Six

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- Anne -

Detuvo el coche frente a un chalet, no muy lejos del colegio. No me debería sorprender, estaba dando clase a hijos de políticos, hombres de negocios, deportistas, etc. Era de esperar que vivieran en este tipo de casas.

- Vamos profe, voy a enseñarte mi habitación- dijo Jane tirando de mí hacia dentro de la casa

- Pero mis cosas...- dije porque no me había dado tiempo de coger el bolso del asiento del copiloto

- No te preocupes, te lo llevaré dentro- dijo Zack casi dando voces

Entramos a la casa y directamente fuimos al piso de arriba. Jane se metió en una de las habitaciones y yo la seguí de inmediato. Miré a mi alrededor y no pude evitar poner una mueca. No porque no me gustara, sino para ocultar la nostalgia que me había venido de repente. Su habitación, me recordaba a la mía, cuando aún vivía con mis padres. Era de un tono rosa palo, con una cama demasiado grande para una niña de la edad de Jane. Tenía una casa de muñecas, varios peluches, dibujos pegados en la pared... Todo como una princesa

- ¿Te gusta?- preguntó Jane 

- Me encanta- contesté. Mientras miraba todo lo que había a mi alrededor, pude fijar la vista en un marco. Era un pequeño caballo blanco, con lazos en el pelo. Seguro que ese era Ice Cream

- Ese es Ice Cream- dijo Jane señalando la foto

- Es precioso- contesté. Me acordé enseguida de Canela, quería ponerme a llorar, pero estaba aquí de celebración, así que me aguanté 


- Zack - 

Durante el trayecto de vuelta a casa, no pude quitarme la cabeza los labios de Anne pegados a los míos. No pude quitarme de la cabeza el beso tan inesperado que tuvimos. Era una locura, porque tenía algo con Harold, mi mejor amigo. Y además era la profesora de Jane. Pero no podía quitármelo de la cabeza. Seguro que soñaré incluso con esto.

Al llegar a casa, Jane se llevó enseguida a Anne. Margaret y yo entramos en casa y dejé el bolso de Anne en mi despacho. En cuanto fui a la cocina, Margaret me miraba sonriente

- ¿Te ha gustado el beso?- preguntó

- ¿Qué?- pregunté haciéndome el tonto

- Zack, os he grabado. No lo habrá notado el resto, pero yo si lo he notado. Parecíais unos adolescentes enrollándose por primera vez

- Dios Margaret, no nos compares con adolescentes. Hace mucho que pasé esa época

- ¿No te gustaría intentarlo con ella? Parece buena chica, además adora a Jane tanto como tú. Y Jane la adora. No creo que vaya a tener problema con que salgas con Anne

- Es la novia de Harold. Bueno, tienen algo

- Vaya, como siempre, se te ha adelantado el de los rizos

Era verdad, siempre se adelantaba en todo. Todo lo que tuviese que ver con chicas. Menos mal que conocí antes de Julie, la madre de Jane. Si no, ahora mismo Harold sería el padre de Jane y eso me rompe el corazón. Aunque, desde que Julie llegó a mi vida, seguida de Jane, no me había importado menos, que Harry se llevase a todas las chicas.

- Voy a llamar a las chicas. Llama a Harold, a ver donde esta- dijo Margaret

Asentí y marqué el numero de Harold. Dos pitidos, tres, cuatro, y a la quinta la coge. Menos mal, porque sabe que si a la sexta no lo coge, le cuelgo y no vuelvo a llamar.

- ¿Dónde estás?- pregunté 

- Sigo en la oficina. Pero tranquilo, no es necesario que vengas. Ya lo verás mañana. Te llamo para ver si seguís con la fiesta

- Okay. Gracias por tu ayuda

- No es nada. Para eso estamos los hermanos 

Sonreí, siempre habíamos estado el uno para el otro, a pesar de todas las chicas o todo el dinero que se había interpuesto entre nosotros. 

- Hasta luego

- Hasta luego 

Colgué y vi a las tres señoritas sentadas en la mesa, listas para comer. 

- ¿Pizza?- preguntó Jane

- ¿No te gusta?- preguntó Anne sorprendida 

- No solemos comer esto...

- ¿No le dejas comer Pizza a Jane?

- Es que no es muy saludable- contesté

- Dios Zack, le estás privando el cielo a Jane. Mira Jane, coge una porción, dóblala un poco y métete todo lo que te quepa en la boca- dijo Anne mientras hacía lo que decía. Ese comentario encendió la poca chispa que me quedaba en el cuerpo. Me imaginaba a Anne y a mi en otra situación, haciendo justo lo último que había dicho

- ¡Zack!- gritó Anne 

- ¿Qué?- pregunté volviendo a la cruda realidad

- Que si me pasas más patatas. Jane y yo nos hemos quedado sin munición

- ¿Tan rapido?

- No. Pero es que llevas embobado un buen rato, y si no fuese porque está Jane, te hubiera dado un puñetazo en el brazo. Porque sé que sólo te has centrado en la última frase que he dicho- dijo lo último casi en susurro. La entendí porque la tenía al lado, que sino.. 

Sonreí y le pasé las patatas a Anne. Para ser tan delgada, comía por dos. Todo lo que encontraba, se lo zampaba. Jane no había dejado de reír con las tonterías que hacía Anne. Y Anne no dejaba de reír con las tonterías que intentaba imitar Jane. Margaret, como yo, simplemente se reía. 

Después de la comida, Jane insistió en que viéramos una película. Así que nos fuimos todos al salón y nos acomodamos en el sofá, para ver alguna película cursi de las que le gustan a Jane. 

Y como sabía, había puesto una de sus princesas Disney. En mitad de la peli, Margaret se fue, dejando un hueco vacío entre Anne y yo. Miré a Anne, y la vi llorando. Me acerqué a ella a abrazarla por puro impulso. Sentí como se tensaba, pero al ver mi cara, se fue suavizando, incluso apoyó su cabeza en mi hombro. Nos quedamos viendo la película así. Anne apoyada en mi torso, y con Jane tumbada en las piernas de Anne. 

- ¿Estás bien?- le susurré a Anne, a lo que ella asintió- ¿por qué lloras? Son solo dibujos animados...

- No sólo son dibujos animados Zack... Además, no se por qué lloro, simplemente soy demasiado sensible. 

Le di un beso en la cabeza y me apoyé en ella. Me sentía tan cómodo a su lado.

Best Mistake |Z.M|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora