La verdad que oculta el océano

Verdades Dolorosas

Su respiración era agitada, las lágrimas recorrían sus mejillas. Deseaba que fuera un sueño, poco a poco se fue calmando pensando que había sido un horrible sueño. Los que estaban con ella en el mar la miraban preocupados y  con cierto recelo. Con velocidad se levantó haciendo pie en el fondo, en ese instante se percató de que su tapadera había sido ampliamente perjudicada. Todos sus amigos la habían visto luchar contra las furias, el día que más temía había llegado y no sabía como se iban a tomar lo que ella ocultaba.

Sin mediar palabra Meredith va hacia la arena sin mirar a sus amigos que la siguen detrás. Su hermana apuró un poco el paso para alcanzarla una vez llegó a su altura Meredith le dice sin mirarla.

- Debemos hablar con ellos y ver como reaccionan -

- Eso nos pondrá más en peligro Meredith, no sería mejor modificar sus recuerdos -

Meredith se detiene en seco y encara a Diana.

- Ya me harte de mentirles, de ocultarle quien soy, que si no fuera por ello nada de esto habría pasado-

- Pero eso los expondrá a los peligros que tiene saber lo que les llevas ocultando dos años. Meredith, - apoya su mano en el hombro de la ojiazul- Sería lo mejor seguir manteniendolo en secreto -

Se frena en seco y la mira directamente a los ojos.

- Y tu no me puedes negar que estas cansada de estar aquí entre ello, ocultando lo que eres y atrapada en este mundo -

Esto deja a Diana trastornada y pensativa. Meredith continúa el paso hacia sus amigos una vez allí se ve atosigada por sus amigos con un grito consigue que todos se callen.

-Se que tenéis mucha dudas .Os lo explicaré todo a su debido tiempo, pero necesito que os mantengais  callados para poder contaros todo sin ser interrumpida y evitar tardar más.

Todos asienten conformes. Meredith respira profundamente, nota la mano de Diana en su hombro dándole fuerzas y valor para contar lo que lleva dos años ocultándole a aquellos que considera sus amigos.

Con nerviosismo comenzó desde el principio. Es decir diciendo quien era realmente,luego ya vendría lo demás.

- Esto..... Mi nombre es Meredith como todos sabéis - asienten casi a la vez - pero no soy hija de los padres que todos conocéis, más bien ellos no tienen ningún hijo. - esto produjo el desconcierto entre sus amigos - Lo que visteis hoy es tan real como que ahora mismo me tenéis delante y me estáis oyendo hablar. Yo..... No se como explicarlo y tampoco como decirlo. -

- Pues dilo sin pensar, no le des más vueltas por que será cada vez más complicado decirlo -

- Tienes razón Alba - Meredith coge aire profundamente - Soy una semidiosa que al cumplir 18 años me han básicamente obligado, a bajar del olmipo para aprender sobre vosotros y Diana no es mi hermana mayor sino que es Eris la diosa de la discordia que ha venido conmigo a vigilarme para que no se me vaya de las manos. -

Meredith soltó toda esa información de golpe sin detenerse ni para respirar. La cara de sus amigos estaba entre alucinados y recelosos con el tema. Nadie decía nada lo que ponía más nerviosa a ambas chicas. De la nada algunos se ríen, otros aún están asimilando la información.

- ¿Dónde le veis la gracia? -

- Tía te inventas cada cosa pero esta vez te has superado - Se vuelve a reír David

- No estoy de broma - su rostro se vuelve serio

- Venga ya Meredith y que va ser lo siguiente, que tienes un royo con el todopoderoso Ares dios de la guerra -

Una carcajada proviene de Eris y Meredith en respuesta le da una colleja. Le lanza una mirada de advertencia a que ni pronuncie una palabra al respeto.

- Chicos no estoy bromeando, esto es en serio, sino creéis que jugaría en un momento así, algo muy malo está ocurriendo y no quiero que os pase nada malo.- 

- Si no quieres que nos pase nada malo aléjate de nosotros, eres una despreciable mentirosa que sólo ha jugado con nosotros. -

Estás palabras dichas por Daniel le hicieron mucho daño a Meredith  ya que lo consideraba su mejor amigo y ahora la despreciaba con toda su alma.

Esto provocó que la furia de Eris aumentase y que le entrarán ganas de partirle el cuello, pero se vio calmada cuando oyó el sollozo de Meredith.

Daniel recogió sus cosas y se fue seguido por unos cuantos. Esos gestos generaban un gran dolor en Meredith ya que los consideraba parte de su familia.

Solo quedaban unos pocos con ella en busca de respuestas o aún asimilando todo.

- ¿Por que no nos habías dicho nada de esto?

- Emilio yo pensé que era lo mejor y supongo que os habré hecho daño a todos. -

- Necesito tiempo para pensar en todo esto Meredith y el tiempo ya dirá que pasa -

Se despide con un abrazo y se va seguido de los que restaban en la playa que se despidieron de ellas con caras largas y tristes. Una vez los perdió de vista en la lejanía el mundo de Meredith se desmoronó ante ella. Eris inmediatamente la abrazo con fuerza prometiendose a si misma que jamás la dejaría sola. En ese momento se puso a pensar que cuando era más pequeña no la soportaba pero ahora se veía incapaz de vivir sin ella a su lado casi todos los días.

Estuvieron así durante un largo tiempo sin ninguna decir nada. Una vez Meredith paro de llorar se separaron ligeramente.

- Gracias Eris, no se que haría sin ti y gracias por estar a mi lado y no abandonarme. -

- Jamás lo haría, te recuerdo que eres mi hermana pequeña te guste o no.-

- Me encanta que lo seas. Aún que eres una abuelita. - se ríe de la cara que pone Eris

-Un respeto a tus mayores niña -

Ambas se ríen intentando olvidarse de lo ocurrido. Cuando se dan cuenta el sol se está poniendo por el horizonte, Meredith suspira tristemente ante ese paisaje.

- Deberíamos volver ya a casa -

Meredith asiente y ponen rumbo a casa pero no a la que todos piensan, si no a su verdadero hogar.