solamente lo usó para tener sexo?

Pero el habia sentido algo, algo que no quisiera sentir, algo que lo confundia y lo hacia sentir mejor que Riki, pero con las actitudes de Joel  se sentia solo una mierda.

Se puso su ropa de trabajo y fue a la cocina para preparar café, luego metió dos tostadas a la tostadera y después sintió como el sonido de las llaves era colocado a la puerta.

Era Riki.

-¿Está Joel? -preguntó mientras se sacaba la corbata y el traje, quedando en una camisa desabrochada.

-Si... supongo que duerme, no lo sé. -respondió mientras servia el café y colocaba las tostadas en un lindo plato -¿Quiere desayunar aquí o se lo llevo arriba?

Riki miró picaramente al ojiverde, mordió su labio y se sentó en una silla de la mesa.

-Creo...Que lo tomaré aquí. -sonrió a Erick y este obedeció llevándole el desayuno a la mesa, luego dió media vuelta para irse a su habitación.

-Espera, espera... ¿A dónde vas? -preguntó con la misma sonrisa picarona.

-A-a mi habitación...

-¿Por qué no limpias el suelo? creo que pise mierda mientras venia para aquí, vamos... limpia el suelo para mi...

¿Para él?

Erick solo tragó saliva y fue hacia la despenza a sacar un trapo un balde con agua, luego volvió a la cocina y se agachó lentamente para colocar el trapo mojado en el piso, empezó a fregar por las partes mas lejos de su jefe y luego fue hacia donde estaba él, ya que era la única parte que faltaba fregar. Empezó por debajo de la mesa hasta que luego, en cuatro, fue por la silla de Riki. Cuando le dió la espalda, sintió como el cuerpo de su jefe era posado sobre él suyo.

-¿Q-qué hace?

-No me gusta chantajear a la gente, Erick, pero si no me dejas tocarte a mi manera, voy a tener que despedirte.

Las manos de su jefe pasaron por dentro de su camisa tocando su abdomen.

No... él no lo hacia como Joel.

-Espere,espere... -dijo tratando de salir.

-Erick...

-¿Puede ser en otro momento? -cualquier excusa solo para salir de esas malditas manos.

-¿Qué momento?

-Uno en el que la casa esté vacia... -su excusa era como si quisiera esto, pero solo deseaba salir de ahí, pero no podia, necesitaba el dinero.

-Mas tarde mandaré a Joel a comprar encajes, que quedan fuera de la ciudad. Quiero que subas a mi habitación -se acercó a Erick y empezó a acariciar su barbilla- si no... Voy a tener que despedirte.

Asintió y salió corriendo hacia su habitación

¿Qué había pasado? ¿Por qué su jefe lo queria cojer?

Apenas habian pasado dos horas desde que despertó y Joel ya lo habia hechado de su cama y Riki lo había estado seduciendo, según él.

Pero lo mas importante... ¿Cómo haría para decirle a Joel que no fuera?